/ miércoles 6 de septiembre de 2017

Cuchillito de palo | Rebelión de la granja

López Obrador se traga una sopa de su propio chocolate. La Rebelión en la Granja se le revierte y el zafarrancho de su dedazo, a favor de Claudia Sheinbaum, le asesta un manchón a su Morena, en donde se hace gala de una estructura “distinta” a la del resto de las fuerzas políticas.

Del cuento de la encuesta, de la que saldría el candidato a la jefatura de gobierno de la CdMx, se ha dicho todo. Opaca y hecha a la medida de los deseos del dueño.

Los suspirantes aceptaron las reglas del juego. Lo que no se esperaba era el twitter, por el que se dio a conocer a la triunfadora, humillación directa a quien se pensó el gallo giro del cotarro (Ricardo Monreal).

A partir del destape, el zacatecano confirma su paralelismo con el gran gurú. Lo primero fue victimizarse, estrategia propiedad privada de un López Obrador, al que le ha resultado muy redituable.

En su papel de “clon” de AMLO, el actual jefe delegacional de Cuauhtémoc, se transforma en el gran mesías: solo él cuenta con las cualidades para sacar adelante a la capital.

De entrada le exige a su partido, transparencia, autocrítica y rectificación. Lo oyen como quien oye llover. Su intento porque Andrés Manuel dé marcha atrás, inútil. El necio fue él al no escuchar el discurso de su mecenas, quien tiempo atrás había dicho que se inclinaba por Claudia.

Envuelto en la actitud de “plañidera”, lloriqueó alardeando de sus 40 años de político, 20 dedicados al Pejelagarto. Hizo memoria de su salida del PRI, cuando no le dieron la candidatura a su natal Zacatecas y tuvo que emigrar al PRD, por quien obtuvo la gubernatura. Desde entonces se alió con su “compañero de viaje”, el que ahora lo deja colgado de la brocha.

Se enfunda imagen de Hombre de Estado y parafraseando a Jesús Reyes Heroles (Que se debe haber revolcado en su tumba), así califica a AMLO.

Hace gala de “culto” y saca a relucir autores y obras, mientras utiliza un lenguaje de doctor en derecho (Título objeto de “sospechosismo”, al cuestionarse la velocidad a la que lo obtuvo).

La que se cinchó la titularidad de la candidatura, le contestó con un video, en el que lo conminó a aceptar los resultados. Salió a relucir la soberbia y la arrogancia de la fémina, conocedora de los mayores secretos de Andrés Manuel. Cuánto tiempo le tomará volver a llamarnos “imbéciles” –como lo hizo en sus épocas de gloria, al insistirle la prensa sobre el costo de los segundos pisos-.

De Sheinbaum tiene AMLO la incondicionalidad absoluta. Lógico que la apuntara con su falange divina, para encumbrarla a un cargo determinante en la política y la ¡economía!

Desde que se abrieron las puertas de Morena, a los “pecadores”, la afiliación a su registro, limpia de cualquier culpa. De Lino Korrodi, a Barbosa, el líder de los ferrocarrileros, o el del Metro y tantos otros prófugos de organismos políticos, la bendición del tabasqueño los transforma en entes puros y sin mácula. Los últimos “inmaculados”, la Padierna y Bejarano, de mega oscura trayectoria.

Pero, si en el PRD se habla de tribus, en Morena se empiezan a multiplicar. Nada qué ver entre un Monreal y el resto de “recientes aparecidos”, y una Bertha Luján (De trayectoria vertical y comprometida con un auténtico cambio). ¿Y los radicales que se incrustan gozosos? ¿Tendrá AMLO la capacidad para “serenarlos”?

