/ viernes 21 de junio de 2019

CIPMEX | Atentados en sociedades no occidentales

Por: Tania Naanous

Los atentados terroristas suceden diariamente alrededor del mundo. Sin embargo, cuando pasa en países no Occidentales, la arena internacional los condena menos, la prensa lo reporta menos y a la sociedad le importa menos.

Más del 98% de los atentados se cometen en sociedades no Occidentales, sólo un 2% se cometen en Occidente. La diferencia, cada que un atentado ocurre en este último, el mundo se aterra y conmueve por estas sociedades. Todos rezamos por ellos y ponemos en nuestros perfiles cuánto lo sentimos.

Esta situación es preocupante especialmente por dos aspectos. El primero, estamos intensificando a lo que se le conoce en inglés como “Othering” que implica el arte de la exclusión y diferenciación, ellos y nosotros. Este espectro binario y maniqueo genera racismo e islamofobia sistémica y estructural, lo cual visualiza el odio que se le tiene a las personas de color y a las religiones que no provienen de la tradición judeocristiana.

El segundo, es que los atentados terroristas han generado tanto miedo en poblaciones occidentales que se ha terminado por hacer una generalización a que todos ellos son terroristas o asesinos. Esta situación produce falta de empatía por los miles de civiles que mueren fuera de occidente y normalizan la violencia.

En lo que va de este mes, ha habido ataques en Siria, Kenia, Nigeria, Sudan, Camerún y más. ¿Cuántos de nosotros hemos rezado por los afectados, o compartido su historia en redes sociales? Estamos en un contexto de una derecha y xenofobia ascendente y fenómenos que están cuestionando el status quo actual. Por ello, comenzar a visualizar y dar voz a estas sociedades se convierte en un aspecto tan predominante para darles justicia.

Por: Tania Naanous

Los atentados terroristas suceden diariamente alrededor del mundo. Sin embargo, cuando pasa en países no Occidentales, la arena internacional los condena menos, la prensa lo reporta menos y a la sociedad le importa menos.

Más del 98% de los atentados se cometen en sociedades no Occidentales, sólo un 2% se cometen en Occidente. La diferencia, cada que un atentado ocurre en este último, el mundo se aterra y conmueve por estas sociedades. Todos rezamos por ellos y ponemos en nuestros perfiles cuánto lo sentimos.

Esta situación es preocupante especialmente por dos aspectos. El primero, estamos intensificando a lo que se le conoce en inglés como “Othering” que implica el arte de la exclusión y diferenciación, ellos y nosotros. Este espectro binario y maniqueo genera racismo e islamofobia sistémica y estructural, lo cual visualiza el odio que se le tiene a las personas de color y a las religiones que no provienen de la tradición judeocristiana.

El segundo, es que los atentados terroristas han generado tanto miedo en poblaciones occidentales que se ha terminado por hacer una generalización a que todos ellos son terroristas o asesinos. Esta situación produce falta de empatía por los miles de civiles que mueren fuera de occidente y normalizan la violencia.

En lo que va de este mes, ha habido ataques en Siria, Kenia, Nigeria, Sudan, Camerún y más. ¿Cuántos de nosotros hemos rezado por los afectados, o compartido su historia en redes sociales? Estamos en un contexto de una derecha y xenofobia ascendente y fenómenos que están cuestionando el status quo actual. Por ello, comenzar a visualizar y dar voz a estas sociedades se convierte en un aspecto tan predominante para darles justicia.