Los dueños del capital de este país ahora sí se fueron directo contra Andrés Manuel López Obrador. De paso, dejaron sentir que están con José Antonio Meade. Resulta que Juan Pablo Castañón, el líder del CCE, dijo que les parece gravísimo que Napoleón Gómez Urrutia y Nestora Salgado sean absorbidos por Morena. “Hoy podemos observar en los distintos partidos personajes que nosotros encontramos de muy dudosa reputación, o que incluso están todavía con procesos jurídicos en su contra. Y nos preocupa que en los distintos partidos políticos estén solo viendo la rentabilidad electoral y otorgando fuero a personas que no merecen tenerlo”.
Ricardo Anaya dice que es un refrito, absurdo y de risa lo que salió a la luz de sus negocios. Dice que el PRI está detrás de todos los ataques, que no saben qué inventar para levantar la campaña de su candidato. Y que no lo van a detener con mentiras.
A propósito de asuntos que parecen mentira: Andrés Manuel López Obrador sugirió cambiar a Anaya, a quien considera un corrupto, y propone como candidato a Diego Fernández de Ceballos.
Unos decían que los empresarios estaban con Anaya, pero no se confunda. Ya encarrerados, los reporteros le preguntaron a Castañón si el sector empresarial hace un llamado para que investiguen a fondo denuncias contra el candidato a la presidencia de la República por el Partido Acción Nacional (PAN), acusado de presunto lavado de dinero. “Evidentemente que sí”, respondió el líder empresarial.
Una de las elecciones más reñidas de este año será la que se lleve a cabo en Yucatán, que si bien presume ser un bastión gobernado por y para los priistas, estos acaban de salir de un proceso interno que dejó diversas heridas. Como resultado, desde la capital yucateca opositora, el proyecto del panista Mauricio Vila Dosal ha crecido y el poder en turno sabe que para frenarlo no se puede dar el lujo de prescindir de nada.
A la sombra de Mauricio Vila, allá en Mérida, dicen los que saben que por primera vez el rol que juegue Morena será fundamental para desequilibrar la balanza de un lado o de otro durante la campaña, y en ese sentido que el gobernador y sus operadores están haciendo lo imposible para promover a panistas en las filas del partido lopezobradorista para que dividan el voto del blanquiazul y al mismo tiempo crezca el apoyo para José Antonio Meade.
