Dicen los que saben que la Interpol encontró nueve Mercedes Benz que querían introducir a Rusia, el país que controla con mano de hierro Vladimir Putin, cuando preguntaron por qué no eran de alguna agencia establecida, se dieron cuenta que viajaron en barco desde México. Las autoridades confirmaron que esos automóviles de lujo fueron robados en alguna de las calles de la capital que gobierna CLAUDIA SHEINBAUM. Lo que tienen entre manos los investigadores, es que usaron el puerto de Veracruz y Manzanillo para sacar los coches, y ahora están vigilando todos los cargamentos que llegan desde este país. También encontraron camionetas Lobo, algunos BMW y otros autos costosos y ostentosos, que no lograron llegar a las calles de Moscú.
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Hay un nombre que no deja de aparecer en las investigaciones que realiza el gobierno de Andrés Manuel López Obrador sobre los contratos que gestionó la SCT de Gerardo Ruiz Esparza. No lo olvide, su nombre comienza con la “E” de Eduardo y su apellido con “L” de Luque. Famoso por usar relojes Richard Mille y otras marcas que ni Obama tenía, terminó su gestión como director de la API de Altamira, justo cuando Presidencia se dio cuenta de sus excesos. Hoy la FGR de Alejandro Gerz Manero, el SAT de Margarita Ríos, la Dirección de Juegos y Sorteos de Luis Calvo Reyes y la UIF de Santiago Nieto amplían el expediente que sin lugar a dudas trascenderá hasta tribunales y penales. Todo por el gusto que tiene por los relojes que denotan poder, buen poder adquisitivo y buen gusto.
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El exdirector del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Raúl Sergio Arroyo García, está en la mira de la Secretaría de la Función Pública, de Irma Eréndira Sandoval, luego de que le entregaron millones de pesos para crear el llamado “Museo de Museos”, en el antiguo Palacio del Marqués de Apartado. Los pesos y centavos los recibió a principios de marzo de 2017, y tenía como fin que antes de que Enrique Peña Nieto anduviera paseando en España como civil, estuviera operando. Hoy, sigue como obra negra.
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Parece que la investigación que el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, realiza en torno al otorgamiento irregular de 29 patentes de notarías dará aún mucho de qué hablar, pues resulta que el mismo día en que se comenzaron a revocar varios permisos, el director de Archivos y Notarías de las pasadas administraciones, Mauricio García León, fue encontrado muerto dentro de su domicilio. En aquellas tierras se tiene claro que el finado era el eslabón más débil de una cadena de corrupción en la que podrían haber participado varios altos funcionarios de los gobiernos estatales de Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad.
