/ martes 6 de octubre de 2020

Ajo y Agua | Sueño roto

Cada final es un nuevo comienzo, pero a Eden Hazard aún le aguardaba la segunda parte de su temporada más gris, justo cuando todo indicaba que estaba listo para afrontar el gran desafío de liderar y triunfar en el Real Madrid, al que llegó, hace ya más de un año, convertido en el fichaje estrella que serviría de relevo para Karim Benzema y que haría olvidar la partida de Cristiano Ronaldo.

De niño siempre soñó con jugar para el Real Madrid, pero cuando fue presentado en el majestuoso estadio Santiago Bernabéu, ante 50 mil aficionados, Eden Hazard jamás se imaginó lo frágil que sería su paso por el mejor equipo de todos los tiempos, hasta el grado de convertirse en una auténtica pesadilla.

Entonces, no había duda de que sería ese jugador determinante que demostró ser en el Chelsea, pero tras siete lesiones en este corto tiempo, lo único que se espera de él es que finalmente logre recuperarse para dejar atrás la que él mismo reconoce como la peor temporada de toda su carrera profesional y que hasta ahora no parece tener fin.

En un equipo com el Real Madrid, en el que la exigencia marca, con exactitud, cada uno de los tiempos, incluso durante el peiodo de vacaciones, al delantero de la Selección de Bélgica le ha faltado profesionalidad y mentalidad.

Así lo demuestra el hecho de que ha sufrido recaídas por tratar de acelerar su tiempo de recuperación, y no es para menos, pues sobre su espalda recae la enorme carga de tener que demostrar que tiene la calidad necesaria para jugar en el Real Madrid.

De entrada, su aparición oficial se dio tarde, tras perderse las tres primeras fechas de la Liga española debido a una lesión en el muslo.

Posteriormente, hubo que esperar de septiembre a octubre, del año pasado, para que anotara su primer y hasta ahora único gol como merengue.

Y cuando parecía que finalmente dejaría atrás su proceso de adaptación, luego de siete temporadas en el futbol inglés, el delantero belga sufrió la durísima entrada de su compatriota Thomas Meunier, defensor del París Saint Germain, en la Champions League.

Desde entonces, su tobillo derecho, en el que ya portaba una placa de titanio, colocada en el verano de 2017, ya no volvió a ser el mismo.

Reapareció casi tres meses después, pero sólo disputó dos partidos más antes de volver a lesionarse y entonces tener que ser operado.

Ahí fue donde debió terminar su primera temporada en el Real Madrid, pero la propagación de la pandemia del Covid-19, que obligó a suspender el futbol español durante tres meses, le permitió recuperarse a tiempo.

Zinedine Zidane lo llevó poco a poco para evitar lo que hoy parece que era inevitable, pues volvió a recaer sólo cuatro partidos después, afectado, otra vez, del tobillo derecho.

Cinco lesiones en una sola temporada dejan mucho que desear, sobre todo cuando había sufrido ocho en sus siete años con el Chelsea.

Muy por debajo de las expectativas, con un gol en 22 partidos, su segundo año en el Real Madrid indicaba ser una nueva oportunidad, pero no ha sido otra cosa que la continuación de su temporada más gris, con dos lesiones más.

Ojalá que el caso de Hazard no sea como el de Gareth Bale, quien años antes llegó al club merengue para ser el remplazo automático de Cristiano Ronaldo, pero a quien las lesiones tampoco respetaron, aunque no debemos olvidar que el delantero galés brilló en momentos trascendentales y anotó goles que llevaron al equipo a la obtención de títulos, que hasta el momento el delantero belga parece difícil de lograr.

Y mientras todo esto pasó, el francés Karim Benzema, en quien muchos dejaron de creer, incluso antes de la partida de Cristiano Ronaldo a la Juventus, ha cumplido con la responsabilidad de ser el goleador del equipo.

Aquel jugador, de 32 años de edad, al que Hazard debía mandar al banco de suplentes, continúa su camino como el quinto máximo goleador en toda la historia del Real Madrid, ahora con 250 tantos, tras el que firmó el domingo para sentenciar el triunfo frente al Levante, con el que su equipo, vigente campeón, retomó el liderato en la clasificación de la Liga española.

