/ lunes 14 de noviembre de 2016

Cuentas Claras

  • Carolina Navarrete
  • Panorama sombrío

Sin lugar a dudas, el triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos ensombrece el panorama futuro de nuestro país. Sus amenazas durante la campaña electoral de construir el muro fronterizo, realizar deportaciones masivas y renegociar o cancelar el Tratado de Libre Comercio, si se cumplen, tendrán un impacto negativo en México.

Por lo pronto, los mercados financieros están sumamente volátiles. El tipo de cambio se empezó a depreciar desde el anuncio del resultado electoral estadunidense. Esa misma noche el peso registró fuertes pérdidas, que se prolongaron con el correr de los días.

Ante el triunfo de Trump, la Secretaría de Hacienda convocó a conferencia de prensa muy temprano, antes de que abrieran los bancos y la bolsa. El objetivo era tranquilizar a los mercados y recordar que se tienen políticas fiscal y monetaria responsables, prudentes y oportunas, así como un sistema financiero bien capitalizado y solvente.

Acompañado del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, el secretario José Antonio Meade dejó claro que se actuará con cautela y no se tomarán decisiones prematuras, aunque habrá ajustes una vez que sean analizadas las condiciones de los mercados.

Dijo que el Gobierno federal no necesita recurrir a los mercados financieros internacionales en lo que resta de este año y el próximo, recordó que se tienen las coberturas petroleras, que las expectativas inflacionarias están bien ancladas dentro del rango de tres por ciento, que las reservas internacionales superan los 175 mil millones de dólares y que se tiene la línea de crédito flexible del Fondo Monetario Internacional por 86.2 mil millones de dólares.

Y aunque todo esto es cierto, la incertidumbre ha sido constante. Un día después de las elecciones, el dólar spot se vendió, en las primeras horas del día, en 20.56 pesos, reportando el peso un desplome de 3.5 por ciento; mientras que en las ventanillas bancarias el dólar se vendía en 20.85 pesos y terminó en 20.80 pesos.

El peso fue la moneda que cayó más rápido en el mundo como resultado de la elección presidencial. Pero la incertidumbre continúa y el viernes pasado el tipo de cambio llegó a un nuevo mínimo histórico de 20.94 pesos por dólar en el mercado interbancario, mientras que en ventanilla bancaria terminó en 21.05 pesos.

Y en medio de la incertidumbre, los pronósticos sobre el tipo de cambio son pesimistas. Se prevé que al cierre del año se ubique entre 22 y 25 pesos y algunos creen que finalizará el 2017 en niveles de 28 pesos por dólar.

Por su parte, la Bolsa Mexicana de Valores se desplomó el jueves 4.57 por ciento, su mayor caída en los últimos cinco años, porque los inversionistas desataron una ola vendedora que terminó tirando al mercado.

El temor es que ya como presidente, Trump cumpla sus amenazas de candidato. Si afecta el Tratado de Libre Comercio, no olvidemos que México envía el 80 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos y se tendría un impacto muy negativo.

En cuanto a la construcción del muro, que tendría un costo de entre ocho y 12 mil millones de dólares, Trump dijo que obligaría a nuestro país a pagar su construcción o incautaría las remesas. A México no puede forzarlo a pagar, pero si incauta las remesas esto afectaría a muchas familias en México.

Y amenazó con la deportación de millones de inmigrantes indocumentados, lo que generaría un fuerte problema económico y social al país; más vale irnos preparando para esta eventualidad. caro.navarrete@yahoo.com.mx

  • Carolina Navarrete
  • Panorama sombrío

Sin lugar a dudas, el triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos ensombrece el panorama futuro de nuestro país. Sus amenazas durante la campaña electoral de construir el muro fronterizo, realizar deportaciones masivas y renegociar o cancelar el Tratado de Libre Comercio, si se cumplen, tendrán un impacto negativo en México.

Por lo pronto, los mercados financieros están sumamente volátiles. El tipo de cambio se empezó a depreciar desde el anuncio del resultado electoral estadunidense. Esa misma noche el peso registró fuertes pérdidas, que se prolongaron con el correr de los días.

Ante el triunfo de Trump, la Secretaría de Hacienda convocó a conferencia de prensa muy temprano, antes de que abrieran los bancos y la bolsa. El objetivo era tranquilizar a los mercados y recordar que se tienen políticas fiscal y monetaria responsables, prudentes y oportunas, así como un sistema financiero bien capitalizado y solvente.

Acompañado del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, el secretario José Antonio Meade dejó claro que se actuará con cautela y no se tomarán decisiones prematuras, aunque habrá ajustes una vez que sean analizadas las condiciones de los mercados.

Dijo que el Gobierno federal no necesita recurrir a los mercados financieros internacionales en lo que resta de este año y el próximo, recordó que se tienen las coberturas petroleras, que las expectativas inflacionarias están bien ancladas dentro del rango de tres por ciento, que las reservas internacionales superan los 175 mil millones de dólares y que se tiene la línea de crédito flexible del Fondo Monetario Internacional por 86.2 mil millones de dólares.

Y aunque todo esto es cierto, la incertidumbre ha sido constante. Un día después de las elecciones, el dólar spot se vendió, en las primeras horas del día, en 20.56 pesos, reportando el peso un desplome de 3.5 por ciento; mientras que en las ventanillas bancarias el dólar se vendía en 20.85 pesos y terminó en 20.80 pesos.

El peso fue la moneda que cayó más rápido en el mundo como resultado de la elección presidencial. Pero la incertidumbre continúa y el viernes pasado el tipo de cambio llegó a un nuevo mínimo histórico de 20.94 pesos por dólar en el mercado interbancario, mientras que en ventanilla bancaria terminó en 21.05 pesos.

Y en medio de la incertidumbre, los pronósticos sobre el tipo de cambio son pesimistas. Se prevé que al cierre del año se ubique entre 22 y 25 pesos y algunos creen que finalizará el 2017 en niveles de 28 pesos por dólar.

Por su parte, la Bolsa Mexicana de Valores se desplomó el jueves 4.57 por ciento, su mayor caída en los últimos cinco años, porque los inversionistas desataron una ola vendedora que terminó tirando al mercado.

El temor es que ya como presidente, Trump cumpla sus amenazas de candidato. Si afecta el Tratado de Libre Comercio, no olvidemos que México envía el 80 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos y se tendría un impacto muy negativo.

En cuanto a la construcción del muro, que tendría un costo de entre ocho y 12 mil millones de dólares, Trump dijo que obligaría a nuestro país a pagar su construcción o incautaría las remesas. A México no puede forzarlo a pagar, pero si incauta las remesas esto afectaría a muchas familias en México.

Y amenazó con la deportación de millones de inmigrantes indocumentados, lo que generaría un fuerte problema económico y social al país; más vale irnos preparando para esta eventualidad. caro.navarrete@yahoo.com.mx