/ sábado 15 de junio de 2019

Acordanza

Mercedes Pascual, su pasión por el Teatro

El lunes 9 de junio amanecimos con la noticia de que la actriz Mercedes Pascual, a la edad de 88 años había fallecido… No fui amiga de Mercedes Pascual, fui su admiradora. De una manera casual nos tratábamos en la casa de su tocaya Mercedes Pesqueira con quien la unía una gran amistad no desprovista de lazos de parentesco. Así que cuando supe que ya se había ido a “viajar por las estrellas” como anunció su hija Mercedes Olea a quien damos nuestro más sentido pésame, relacioné ese viaje con la pasión que tuvo en su viaje existencial: el universo del teatro…Cuando yo era adolescente, la vi en una Celestina -protagonizada por Ofelia Guilmain- en que ella sobresalía como la “moza del partido,” una jovencita de la vida airada, a la que Celestina con su voz de trueno, profunda y en este caso tenebrosa, decía: “Mírame, como te veo me ví, como me ves, te verás”. Fue por el año 68 . La puesta en escena era en uno de los teatros del Seguro Social, que dirigía en aquel entonces Ignacio Retes… También la aplaudí en su papel de la trágica vidente Casandra -la hija del rey Príamo de Troya convertida en esclava en el palacio del atrida Agamenon-, en la tragedia de Esquilo, la Orestiada…Mientras disfrutábamos de la cortesía de la anfitriona, Meche Pascual me contó que su primer contacto con el escenario fue como bailarina, pues estudió danza en Bellas Artes participando en el Ballet Moderno de Bellas Artes y en el Ballet de Opera de Bellas Artes, donde coincidió con la actriz Elda Peralta… El arte teatral lo estudio con Seki Sano, el padre del teatro moderno en México pues Seki Sano, de origen japonés, fue discípulo de Stanislavsky y Meyerhold. Seki, me dijo Mercedes, se salvó de las purgas de Stalin y llegó a México, donde echó raíces, difundió el método de Stanislavsky y Meyerhold a sus alumnos y su propio método siendo maestro de varias generaciones mexicanas de gente del teatro… En uno de esos encuentros con los Pesqueira, habló que ella era “trasterrada”. Vino en el exilio español con sus padres, como una niña de 9 años y aquí echó raíces y desarrolló su gran pasión por las artes escénicas. Rememoró conmigo sus tiempos de estudiante con el maestro Celestino Gorostiza, -de grata memoria-, y sus clases en la Academia de Teatro de Andrés Soler. Hablamos también de su debut en la obra La soga -1952-, un thriller que el inglés Patrick Hamilton escenificó en Londres, basado en una macabro hecho real, y donde ella representó el papel de la novia del estudiante asesinado…Alfred Hitchcock la llevó al cine en 1948 con un gran éxito, así que en el estreno, Mercedes tuvo que dominar el pánico escénico que estuvo a punto de acometerla…Meche Pascual tuvo una sola y grande pasión: el teatro. Lo hizo de 1952 hasta que ya no pudo pararse en un escenario por un problema de movilidad en las piernas en 2011, pero siguió perteneciendo como la maestra emérita que era, a la Compañía Nacional de Teatro… Su legado está resguardado en El Centro de Investigación Teatral Rodolfo Usigli (CITRU), desde 1986, cuando recibió un homenaje de la comunidad teatral entera.. Un sepulcro de honor para una extraordinaria actriz…


Mercedes Pascual, su pasión por el Teatro

El lunes 9 de junio amanecimos con la noticia de que la actriz Mercedes Pascual, a la edad de 88 años había fallecido… No fui amiga de Mercedes Pascual, fui su admiradora. De una manera casual nos tratábamos en la casa de su tocaya Mercedes Pesqueira con quien la unía una gran amistad no desprovista de lazos de parentesco. Así que cuando supe que ya se había ido a “viajar por las estrellas” como anunció su hija Mercedes Olea a quien damos nuestro más sentido pésame, relacioné ese viaje con la pasión que tuvo en su viaje existencial: el universo del teatro…Cuando yo era adolescente, la vi en una Celestina -protagonizada por Ofelia Guilmain- en que ella sobresalía como la “moza del partido,” una jovencita de la vida airada, a la que Celestina con su voz de trueno, profunda y en este caso tenebrosa, decía: “Mírame, como te veo me ví, como me ves, te verás”. Fue por el año 68 . La puesta en escena era en uno de los teatros del Seguro Social, que dirigía en aquel entonces Ignacio Retes… También la aplaudí en su papel de la trágica vidente Casandra -la hija del rey Príamo de Troya convertida en esclava en el palacio del atrida Agamenon-, en la tragedia de Esquilo, la Orestiada…Mientras disfrutábamos de la cortesía de la anfitriona, Meche Pascual me contó que su primer contacto con el escenario fue como bailarina, pues estudió danza en Bellas Artes participando en el Ballet Moderno de Bellas Artes y en el Ballet de Opera de Bellas Artes, donde coincidió con la actriz Elda Peralta… El arte teatral lo estudio con Seki Sano, el padre del teatro moderno en México pues Seki Sano, de origen japonés, fue discípulo de Stanislavsky y Meyerhold. Seki, me dijo Mercedes, se salvó de las purgas de Stalin y llegó a México, donde echó raíces, difundió el método de Stanislavsky y Meyerhold a sus alumnos y su propio método siendo maestro de varias generaciones mexicanas de gente del teatro… En uno de esos encuentros con los Pesqueira, habló que ella era “trasterrada”. Vino en el exilio español con sus padres, como una niña de 9 años y aquí echó raíces y desarrolló su gran pasión por las artes escénicas. Rememoró conmigo sus tiempos de estudiante con el maestro Celestino Gorostiza, -de grata memoria-, y sus clases en la Academia de Teatro de Andrés Soler. Hablamos también de su debut en la obra La soga -1952-, un thriller que el inglés Patrick Hamilton escenificó en Londres, basado en una macabro hecho real, y donde ella representó el papel de la novia del estudiante asesinado…Alfred Hitchcock la llevó al cine en 1948 con un gran éxito, así que en el estreno, Mercedes tuvo que dominar el pánico escénico que estuvo a punto de acometerla…Meche Pascual tuvo una sola y grande pasión: el teatro. Lo hizo de 1952 hasta que ya no pudo pararse en un escenario por un problema de movilidad en las piernas en 2011, pero siguió perteneciendo como la maestra emérita que era, a la Compañía Nacional de Teatro… Su legado está resguardado en El Centro de Investigación Teatral Rodolfo Usigli (CITRU), desde 1986, cuando recibió un homenaje de la comunidad teatral entera.. Un sepulcro de honor para una extraordinaria actriz…


ÚLTIMASCOLUMNAS
domingo 20 de diciembre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 29 de noviembre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 15 de noviembre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 08 de noviembre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 01 de noviembre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 25 de octubre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

domingo 18 de octubre de 2020

Acordanza

Tere Ponce

Cargar Más