/ jueves 22 de noviembre de 2018

¿Cómo dijo?

Migrante es el que migra


No es una vida fácil la del migrante. Alejarse de su país natal para tratar de conseguir una vida mejor o muchas veces hasta para salvar la vida es una decisión difícil para cualquiera, porque sabemos que en el camino se presentan una gran cantidad de obstáculos y peligros que tienen que sortear. Migrante es el que migra —¡no me digas!— bueno, el que se va del lugar en que se habita hacia otro, por razones que, como ya dijimos, necesariamente son muy fuertes.

La palabra migrar viene del latín migrare que tiene el mismo significado que el actual: “cambiar de residencia o moverse”. Según el prefijo que le pongamos a “migrante” es la dirección a la que va la persona. “Emigrante” es el que se va de aquí a otro lugar, mientras que “inmigrante” es el que se mueve de otro lado hacia este lugar.

Hay veces en que la persona no se va por decisión propia, sino que la “corren” porque se portó mal, hizo alguna travesura o se le ocurrió cometer delitos que atentan contra la sociedad en la que viven. Cuando esto sucede, al malvado que corren le llamamos “desterrado” o “expatriado”. Desterrar es quitarle la tierra a algo y si nos referimos a una persona, le quitamos el derecho de habitar cierta tierra o territorio. Mientras tanto, el expatriado es aquel que vive fuera de su patria… y puede ser por su voluntad pero generalmente usamos “expatriar” cuando alguien es forzado a salir de la patria.

Si se vive en un lugar donde hay guerra, revoluciones o persecuciones políticas, la gente huye y se refugia en otro lugar, generalmente otro país. Esos son los refugiados, o sea los que buscaron refugio, que es un lugar en el que estarán seguros del problema del que huyen. Refugium era la palabra culta del latín de la que proviene “refugio”, que ahora que lo menciono me acuerdo que así se llamaba mi vecino: Refugio, nada más que a los que se llaman así, les dicen “Cuco”, digamos que “de cariño”.

No vaya a pensar mal, pero originalmente “refugio” significaba “huir por atrás”. ¿Cómo? Dirá usted. Pues sí, fíjese. Del latín fugere proviene fugarse, huir, y el prefijo “re” significa “hacia atrás” o “de nuevo”. Incluso, en algún tiempo, las casas contaban con un refugio, pero no se trataba de un cuarto cerrado, sino de una salida secreta por la parte trasera por donde podían huir sus moradores si se presentaba algún peligro dentro de su hogar.

Cuando a mi compadre le decían que era muy bueno para el deporte, los amigos no se referían a que le gustara hacer ejercicio, sino que portarse mal cuando andaba de viaje era realmente su deporte favorito, por lo que siempre terminada deportado. Entonces se preguntará usted: ¿por qué son tan parecidas las palabras “deporte” y “deportar”? Ah bueno, porque en sus orígenes era prácticamente la misma palabra.

“Fuereño” es el que viene de fuera —de “jueras”, como decía mi tía—y es lo mismo que “forastero”, que es una palabra que adoptamos del catalán foraster y originalmente del latín foras que quiere decir… ¿qué? Pues fuera, ¡obviamente!

Antes de que me corran a mí también, me despido dejándole una palabra que también está dentro del tema: “asilo”. Los que huyen buscan asilo en algún lugar, un refugio. ¿Qué es asilo? La Real Academia Española lo define como “un lugar privilegiado de refugio para los perseguidos”.

Consultorio Verbalcomodijo2@hotmail.comTwitter: @comodijo

PREGUNTA DEL PÚBLICO: Sergio Velasco me pregunta: ¿cómo se debe decir: el calor o la calor?


RESPUESTA: Se dice “el calor”, mi estimado Sergio. Nunca y por ningún motivo digas “la calor” porque es un error.


AHORA PREGUNTO: De acuerdo con el significado original de la palabra, si un día usted se encuentra a un mameluco, ¿qué hace con él?


  • ¿Se lo come a chupetones?
  • ¿Se lo pone?
  • ¿Lo envía de regreso a su tierra?
  • ¿Se lo regala a su niño para que juegue?


