/ martes 1 de octubre de 2019

Anáhuac Global | Emergencia Climática y Diálogo Intergeneracional

Por: Mariana González Araujo

Hoy se conmemora el día internacional por las personas de edad. Según datos de Naciones Unidas, hoy están representados por casi 700 millones de personas y para 2050 se calcula serán 200 000 millones, cerca del 20 por ciento de la población mundial.

En un contexto en el cual la juventud ha tomado el escenario internacional para llamar a la acción, cabe recordar que quienes toman las decisiones, en la mayoría de los casos, son las personas mayores. Por mencionar algunos, en Alemania, Ángela Merkel tiene 65 años; en Estados Unidos, Trump tiene 73; en Rusia, Vladimir Putin 66; en China, Xi Jinping 66; en el Reino Unido, la Reina Isabel 93 y finalmente en México, tenemos a Andrés Manuel con 65 años de edad. Entre estos líderes mundiales, quien nos da la pauta para comenzar un diálogo intergeneracional es Emmanuel Macron, quien con sus 41 años entabla debates con sus homólogos y el país que lidera no sólo fue sede sino un gran impulsor del Acuerdo de Paris.

Dicho Acuerdo lo recordamos en México el pasado 20 de septiembre en la Marcha por el Clima en la Ciudad de México, donde al ritmo del ¡Sí se puede, sí se puede, si nos organizamos el planeta no se muere! algunos miles de personas de todas las edades marchamos juntas para exigir la declaración de una emergencia climática y actuar en consecuencia.

Liderados por activistas y organizaciones no gubernamentales, escuchamos el llamado de las y los jóvenes frente a Palacio Nacional. Reconocer la crisis climática, contar con un presupuesto suficiente y metas anuales para cumplir con las contribuciones comprometidas, fueron algunas de las exigencias a las que se dieron lectura al final de la marcha. Y si bien algunas de estas ya están suscritas por México con el Acuerdo de Paris, el énfasis es contundente, la acción es ahora y necesitamos escucharnos todos.

Y ese es justo el mensaje a trascender. El escuchar al otro, y no sólo al otro que considero mi igual, sino aquel que considero diferente, porque sólo el diálogo nos dará las herramientas necesarias para construir un mundo diferente para estay futuras generaciones.

En la marcha, la variedad de contingentes me hizo recordar lo necesario de traer a las negociaciones climáticas el diálogo intergeneracional y aún más en este contexto de hiperconexión, en el que a través de etiquetar como millennials, centennials, etc., hemos aumentando la brecha entre generaciones.

La invitación es no vernos como etiquetas sino como una red. En la que puedas reconocer no a un millennial sino a tu hijo o nieto y comenzar a platicar, para conocer, a través la experiencia del otro, lo que estamos perdiendo en el mundo.

Compartamos nuestra percepción para evitar lo que ya mencionaba HaraldWelzer en su libro “Guerras climáticas” cuando hablaba de los pescadores del Golfo de California. Los más jóvenes se mostraban menos consternados ante la disminución de la fauna ictícola pues, a diferencia de sus colegas más maduros, ellos ya no llegaron a conocer muchas de las especies que se podían pescar en la zona. Escuchémonos, no sólo para eliminar la brecha generacional sino para cambiar nuestra percepción y así, nuestra actitud y acciones ante la crisis climática.

Por: Mariana González Araujo

Hoy se conmemora el día internacional por las personas de edad. Según datos de Naciones Unidas, hoy están representados por casi 700 millones de personas y para 2050 se calcula serán 200 000 millones, cerca del 20 por ciento de la población mundial.

En un contexto en el cual la juventud ha tomado el escenario internacional para llamar a la acción, cabe recordar que quienes toman las decisiones, en la mayoría de los casos, son las personas mayores. Por mencionar algunos, en Alemania, Ángela Merkel tiene 65 años; en Estados Unidos, Trump tiene 73; en Rusia, Vladimir Putin 66; en China, Xi Jinping 66; en el Reino Unido, la Reina Isabel 93 y finalmente en México, tenemos a Andrés Manuel con 65 años de edad. Entre estos líderes mundiales, quien nos da la pauta para comenzar un diálogo intergeneracional es Emmanuel Macron, quien con sus 41 años entabla debates con sus homólogos y el país que lidera no sólo fue sede sino un gran impulsor del Acuerdo de Paris.

Dicho Acuerdo lo recordamos en México el pasado 20 de septiembre en la Marcha por el Clima en la Ciudad de México, donde al ritmo del ¡Sí se puede, sí se puede, si nos organizamos el planeta no se muere! algunos miles de personas de todas las edades marchamos juntas para exigir la declaración de una emergencia climática y actuar en consecuencia.

Liderados por activistas y organizaciones no gubernamentales, escuchamos el llamado de las y los jóvenes frente a Palacio Nacional. Reconocer la crisis climática, contar con un presupuesto suficiente y metas anuales para cumplir con las contribuciones comprometidas, fueron algunas de las exigencias a las que se dieron lectura al final de la marcha. Y si bien algunas de estas ya están suscritas por México con el Acuerdo de Paris, el énfasis es contundente, la acción es ahora y necesitamos escucharnos todos.

Y ese es justo el mensaje a trascender. El escuchar al otro, y no sólo al otro que considero mi igual, sino aquel que considero diferente, porque sólo el diálogo nos dará las herramientas necesarias para construir un mundo diferente para estay futuras generaciones.

En la marcha, la variedad de contingentes me hizo recordar lo necesario de traer a las negociaciones climáticas el diálogo intergeneracional y aún más en este contexto de hiperconexión, en el que a través de etiquetar como millennials, centennials, etc., hemos aumentando la brecha entre generaciones.

La invitación es no vernos como etiquetas sino como una red. En la que puedas reconocer no a un millennial sino a tu hijo o nieto y comenzar a platicar, para conocer, a través la experiencia del otro, lo que estamos perdiendo en el mundo.

Compartamos nuestra percepción para evitar lo que ya mencionaba HaraldWelzer en su libro “Guerras climáticas” cuando hablaba de los pescadores del Golfo de California. Los más jóvenes se mostraban menos consternados ante la disminución de la fauna ictícola pues, a diferencia de sus colegas más maduros, ellos ya no llegaron a conocer muchas de las especies que se podían pescar en la zona. Escuchémonos, no sólo para eliminar la brecha generacional sino para cambiar nuestra percepción y así, nuestra actitud y acciones ante la crisis climática.