/ domingo 3 de enero de 2016

El cambio inminente | Jorge Schiaffino Isunza*

Entraremos en la fase final de la revisión histórica previa a la próxima Asamblea Constituyente. Con fecha 20 de diciembre de 2006 la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, mediante una conferencia de prensa en la que intervinieron senadores integrantes de la Comisión dictaminadora, diputados federales y diputados de la propia Asamblea, dieron a conocer los mecanismos de trabajo para las actividades de la reforma, cabe mencionar que esta etapa fue la precursora de los dictámenes que posteriormente se convertirían en la reforma recientemente aprobada por ambas Cámaras del Congreso y que hoy espera la votación de las legislaturas locales.

Estos mecanismos fueron los siguientes:

Acuerdos por consenso. Instalación de una mesa interparlamentaria y representativa por igual de la totalidad de las fuerzas políticas. Invitación a representantes de los Gobiernos del Distrito Federal y de todos los Estados de la República.

Elaboración de una matriz preliminar que reflejara los puntos de consenso y de disenso. Determinación de un temario y cronograma de actividades. Una mesa central que definiría las instancias de diálogo, consulta con especialistas, académicos o con grupos específicos de ciudadanos.

Al momento de integrar los equipos de trabajo al inicio de la administración 2006-2012 e instalarse las comisiones del Distrito Federal en ambas Cámaras del Congreso de la LX Legislatura, así como la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se cuidó el equilibrio en la participación y las propuestas de todas las fuerzas políticas y los acuerdos se ajustaron a la pluralidad democrática de la Ciudad de México.

Se enfatizó para escuchar opiniones especializadas y técnicas, así como la integración a la propuesta de reforma de planteamientos de la sociedad para lo que se abrió un período de consulta una vez que fue determinada la agenda.

Fue imprescindible que se estableciera una visión de largo plazo y desde luego etapas de transición de la reforma, así como la identificación de las decisiones inminentes y urgentes de realizar todo sin permitir la partidización o dogmatización de la totalidad de las propuestas.

Cabe mencionar que la reforma será o es ya el marco de referencia para que sea la Asamblea Constituyente, así como el Gobierno local y de la República quienes darán los pasos definitivos para concretizar una tradición de la Ciudad de México y la Capital de México.

La elaboración de la Constitución de la Ciudad de México será un hecho de gran trascendencia y que es ya un reto para formar un cuerpo legal avanzado, democrático, acorde con las mejores tradiciones de México y de la propia ciudad.

Las Legislaturas locales podrán enriquecer en sus debates la visión de una república moderna que pretende una gran capital digna de todos los mexicanos. Se abrirá pues una etapa significativa en la vida social, política y democrática del México que vivimos y que desea seguir el camino de una transformación pacífica y socialmente útil para los ciudadanos.

Lo deseable es que no aparezca la mezquindad personal o de grupos que por medio del chantaje y la desinformación pretendan ensuciar un acontecimiento de la mayor importancia para la ciudad y que pase a segundo término el intercambio de ideas y el debate de altura.

En nuestra próxima entrega se mencionarán los puntos relevantes de la propuesta que durante largos años con el privilegio de servir al Distrito Federal, he presentado en las diversas etapas de la transformación de la Capital de nuestro país, como secretario técnico de la reforma política, como dirigente del PRI en la Ciudad, como coordinador parlamentario e integrante en la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa y como diputado al Congreso de la Unión por el Distrito Federal.

Al tiempo.

*Exlegislador

jorgeschiaffinoisunza

/arm

Entraremos en la fase final de la revisión histórica previa a la próxima Asamblea Constituyente. Con fecha 20 de diciembre de 2006 la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, mediante una conferencia de prensa en la que intervinieron senadores integrantes de la Comisión dictaminadora, diputados federales y diputados de la propia Asamblea, dieron a conocer los mecanismos de trabajo para las actividades de la reforma, cabe mencionar que esta etapa fue la precursora de los dictámenes que posteriormente se convertirían en la reforma recientemente aprobada por ambas Cámaras del Congreso y que hoy espera la votación de las legislaturas locales.

Estos mecanismos fueron los siguientes:

Acuerdos por consenso. Instalación de una mesa interparlamentaria y representativa por igual de la totalidad de las fuerzas políticas. Invitación a representantes de los Gobiernos del Distrito Federal y de todos los Estados de la República.

Elaboración de una matriz preliminar que reflejara los puntos de consenso y de disenso. Determinación de un temario y cronograma de actividades. Una mesa central que definiría las instancias de diálogo, consulta con especialistas, académicos o con grupos específicos de ciudadanos.

Al momento de integrar los equipos de trabajo al inicio de la administración 2006-2012 e instalarse las comisiones del Distrito Federal en ambas Cámaras del Congreso de la LX Legislatura, así como la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se cuidó el equilibrio en la participación y las propuestas de todas las fuerzas políticas y los acuerdos se ajustaron a la pluralidad democrática de la Ciudad de México.

Se enfatizó para escuchar opiniones especializadas y técnicas, así como la integración a la propuesta de reforma de planteamientos de la sociedad para lo que se abrió un período de consulta una vez que fue determinada la agenda.

Fue imprescindible que se estableciera una visión de largo plazo y desde luego etapas de transición de la reforma, así como la identificación de las decisiones inminentes y urgentes de realizar todo sin permitir la partidización o dogmatización de la totalidad de las propuestas.

Cabe mencionar que la reforma será o es ya el marco de referencia para que sea la Asamblea Constituyente, así como el Gobierno local y de la República quienes darán los pasos definitivos para concretizar una tradición de la Ciudad de México y la Capital de México.

La elaboración de la Constitución de la Ciudad de México será un hecho de gran trascendencia y que es ya un reto para formar un cuerpo legal avanzado, democrático, acorde con las mejores tradiciones de México y de la propia ciudad.

Las Legislaturas locales podrán enriquecer en sus debates la visión de una república moderna que pretende una gran capital digna de todos los mexicanos. Se abrirá pues una etapa significativa en la vida social, política y democrática del México que vivimos y que desea seguir el camino de una transformación pacífica y socialmente útil para los ciudadanos.

Lo deseable es que no aparezca la mezquindad personal o de grupos que por medio del chantaje y la desinformación pretendan ensuciar un acontecimiento de la mayor importancia para la ciudad y que pase a segundo término el intercambio de ideas y el debate de altura.

En nuestra próxima entrega se mencionarán los puntos relevantes de la propuesta que durante largos años con el privilegio de servir al Distrito Federal, he presentado en las diversas etapas de la transformación de la Capital de nuestro país, como secretario técnico de la reforma política, como dirigente del PRI en la Ciudad, como coordinador parlamentario e integrante en la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa y como diputado al Congreso de la Unión por el Distrito Federal.

Al tiempo.

*Exlegislador

jorgeschiaffinoisunza

/arm