/ viernes 2 de febrero de 2018

¿ Administrar la abundancia? ¿Otra vez?

En 1981 México era el cuarto país productor de petróleo del mundo, sólo por detrás de la Unión Soviética, Arabia Saudita y Estados Unidos. Los ingresos petroleros rebasaron los 100 mil millones de dólares durante el sexenio de López Portillo quien, emocionado por la explosión de riqueza, declaró

“ Los mexicanos que han sufrido carencias ancestrales, ahora tendrán que aprender a administrar la abundancia”.

Bueno, todos conocemos la historia. El barril de petróleo – 35 dólares en tiempos de JLP – llegó

a sobrepasar los 100. Pero en 2013 – maldición gitana – se desplomó  a 20. Ayes y crujir de dientes, recortes, gasolinazos. Ahora la mezcla mexicana está alrededor de los 70 dólares y, gracias a la reforma energética,

a las Siete Hermanas les ha vuelto el apetito que tuvieron que reprimir entre 1938 y 2012. Una de ellas, la angloholandesa Shell, ganó nueve de los 19 bloques ofrecidos en la Ronda 2.4. Los  proyectos subastados tienen el potencial de aportar hasta 1.5 millones de barriles de petróleo al día, y las empresas ganadoras pagarán el 64% por cada barril que extraigan, generando hasta 93 mil millones de dólares de inversión, 33 mil millones de dólares más que la suma de todas las inversiones previstas en las siete rondas de licitaciones anteriores desde que se abrió el sector.

Noventa y tres mil millones están muy cerca de los 100 mil que inspiraron la profecía de don Pepe. Y la pregunta es ¿ se acerca el momento el momento de que los mexicanos nos apliquemos por segunda vez  a aprender la administración  de la abundancia, cosa que evidentemente no logramos la primera ?

No vivirá mucho quien no lo llegue a saber. Así como ayer recomendábamos  a los cuartos de guerra de los presidenciables  que añadieran la promesa de crear

una Secretaría de la Soledad a las plataformas de sus

aspirantes, creemos que sería una muy atractiva oferta de campaña el añadir al gabinete una Secretaría de la Abundancia, para formar a los Administradores de la

Riqueza  que se nos viene encima.

López Portillo quería que fueran todos los mexicanos con carencias los que aprendieran a manejar su nueva prosperidad. Yo sugiero que, en esta oportunidad, las metas sean más modestas.

La anterior fue buena noticia, pero hay una mala

Janet Yellen se fue de la Fed, pero no sin profetizar que la inflación subiría durante 2018 en Trumpilandia.

Eso ya impactó Wall Street y no tarda en replicarse en

Reforma y Rhin. O sea, que subirá el costo del dinero

allá y aquí, con una carrerita más del efecto dominó.

Buenos días. Buena suerte.

 

juegodepalabras1@yahoo.com

Sitio Web: juegodepalabras.mx  

 

 

En 1981 México era el cuarto país productor de petróleo del mundo, sólo por detrás de la Unión Soviética, Arabia Saudita y Estados Unidos. Los ingresos petroleros rebasaron los 100 mil millones de dólares durante el sexenio de López Portillo quien, emocionado por la explosión de riqueza, declaró

“ Los mexicanos que han sufrido carencias ancestrales, ahora tendrán que aprender a administrar la abundancia”.

Bueno, todos conocemos la historia. El barril de petróleo – 35 dólares en tiempos de JLP – llegó

a sobrepasar los 100. Pero en 2013 – maldición gitana – se desplomó  a 20. Ayes y crujir de dientes, recortes, gasolinazos. Ahora la mezcla mexicana está alrededor de los 70 dólares y, gracias a la reforma energética,

a las Siete Hermanas les ha vuelto el apetito que tuvieron que reprimir entre 1938 y 2012. Una de ellas, la angloholandesa Shell, ganó nueve de los 19 bloques ofrecidos en la Ronda 2.4. Los  proyectos subastados tienen el potencial de aportar hasta 1.5 millones de barriles de petróleo al día, y las empresas ganadoras pagarán el 64% por cada barril que extraigan, generando hasta 93 mil millones de dólares de inversión, 33 mil millones de dólares más que la suma de todas las inversiones previstas en las siete rondas de licitaciones anteriores desde que se abrió el sector.

Noventa y tres mil millones están muy cerca de los 100 mil que inspiraron la profecía de don Pepe. Y la pregunta es ¿ se acerca el momento el momento de que los mexicanos nos apliquemos por segunda vez  a aprender la administración  de la abundancia, cosa que evidentemente no logramos la primera ?

No vivirá mucho quien no lo llegue a saber. Así como ayer recomendábamos  a los cuartos de guerra de los presidenciables  que añadieran la promesa de crear

una Secretaría de la Soledad a las plataformas de sus

aspirantes, creemos que sería una muy atractiva oferta de campaña el añadir al gabinete una Secretaría de la Abundancia, para formar a los Administradores de la

Riqueza  que se nos viene encima.

López Portillo quería que fueran todos los mexicanos con carencias los que aprendieran a manejar su nueva prosperidad. Yo sugiero que, en esta oportunidad, las metas sean más modestas.

La anterior fue buena noticia, pero hay una mala

Janet Yellen se fue de la Fed, pero no sin profetizar que la inflación subiría durante 2018 en Trumpilandia.

Eso ya impactó Wall Street y no tarda en replicarse en

Reforma y Rhin. O sea, que subirá el costo del dinero

allá y aquí, con una carrerita más del efecto dominó.

Buenos días. Buena suerte.

 

juegodepalabras1@yahoo.com

Sitio Web: juegodepalabras.mx