Los analistas financieros y bursátiles bisoños, se quedaron perplejos cuando se enteraron de que las acciones de la empresa Televisa había sufrido el peor descalabro mensual desde hace 20 años, al perder en septiembre 30 por ciento.
Aquellos afirman que la crisis de la compañía se agudizó con la pandemia del Covid-19. Sin embargo, algunos analistas políticos señalan que el declive comenzó cuando el gobierno de la 4T le redujo drásticamente – al igual que a otros medios-- los contratos de publicidad que sumaban miles de millones de pesos cada año.
En esta Agenda Confidencial hemos comentado que hasta antes de que Andrés Manuel López Obrador tomara las riendas de este país, Bernardo Gómez al frente de Televisa y de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión, se había destacado por ser el “truchimán” de las comunicaciones. Gómez saltó a la fama a finales de 2002 con la trascendente concertacesión que realizó con Vicente Fox y Marta Sahagún, cuando era presidente de la susodicha Cámara: La cancelación del impuesto fiscal del 12.5% a televisoras y radiodifusoras. Gómez y Televisa fueron un factor clave en la construcción de la candidatura presidencial de Enrique Peña Nieto en el 2012. Hasta telenovela le hicieron a la Gaviota (AMLO dixit). La televisora fue recompensada con el presupuesto publicitario más alto de la historia.
Bernardo fue también el artífice de la fusión Televisa-Univisión, la que el columnista adelantó desde 2019 y que los empleados de la televisora negaban cada vez que nos referíamos al asunto, y que finalmente terminaron firmando en marzo del 2021. Seguramente los de Univisión no han de estar muy contentos con los resultados de Televisa en septiembre, pero demasiado tarde para arrepentirse.
Hoy la estrella de Bernardo Gómez parece haber perdido brillo, aunque los analistas bisoños y los “paleros” afirman que la situación por la que atraviesa la televisora “es sólo un bache”… que podría convertirse en “socavón financiero” que se empezó a hacer 5 años, cuando Peña Nieto le entregó la presidencia a AMLO, advierten los observadores políticos.
¿O sea que se murió el PRI y se llevó entre las patas a Televisa? Obviamente, Emilio Azcárraga Milmo, El Tigre, quien se declaró “soldado del PRI” cuando dirigía el negocio, nunca se imaginó el actual escenario de la empresa.
En nuestra gustada sección de los “trinquetes azucareros” de COPACO, la comercializadoras del ingenio azucarero PUGA, propiedad de la familia García Arce, llama la atención que los dueños se “llevaron al baile” a más de medio centenar de empresas de todos los tamaños (Bimbo, Barcel, Danone, Sucroliq…) que pagaron por anticipado importantes cantidades del polvito blanco vacilador que nunca les entregaron. Pero resulta sorpresivo y preocupante, que entre los damnificados se encuentre Banco Santander, que le prestó más de 160 millones de pesos en “crédito a la palabra”, según los enterados, a los García Arce. Se murmura en los pasillos de la institución, que un “picudo” empresario azucarero les dijo a los directores del banco: Préstenles lo que pidan, son de fiar. ¡Y sopas! Ahora no saben cuánto van a recuperar del dinero de los ahorradores.