/ viernes 26 de marzo de 2021

Antena | Comienza espionaje

Vaya rechazo y malestar que ha provocado el anuncio de la nueva disposición de geolocalización en servicios financieros, ya que ahora si realizas una operación financiera en línea tienes que activar la ubicación del dispositivo que estas utilizando, de lo contrario no podrás disponer de los servicios financieros.

Es claro que se trata de una medida que tiene por objeto identificar posibles contribuyentes que evadan impuestos, así como detectar operaciones de lavado de dinero, e igualmente podrá servir para efectos de llevar a cabo la cobranza a clientes morosos, pero ¿qué garantías reales tenemos los usuarios de servicios financieros de que esa información no podrá ser usada indebidamente?

En México, ya tenemos la experiencia de la venta clandestina del padrón electoral.

Se trata de una medida que claramente constituye un exceso a la privacidad y seguridad de las personas, y no sólo es invasivo de la intimidad, sino que aparte puede poner en riesgo a los usuarios financieros sobre la ubicación en la que se encuentran facilitando la ocasión para ser víctimas de robos y extorsiones.

Es de llamar la atención, que el régimen de geolocalización financiera se fundamente en el Artículo 115 de la Ley de Instituciones de Crédito pero que el mismo no se refiera expresamente a tal obligación para los usuarios, sino que derive de una interpretación y aplicación a través de una facultad reglamentaria con base en la cual se emitió la “circular” que impone la nueva obligación.

El asunto es delicado, es una combinación peligrosa que se puede identificar en un solo momento los datos personales, el monto de las operaciones financieras y la ubicación precisa del usuario, por lo sensibilidad de la información personal valdría la pena conocer la postura del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales.

La geolocalización de personas es una medida excepcional que conforme a la Ley sólo en casos de investigaciones penales, seguridad pública y nacional, se realiza, pero llevarla a la vida común, es un exceso, además es un contrasentido en tiempos de pandemia, donde la gente prefiere hacer sus operaciones en línea que asistir a un banco.

Esto es el comienzo del espionaje 4T, recordemos que buscan tener nuestros datos biométricos (huellas, iris, etc).

INTERFERENCIAS

Desde la semana pasada trascendió que la CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE Telecom) estaría interesada en utilizar la banda 800 MHz para prestar servicios gratuitos de telecomunicaciones, esta banda quedó libre después de que los operadores lo devolvieron por el alto costo que había que pagar al Estado por ella.

De ahí que sería importante conocer bajo qué figura jurídica el Instituto Federal de Telecomunicaciones podrá conceder la citada banda 800, ya que no queda claro si fuese una concesión de espectro para uso público para cumplir sus propios fines o bien una concesión social para prestar servicios sin fines de lucro, además de que estaría pendiente de ver si CFE Telecom pagará lo que era incosteable para los operadores o ¿habrá un descuento?

Vaya rechazo y malestar que ha provocado el anuncio de la nueva disposición de geolocalización en servicios financieros, ya que ahora si realizas una operación financiera en línea tienes que activar la ubicación del dispositivo que estas utilizando, de lo contrario no podrás disponer de los servicios financieros.

Es claro que se trata de una medida que tiene por objeto identificar posibles contribuyentes que evadan impuestos, así como detectar operaciones de lavado de dinero, e igualmente podrá servir para efectos de llevar a cabo la cobranza a clientes morosos, pero ¿qué garantías reales tenemos los usuarios de servicios financieros de que esa información no podrá ser usada indebidamente?

En México, ya tenemos la experiencia de la venta clandestina del padrón electoral.

Se trata de una medida que claramente constituye un exceso a la privacidad y seguridad de las personas, y no sólo es invasivo de la intimidad, sino que aparte puede poner en riesgo a los usuarios financieros sobre la ubicación en la que se encuentran facilitando la ocasión para ser víctimas de robos y extorsiones.

Es de llamar la atención, que el régimen de geolocalización financiera se fundamente en el Artículo 115 de la Ley de Instituciones de Crédito pero que el mismo no se refiera expresamente a tal obligación para los usuarios, sino que derive de una interpretación y aplicación a través de una facultad reglamentaria con base en la cual se emitió la “circular” que impone la nueva obligación.

El asunto es delicado, es una combinación peligrosa que se puede identificar en un solo momento los datos personales, el monto de las operaciones financieras y la ubicación precisa del usuario, por lo sensibilidad de la información personal valdría la pena conocer la postura del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales.

La geolocalización de personas es una medida excepcional que conforme a la Ley sólo en casos de investigaciones penales, seguridad pública y nacional, se realiza, pero llevarla a la vida común, es un exceso, además es un contrasentido en tiempos de pandemia, donde la gente prefiere hacer sus operaciones en línea que asistir a un banco.

Esto es el comienzo del espionaje 4T, recordemos que buscan tener nuestros datos biométricos (huellas, iris, etc).

INTERFERENCIAS

Desde la semana pasada trascendió que la CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE Telecom) estaría interesada en utilizar la banda 800 MHz para prestar servicios gratuitos de telecomunicaciones, esta banda quedó libre después de que los operadores lo devolvieron por el alto costo que había que pagar al Estado por ella.

De ahí que sería importante conocer bajo qué figura jurídica el Instituto Federal de Telecomunicaciones podrá conceder la citada banda 800, ya que no queda claro si fuese una concesión de espectro para uso público para cumplir sus propios fines o bien una concesión social para prestar servicios sin fines de lucro, además de que estaría pendiente de ver si CFE Telecom pagará lo que era incosteable para los operadores o ¿habrá un descuento?