/ miércoles 14 de junio de 2017

Sin Gafete

  • Eruviel eliminado de cualquier contienda
  • La omisión cómplice de las autoridades en los feminicidios su responsabilidad

Cualquier ambición presidencial se estrella con los cadáveres de las mujeres que han sido asesinadas impunemente.

Y uno se pregunta, ingenuamente, si Eruviel Ávila no se enteró, en todo su Gobierno de la magnitud del problema. O si, por el contrario, a sabiendas de estas muertas decidió no poner atención.

Grave error porque su falta de decisión política al respecto va a ser definitiva en su futuro. No el inmediato bajo alguna protección presidencial, sino su futuro de verdad.

La semana pasada un humilde padre de familia bajo de la bicicleta a su hija de 11 años, porque llovía mucho, para subirla a una “combi” de transporte público. Era un “viaje” de siete calles… la camioneta lo dejó atrás. Y dos días después apareció muerta, después de haber sido violada.

La responsabilidad del gobernador del Estado de México es inmensa. Porque lo que vivieron sus padres fue la desidia inmensa de las autoridades, que en lugar de buscarla, hay cámaras de videovigilancia, ignoraron su denuncia. ¿Pudieron evitar su muerte? Esa es la gran duda que tendrán que cargar muchos.

Frente a la angustia de esa familia, su dolor inconmensurable, no hay argumentos que valgan. El chofer de la camioneta, que fue detenido horas después por la presión mediática, había estado en la cárcel por violador…

¿Qué puede decirse al respecto?

En Ciudad Juárez, por un tiempo muy largo, jovencitas eran secuestradas, torturadas, violadas y después asesinadas. Se conoció el caso como “Las Muertas de Juárez”. Y la principal razón que esto pudiese suceder fue la omisión, una omisión cómplice de las autoridades. Las mataban porque no había ningún castigo, porque tenían toda la impunidad para hacerlo.

En el Estado de México se ha denunciado el aumento tremendo en femenicidios en todos los foros. El Observatorio Ciudadano presentó, el año pasado, la cifra de 263 asesinatos de mujeres por odio.

Oficialmente, era lo conveniente en términos político-electoral, esta cifra la “bajaron” milagrosamente.

No importa qué digan las autoridades, lo cierto es que el número de feminicidios en el Estado de México es inmenso, alarmante para todos, menos para el gobernador Eruviel Ávila.

Las autoridades, bajo su mando, no responden a las denuncias de los familiares. No atienden los reclamos legales. No buscan a las mujeres desaparecidas y menos, todavía, persiguen a los asesinos de mujeres. No es un asunto de su mayor atención.

La niña que se subió a la combi, Valeria, estaría viva si no se hubiese contratado a un violador reincidente, que había estado en la cárcel por estos delitos, como chofer. Por eso su madre acusa al Gobierno de “asesino”. ¿Cuántas otras madres no estarán diciendo lo mismo?

La omisión intencional de la autoridad tipifica un delito.

La omisión en política tiene precios muy altos. Y no hay forma de convertirse en candidato a la Presidencia de la República con tantas mujeres asesinadas impunemente bajo su responsabilidad.

¿Es que Eruviel Ávila desprecia a las mujeres? No lo sé, lo cierto, lo que puede comprobarse es que el número de víctimas bajo su gobierno es aterrador. Que no ha habido respuesta eficiente de las autoridades. El promedio, 19 condenas al año por 300 denuncias es más que esclarecedor de la falta de voluntad.

Otros conductores de transporte público han asesinado a mujeres, jóvenes, indefensas. Como sucedió en 2011 con el asesinato de Eva Cecilia Pérez Vargas de 16 años, cuyo cuerpo fue recuperado por su madre, igual que descubrió quién fue el asesino… son las madres las que investigan. Como sucedió con “Las Muertas de Juárez”.

