Tras los múltiples señalamientos que los diputados de oposición han hecho sobre la incapacidad del Gobierno federal para diseñar un plan que permita afrontar la crisis económica que ya se percibe en miles de hogares aunque ya saben quién tenga otros datos, nos dicen que el secretario de Hacienda, ARTURO HERRERA, hizo saber a los legisladores que está abierto a escuchar sus propuestas sobre el tema. Claro, siempre y cuando éstas se realicen de manera conjunta y se depositen en un documento que pueda presentarse en los próximos días. Nos cuentan además que el funcionario de la cuatroté se comprometió a que, cuando llegue el escrito debidamente formulado, lo hará al instante del conocimiento del presidente Andrés Manuel López Obrador.
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Mientras algunos diputados ingenuamente se lanzaron a redactar sus ideas para salvar a México del hundimiento económico histórico, el desempleo y el alza de precios, más de cuatro mil empresarios y líderes empresariales de todo el país se reunieron por videoconferencia, convocados por Carlos Salazar Lomelín, para conformar un plan de salvación que ya no tome en cuenta al político de Macuspana. Ahora sí, los banqueros y los industriales, todas las actividades económicas del país, rompieron públicamente con la 4T. “No escucha a nadie”, es la queja generalizada.
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Carlos Salazar Lomelín, el único hombre que le hablaba al oído al tabasqueño a nombre de todos los empresarios hasta hace algunas semanas, reunió a los empresarios para organizarse. “A falta de un Gobierno que nos organice”, dijo el de Nuevo León. “Que nos oriente, que de alguna manera nos conduzca en nuestras actividades”.
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El de Monterrey dice que es desgarrador ver los estragos que ha comenzado a generar esta crisis. “Y que no hemos sido capaces de hacernos oír”, le comentó a los empresarios. “Hemos sido totalmente no escuchados”.
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“Esa visión, de que nuestro país solamente tiene un solo destinatario y que son los más pobres del país --cosa que nosotros también ponemos como prioridad-- no puede ser la forma de arreglar los problemas de México”, dijo el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
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“Parece que no entendemos la democracia que tenemos”, respondió molesto Salazar ante los cuestionamientos. “Por más comunicados que ustedes puedan lanzar de que se vaya, el señor tiene el apoyo que le dio esta estructura democrática, y dentro de un año y pico, tendremos la posibilidad, porque así la estableció ahora nuestro Congreso, de hacer una revisión democrática, un rechazo de mandato: ahí es el momento. Si alguien cree que esa es la forma, por favor, organícense”.
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Salazar pidió ideas para coordinarnos como sociedad. Juntó a los patrones de muchas empresas de todo México. Y sí, de pronto le reclamaron tibieza al hablar con López Obrador en defensa de los empresarios. Le sugirieron tomar medidas radicales para que los escuche el Presidente. “Quisiera que también la parte política del país saliera a hacer su trabajo, nuestro trabajo es apoyar a las mipymes, salvar los empleos. ¿Creen ustedes que van a lograr algo por salir y decir que se vaya? (…) Si es lo que queremos unámonos, nomás que tenemos que tener a 30 millones de mexicanos detrás de nosotros”.