Habrá qué ver si este “menjurje” de personajes funciona y si AMLO logra “purificar a tanto pecador”. Uno, por lo pronto, ya le salió rejego y, por supuesto, ya le llamó, con su consabido autoritarismo, traidor y busca cargos.

catalinanq@hotmail.com

Tuiter: @catalinanq

López Obrador se traga una sopa de su propio chocolate. La Rebelión en la Granja se le revierte y el zafarrancho de su dedazo, a favor de Claudia Sheinbaum, le asesta un manchón a su Morena, en donde se hace gala de una estructura “distinta” a la del resto de las fuerzas políticas.

Del cuento de la encuesta, de la que saldría el candidato a la jefatura de gobierno de la CdMx, se ha dicho todo. Opaca y hecha a la medida de los deseos del dueño.

Los suspirantes aceptaron las reglas del juego. Lo que no se esperaba era el twitter, por el que se dio a conocer a la triunfadora, humillación directa a quien se pensó el gallo giro del cotarro (Ricardo Monreal).

A partir del destape, el zacatecano confirma su paralelismo con el gran gurú. Lo primero fue victimizarse, estrategia propiedad privada de un López Obrador, al que le ha resultado muy redituable.

En su papel de “clon” de AMLO, el actual jefe delegacional de Cuauhtémoc, se transforma en el gran mesías: solo él cuenta con las cualidades para sacar adelante a la capital.

De entrada le exige a su partido, transparencia, autocrítica y rectificación. Lo oyen como quien oye llover. Su intento porque Andrés Manuel dé marcha atrás, inútil. El necio fue él al no escuchar el discurso de su mecenas, quien tiempo atrás había dicho que se inclinaba por Claudia.

Envuelto en la actitud de “plañidera”, lloriqueó alardeando de sus 40 años de político, 20 dedicados al Pejelagarto. Hizo memoria de su salida del PRI, cuando no le dieron la candidatura a su natal Zacatecas y tuvo que emigrar al PRD, por quien obtuvo la gubernatura. Desde entonces se alió con su “compañero de viaje”, el que ahora lo deja colgado de la brocha.

Se enfunda imagen de Hombre de Estado y parafraseando a Jesús Reyes Heroles (Que se debe haber revolcado en su tumba), así califica a AMLO.

Hace gala de “culto” y saca a relucir autores y obras, mientras utiliza un lenguaje de doctor en derecho (Título objeto de “sospechosismo”, al cuestionarse la velocidad a la que lo obtuvo).

La que se cinchó la titularidad de la candidatura, le contestó con un video, en el que lo conminó a aceptar los resultados. Salió a relucir la soberbia y la arrogancia de la fémina, conocedora de los mayores secretos de Andrés Manuel. Cuánto tiempo le tomará volver a llamarnos “imbéciles” –como lo hizo en sus épocas de gloria, al insistirle la prensa sobre el costo de los segundos pisos-.

De Sheinbaum tiene AMLO la incondicionalidad absoluta. Lógico que la apuntara con su falange divina, para encumbrarla a un cargo determinante en la política y la ¡economía!

Desde que se abrieron las puertas de Morena, a los “pecadores”, la afiliación a su registro, limpia de cualquier culpa. De Lino Korrodi, a Barbosa, el líder de los ferrocarrileros, o el del Metro y tantos otros prófugos de organismos políticos, la bendición del tabasqueño los transforma en entes puros y sin mácula. Los últimos “inmaculados”, la Padierna y Bejarano, de mega oscura trayectoria.

Pero, si en el PRD se habla de tribus, en Morena se empiezan a multiplicar. Nada qué ver entre un Monreal y el resto de “recientes aparecidos”, y una Bertha Luján (De trayectoria vertical y comprometida con un auténtico cambio). ¿Y los radicales que se incrustan gozosos? ¿Tendrá AMLO la capacidad para “serenarlos”?

Habrá qué ver si este “menjurje” de personajes funciona y si AMLO logra “purificar a tanto pecador”. Uno, por lo pronto, ya le salió rejego y, por supuesto, ya le llamó, con su consabido autoritarismo, traidor y busca cargos.

catalinanq@hotmail.com

Tuiter: @catalinanq