Mientras la madre de Cecilia perseguía al asesino, el chofer César Legorreta, alías El Coqueto, este mató a seis jovencitas más…

¿Qué explicación podría dar Eruviel Ávila a estas madres?... @isabelarvide Blog: EstadoMayor.mx Blog: CambioQRR.com

  • Eruviel eliminado de cualquier contienda
  • La omisión cómplice de las autoridades en los feminicidios su responsabilidad

Cualquier ambición presidencial se estrella con los cadáveres de las mujeres que han sido asesinadas impunemente.

Y uno se pregunta, ingenuamente, si Eruviel Ávila no se enteró, en todo su Gobierno de la magnitud del problema. O si, por el contrario, a sabiendas de estas muertas decidió no poner atención.

Grave error porque su falta de decisión política al respecto va a ser definitiva en su futuro. No el inmediato bajo alguna protección presidencial, sino su futuro de verdad.

La semana pasada un humilde padre de familia bajo de la bicicleta a su hija de 11 años, porque llovía mucho, para subirla a una “combi” de transporte público. Era un “viaje” de siete calles… la camioneta lo dejó atrás. Y dos días después apareció muerta, después de haber sido violada.

La responsabilidad del gobernador del Estado de México es inmensa. Porque lo que vivieron sus padres fue la desidia inmensa de las autoridades, que en lugar de buscarla, hay cámaras de videovigilancia, ignoraron su denuncia. ¿Pudieron evitar su muerte? Esa es la gran duda que tendrán que cargar muchos.

Frente a la angustia de esa familia, su dolor inconmensurable, no hay argumentos que valgan. El chofer de la camioneta, que fue detenido horas después por la presión mediática, había estado en la cárcel por violador…

¿Qué puede decirse al respecto?

En Ciudad Juárez, por un tiempo muy largo, jovencitas eran secuestradas, torturadas, violadas y después asesinadas. Se conoció el caso como “Las Muertas de Juárez”. Y la principal razón que esto pudiese suceder fue la omisión, una omisión cómplice de las autoridades. Las mataban porque no había ningún castigo, porque tenían toda la impunidad para hacerlo.

En el Estado de México se ha denunciado el aumento tremendo en femenicidios en todos los foros. El Observatorio Ciudadano presentó, el año pasado, la cifra de 263 asesinatos de mujeres por odio.

Oficialmente, era lo conveniente en términos político-electoral, esta cifra la “bajaron” milagrosamente.

No importa qué digan las autoridades, lo cierto es que el número de feminicidios en el Estado de México es inmenso, alarmante para todos, menos para el gobernador Eruviel Ávila.

Las autoridades, bajo su mando, no responden a las denuncias de los familiares. No atienden los reclamos legales. No buscan a las mujeres desaparecidas y menos, todavía, persiguen a los asesinos de mujeres. No es un asunto de su mayor atención.

La niña que se subió a la combi, Valeria, estaría viva si no se hubiese contratado a un violador reincidente, que había estado en la cárcel por estos delitos, como chofer. Por eso su madre acusa al Gobierno de “asesino”. ¿Cuántas otras madres no estarán diciendo lo mismo?

La omisión intencional de la autoridad tipifica un delito.

La omisión en política tiene precios muy altos. Y no hay forma de convertirse en candidato a la Presidencia de la República con tantas mujeres asesinadas impunemente bajo su responsabilidad.

¿Es que Eruviel Ávila desprecia a las mujeres? No lo sé, lo cierto, lo que puede comprobarse es que el número de víctimas bajo su gobierno es aterrador. Que no ha habido respuesta eficiente de las autoridades. El promedio, 19 condenas al año por 300 denuncias es más que esclarecedor de la falta de voluntad.

Otros conductores de transporte público han asesinado a mujeres, jóvenes, indefensas. Como sucedió en 2011 con el asesinato de Eva Cecilia Pérez Vargas de 16 años, cuyo cuerpo fue recuperado por su madre, igual que descubrió quién fue el asesino… son las madres las que investigan. Como sucedió con “Las Muertas de Juárez”.

Mientras la madre de Cecilia perseguía al asesino, el chofer César Legorreta, alías El Coqueto, este mató a seis jovencitas más…

¿Qué explicación podría dar Eruviel Ávila a estas madres?... @isabelarvide Blog: EstadoMayor.mx Blog: CambioQRR.com