/ lunes 20 de mayo de 2019

Arte y Academia | Historiadores mexicanos

Por: Ana María Longi

"Miguel León Portilla, constituye para nuestra cultura nacional e internacional; un auténtico tesoro de todos nuestros valores autóctonos y humanísticos" aseveraron, en circunstancias no formales, compañeros, amigos y discípulos universitarios, del muy valorado filósofo e historiador mexicano, principal experto en materia del pensamiento y la literatura náhuatl.

Y es que nuestro amado Don Miguel, nacido el 22 de febrero de 1926; constituye a sus 93, un ejemplo muy especial de disciplina, ya que dentro del excelente estado de atención médica y familiar, en el que actualmente se encuentra; expresa sus necesidades disciplinarias a base de señas perfectamente expresadas con las manos, con el propósito de qué, la comunicación imposibilitada guturalmente, no se suspenda.

Y es que el doctor León Portilla, jamás ha dejado de ejercer, su muy noble oficio de profesor; ni como conferencista, catedrático, ensayista, investigador, cronista, o ¡y hasta parece increíble!, como entrevistado.. Y bueno, por esta razón, con el citado intelectual, jamás se deja de aprender. No se pierde el tiempo. Siempre, todos, sin excepción, aprendemos con él, muchísimas cosas. No olvidando, claro está, que Don Miguel, es desde 1988, investigador emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México. Recibiendo en 1995, la Medalla Belisario Domínguez, notificando además que desde 1971, es nada menos que miembro de el Colegio Nacional, institución para cuyo ingreso presentó la ponencia La historia y los historiadores en el México antiguo y fue recibido con discurso de Agustín Yáñez.

Y cuando lo recordamos comunicándose a señas, lo evocamos, también, con su enérgica, clara y hermosa voz, expresar todas las fuentes del saber que él ha logrado hacer suyas; como es el caso de su tesis doctoral, realizada en 1956: "La filosofía náhuatl, estudiada en sus fuentes", bajo la orientación de uno de los más notables nahuatlatos, como lo fue el padre Ángel María Garibay. Igualmente, logró un reconocimiento especial, a través de la traducción, interpretación y publicación de varias recopilaciones de obras en náhuatl. Ya que nuestro académico, ha encabezado todo un movimiento para entender y revaluar la citada literatura, no sólo de la era precolombina, sino también de la actual, ya que el náhuatl sigue siendo la lengua materna de más de un millón de personas.

Esto es, porque ha contribuido a establecer la educación bilingüe rural en México. Y como todo en su vida, es orden y belleza; en 1965, contrajo matrimonio, nada menos que con la brillante lingüista y académica española, Ascensión Hernández Triviño, a quien conoció un año antes durante el Congreso Internacional de Americanistas, celebrado en Barcelona y Sevilla. Y por lo tanto la hija de ambos es: María Luisa León Portilla.

De su vastísima producción, siempre se nombra como ejemplo más popular y famoso nacido en 1959, su maravillosa obra: "Visión de los vencidos". Editada 29 veces y traducida a una docena de idiomas. En este breve libro, León Portilla, reúne varios fragmentos de la visión náhuatl de la conquista española.

Un beso... Y hasta la próxima charla

Por: Ana María Longi

"Miguel León Portilla, constituye para nuestra cultura nacional e internacional; un auténtico tesoro de todos nuestros valores autóctonos y humanísticos" aseveraron, en circunstancias no formales, compañeros, amigos y discípulos universitarios, del muy valorado filósofo e historiador mexicano, principal experto en materia del pensamiento y la literatura náhuatl.

Y es que nuestro amado Don Miguel, nacido el 22 de febrero de 1926; constituye a sus 93, un ejemplo muy especial de disciplina, ya que dentro del excelente estado de atención médica y familiar, en el que actualmente se encuentra; expresa sus necesidades disciplinarias a base de señas perfectamente expresadas con las manos, con el propósito de qué, la comunicación imposibilitada guturalmente, no se suspenda.

Y es que el doctor León Portilla, jamás ha dejado de ejercer, su muy noble oficio de profesor; ni como conferencista, catedrático, ensayista, investigador, cronista, o ¡y hasta parece increíble!, como entrevistado.. Y bueno, por esta razón, con el citado intelectual, jamás se deja de aprender. No se pierde el tiempo. Siempre, todos, sin excepción, aprendemos con él, muchísimas cosas. No olvidando, claro está, que Don Miguel, es desde 1988, investigador emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México. Recibiendo en 1995, la Medalla Belisario Domínguez, notificando además que desde 1971, es nada menos que miembro de el Colegio Nacional, institución para cuyo ingreso presentó la ponencia La historia y los historiadores en el México antiguo y fue recibido con discurso de Agustín Yáñez.

Y cuando lo recordamos comunicándose a señas, lo evocamos, también, con su enérgica, clara y hermosa voz, expresar todas las fuentes del saber que él ha logrado hacer suyas; como es el caso de su tesis doctoral, realizada en 1956: "La filosofía náhuatl, estudiada en sus fuentes", bajo la orientación de uno de los más notables nahuatlatos, como lo fue el padre Ángel María Garibay. Igualmente, logró un reconocimiento especial, a través de la traducción, interpretación y publicación de varias recopilaciones de obras en náhuatl. Ya que nuestro académico, ha encabezado todo un movimiento para entender y revaluar la citada literatura, no sólo de la era precolombina, sino también de la actual, ya que el náhuatl sigue siendo la lengua materna de más de un millón de personas.

Esto es, porque ha contribuido a establecer la educación bilingüe rural en México. Y como todo en su vida, es orden y belleza; en 1965, contrajo matrimonio, nada menos que con la brillante lingüista y académica española, Ascensión Hernández Triviño, a quien conoció un año antes durante el Congreso Internacional de Americanistas, celebrado en Barcelona y Sevilla. Y por lo tanto la hija de ambos es: María Luisa León Portilla.

De su vastísima producción, siempre se nombra como ejemplo más popular y famoso nacido en 1959, su maravillosa obra: "Visión de los vencidos". Editada 29 veces y traducida a una docena de idiomas. En este breve libro, León Portilla, reúne varios fragmentos de la visión náhuatl de la conquista española.

Un beso... Y hasta la próxima charla