/ jueves 18 de agosto de 2016

Libertad Bajo Palabra

  • 90 Años de Fidel

“Somos un pueblo que ha librado muchas batallas victoriosas, que aprendió a luchar y a vencer frente a grandes obstáculos…”. Fidel Castro. Entrevista Mario Vázquez Raña 1999.

El día 13 agosto, contra todos los pronósticos, a pesar de varios atentados, que personaje alguno haya tenido en la historia como, incluso, por causas naturales determinadas por la edad y el cansancio, Fidel arribó gloriosamente a los 90 años.

Se trata de un hecho sin precedentes en la historia, ningún líder de una revolución armada triunfante, que se recuerde, había logrado llegar a esta edad.

Fidel, ave de tempestades desde temprana edad, odiado por muchos y querido por más, es uno de los pocos seres humanos que han tenido como le dijo Tomás Borge “el privilegio de la conciencia de su propia trascendencia”, es decir que, estando vivo, saberse parte de la historia humana.

Fidel, sin omitir sus errores, ha sido un hombre que logró el respeto incluso de sus más feroces enemigos, y el liderazgo, afecto, y admiración de sus seguidores en Cuba, en América, e incluso en el mundo.

“Fidel, Fidel, qué tiene Fidel… que los imperialistas no pueden con él” entonaban entusiastamente las multitudinarias manifestaciones estudiantiles en 1968 y populares en todo América Latina.

Fidel es un hombre de principios, íntegro y leal a sus convicciones, a las que consagró su vida, después de haber sido, junto con su hermano Raúl y Ernesto le legendario Che Guevara, uno de los doce sobrevivientes de 80 que desembarcaron del Granma en la bahía de Guantánamo.

Fidel, inspirado en Simón Bolívar y José Martí, es un líder carismático cuya influencia profunda en el pueblo es resultado de su talento, tenacidad, inteligencia, pero sobre todo, identificación con los principios que tienen que ver con el bienestar del pueblo.

Ahí están los datos, a pesar del bloqueo, con el porcentaje más bajo de América en mortandad infantil, con los mejores niveles de desarrollo humano y social, con los más altos niveles de salud individual y colectiva, en los primeros lugares de educación, instrucción, cultura y deporte.

Se trata de un líder de gran estatura moral, capaz de concebir, y dirigir una revolución “…del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” que, de inmediato transformó a la Cuba de las graves y profundas desigualdades e injusticias, en el primer pueblo que, al primer año de revolución, en 1960, había transformado los cuarteles militares en escuelas y eliminado completamente el analfabetismo.

En 1962 después de la invasión fallida de Playa Girón, Fidel y el pueblo cubano convertidos en “jamón del sándwich”, ante el enfrentamiento de Estados Unidos y la Unión Soviética, gracias a la prudencia del presidente John F. Kennedy y a la capacidad negociadora del Fidel, lograron superar la denominada “Crisis de los misiles”, que amenazaba con desatar la Tercera Guerra Mundial y con ello el Holocausto que tal vez hubiera acabado con la humanidad.

Fidel ha sido el líder que ha conducido la epopeya de un pequeño pueblo capaz de resistir 54 años del más feroz bloqueo económico que se le haya aplicado a nación alguna por parte de un Goliat, millones de veces más poderoso que el de los tiempos bíblicos.

Ese es Fidel y su obra, ese es el significado de su trascendencia, es en lo que vale la pena reflexionar al recordar los 90 años de este coloso revolucionario. ¡Larga vida comandante!

Facebook: Pedro de León Mojarro

twitter:@Pdeleonm

Sitio Web: www.pedrodeleon.mx

*Miembro de Unidos Podemos A.C

  • 90 Años de Fidel

“Somos un pueblo que ha librado muchas batallas victoriosas, que aprendió a luchar y a vencer frente a grandes obstáculos…”. Fidel Castro. Entrevista Mario Vázquez Raña 1999.

El día 13 agosto, contra todos los pronósticos, a pesar de varios atentados, que personaje alguno haya tenido en la historia como, incluso, por causas naturales determinadas por la edad y el cansancio, Fidel arribó gloriosamente a los 90 años.

Se trata de un hecho sin precedentes en la historia, ningún líder de una revolución armada triunfante, que se recuerde, había logrado llegar a esta edad.

Fidel, ave de tempestades desde temprana edad, odiado por muchos y querido por más, es uno de los pocos seres humanos que han tenido como le dijo Tomás Borge “el privilegio de la conciencia de su propia trascendencia”, es decir que, estando vivo, saberse parte de la historia humana.

Fidel, sin omitir sus errores, ha sido un hombre que logró el respeto incluso de sus más feroces enemigos, y el liderazgo, afecto, y admiración de sus seguidores en Cuba, en América, e incluso en el mundo.

“Fidel, Fidel, qué tiene Fidel… que los imperialistas no pueden con él” entonaban entusiastamente las multitudinarias manifestaciones estudiantiles en 1968 y populares en todo América Latina.

Fidel es un hombre de principios, íntegro y leal a sus convicciones, a las que consagró su vida, después de haber sido, junto con su hermano Raúl y Ernesto le legendario Che Guevara, uno de los doce sobrevivientes de 80 que desembarcaron del Granma en la bahía de Guantánamo.

Fidel, inspirado en Simón Bolívar y José Martí, es un líder carismático cuya influencia profunda en el pueblo es resultado de su talento, tenacidad, inteligencia, pero sobre todo, identificación con los principios que tienen que ver con el bienestar del pueblo.

Ahí están los datos, a pesar del bloqueo, con el porcentaje más bajo de América en mortandad infantil, con los mejores niveles de desarrollo humano y social, con los más altos niveles de salud individual y colectiva, en los primeros lugares de educación, instrucción, cultura y deporte.

Se trata de un líder de gran estatura moral, capaz de concebir, y dirigir una revolución “…del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” que, de inmediato transformó a la Cuba de las graves y profundas desigualdades e injusticias, en el primer pueblo que, al primer año de revolución, en 1960, había transformado los cuarteles militares en escuelas y eliminado completamente el analfabetismo.

En 1962 después de la invasión fallida de Playa Girón, Fidel y el pueblo cubano convertidos en “jamón del sándwich”, ante el enfrentamiento de Estados Unidos y la Unión Soviética, gracias a la prudencia del presidente John F. Kennedy y a la capacidad negociadora del Fidel, lograron superar la denominada “Crisis de los misiles”, que amenazaba con desatar la Tercera Guerra Mundial y con ello el Holocausto que tal vez hubiera acabado con la humanidad.

Fidel ha sido el líder que ha conducido la epopeya de un pequeño pueblo capaz de resistir 54 años del más feroz bloqueo económico que se le haya aplicado a nación alguna por parte de un Goliat, millones de veces más poderoso que el de los tiempos bíblicos.

Ese es Fidel y su obra, ese es el significado de su trascendencia, es en lo que vale la pena reflexionar al recordar los 90 años de este coloso revolucionario. ¡Larga vida comandante!

Facebook: Pedro de León Mojarro

twitter:@Pdeleonm

Sitio Web: www.pedrodeleon.mx

*Miembro de Unidos Podemos A.C