¡Que te lo digo yo!

Cada final es un nuevo comienzo, pero a Eden Hazard aún le aguardaba la segunda parte de su temporada más gris, justo cuando todo indicaba que estaba listo para afrontar el gran desafío de liderar y triunfar en el Real Madrid, al que llegó, hace ya más de un año, convertido en el fichaje estrella que serviría de relevo para Karim Benzema y que haría olvidar la partida de Cristiano Ronaldo.

De niño siempre soñó con jugar para el Real Madrid, pero cuando fue presentado en el majestuoso estadio Santiago Bernabéu, ante 50 mil aficionados, Eden Hazard jamás se imaginó lo frágil que sería su paso por el mejor equipo de todos los tiempos, hasta el grado de convertirse en una auténtica pesadilla.

Entonces, no había duda de que sería ese jugador determinante que demostró ser en el Chelsea, pero tras siete lesiones en este corto tiempo, lo único que se espera de él es que finalmente logre recuperarse para dejar atrás la que él mismo reconoce como la peor temporada de toda su carrera profesional y que hasta ahora no parece tener fin.

En un equipo com el Real Madrid, en el que la exigencia marca, con exactitud, cada uno de los tiempos, incluso durante el peiodo de vacaciones, al delantero de la Selección de Bélgica le ha faltado profesionalidad y mentalidad.

Así lo demuestra el hecho de que ha sufrido recaídas por tratar de acelerar su tiempo de recuperación, y no es para menos, pues sobre su espalda recae la enorme carga de tener que demostrar que tiene la calidad necesaria para jugar en el Real Madrid.

De entrada, su aparición oficial se dio tarde, tras perderse las tres primeras fechas de la Liga española debido a una lesión en el muslo.

Posteriormente, hubo que esperar de septiembre a octubre, del año pasado, para que anotara su primer y hasta ahora único gol como merengue.

Y cuando parecía que finalmente dejaría atrás su proceso de adaptación, luego de siete temporadas en el futbol inglés, el delantero belga sufrió la durísima entrada de su compatriota Thomas Meunier, defensor del París Saint Germain, en la Champions League.

Desde entonces, su tobillo derecho, en el que ya portaba una placa de titanio, colocada en el verano de 2017, ya no volvió a ser el mismo.

Reapareció casi tres meses después, pero sólo disputó dos partidos más antes de volver a lesionarse y entonces tener que ser operado.

Ahí fue donde debió terminar su primera temporada en el Real Madrid, pero la propagación de la pandemia del Covid-19, que obligó a suspender el futbol español durante tres meses, le permitió recuperarse a tiempo.

Zinedine Zidane lo llevó poco a poco para evitar lo que hoy parece que era inevitable, pues volvió a recaer sólo cuatro partidos después, afectado, otra vez, del tobillo derecho.

Cinco lesiones en una sola temporada dejan mucho que desear, sobre todo cuando había sufrido ocho en sus siete años con el Chelsea.

Muy por debajo de las expectativas, con un gol en 22 partidos, su segundo año en el Real Madrid indicaba ser una nueva oportunidad, pero no ha sido otra cosa que la continuación de su temporada más gris, con dos lesiones más.

Ojalá que el caso de Hazard no sea como el de Gareth Bale, quien años antes llegó al club merengue para ser el remplazo automático de Cristiano Ronaldo, pero a quien las lesiones tampoco respetaron, aunque no debemos olvidar que el delantero galés brilló en momentos trascendentales y anotó goles que llevaron al equipo a la obtención de títulos, que hasta el momento el delantero belga parece difícil de lograr.

Y mientras todo esto pasó, el francés Karim Benzema, en quien muchos dejaron de creer, incluso antes de la partida de Cristiano Ronaldo a la Juventus, ha cumplido con la responsabilidad de ser el goleador del equipo.

Aquel jugador, de 32 años de edad, al que Hazard debía mandar al banco de suplentes, continúa su camino como el quinto máximo goleador en toda la historia del Real Madrid, ahora con 250 tantos, tras el que firmó el domingo para sentenciar el triunfo frente al Levante, con el que su equipo, vigente campeón, retomó el liderato en la clasificación de la Liga española.

¡Que te lo digo yo!