RESPUESTA: c. Aunque ahora aparece en el diccionario con varias acepciones diferentes, el significado original de la palabra mameluco es: “Miembro de una casta militar egipcia, originalmente compuesta de esclavos”, así que si se encuentra usted uno, por favor envíelo de regreso a su tierra.


Existen tres tipos de matemáticos: los que se equivocan al contar y los que no. ¿Cómo dijo? ¡Hasta la próxima!


Migrante es el que migra


No es una vida fácil la del migrante. Alejarse de su país natal para tratar de conseguir una vida mejor o muchas veces hasta para salvar la vida es una decisión difícil para cualquiera, porque sabemos que en el camino se presentan una gran cantidad de obstáculos y peligros que tienen que sortear. Migrante es el que migra —¡no me digas!— bueno, el que se va del lugar en que se habita hacia otro, por razones que, como ya dijimos, necesariamente son muy fuertes.

La palabra migrar viene del latín migrare que tiene el mismo significado que el actual: “cambiar de residencia o moverse”. Según el prefijo que le pongamos a “migrante” es la dirección a la que va la persona. “Emigrante” es el que se va de aquí a otro lugar, mientras que “inmigrante” es el que se mueve de otro lado hacia este lugar.

Hay veces en que la persona no se va por decisión propia, sino que la “corren” porque se portó mal, hizo alguna travesura o se le ocurrió cometer delitos que atentan contra la sociedad en la que viven. Cuando esto sucede, al malvado que corren le llamamos “desterrado” o “expatriado”. Desterrar es quitarle la tierra a algo y si nos referimos a una persona, le quitamos el derecho de habitar cierta tierra o territorio. Mientras tanto, el expatriado es aquel que vive fuera de su patria… y puede ser por su voluntad pero generalmente usamos “expatriar” cuando alguien es forzado a salir de la patria.

Si se vive en un lugar donde hay guerra, revoluciones o persecuciones políticas, la gente huye y se refugia en otro lugar, generalmente otro país. Esos son los refugiados, o sea los que buscaron refugio, que es un lugar en el que estarán seguros del problema del que huyen. Refugium era la palabra culta del latín de la que proviene “refugio”, que ahora que lo menciono me acuerdo que así se llamaba mi vecino: Refugio, nada más que a los que se llaman así, les dicen “Cuco”, digamos que “de cariño”.

No vaya a pensar mal, pero originalmente “refugio” significaba “huir por atrás”. ¿Cómo? Dirá usted. Pues sí, fíjese. Del latín fugere proviene fugarse, huir, y el prefijo “re” significa “hacia atrás” o “de nuevo”. Incluso, en algún tiempo, las casas contaban con un refugio, pero no se trataba de un cuarto cerrado, sino de una salida secreta por la parte trasera por donde podían huir sus moradores si se presentaba algún peligro dentro de su hogar.

Cuando a mi compadre le decían que era muy bueno para el deporte, los amigos no se referían a que le gustara hacer ejercicio, sino que portarse mal cuando andaba de viaje era realmente su deporte favorito, por lo que siempre terminada deportado. Entonces se preguntará usted: ¿por qué son tan parecidas las palabras “deporte” y “deportar”? Ah bueno, porque en sus orígenes era prácticamente la misma palabra.

“Fuereño” es el que viene de fuera —de “jueras”, como decía mi tía—y es lo mismo que “forastero”, que es una palabra que adoptamos del catalán foraster y originalmente del latín foras que quiere decir… ¿qué? Pues fuera, ¡obviamente!

Antes de que me corran a mí también, me despido dejándole una palabra que también está dentro del tema: “asilo”. Los que huyen buscan asilo en algún lugar, un refugio. ¿Qué es asilo? La Real Academia Española lo define como “un lugar privilegiado de refugio para los perseguidos”.

Consultorio Verbalcomodijo2@hotmail.comTwitter: @comodijo

PREGUNTA DEL PÚBLICO: Sergio Velasco me pregunta: ¿cómo se debe decir: el calor o la calor?


RESPUESTA: Se dice “el calor”, mi estimado Sergio. Nunca y por ningún motivo digas “la calor” porque es un error.


AHORA PREGUNTO: De acuerdo con el significado original de la palabra, si un día usted se encuentra a un mameluco, ¿qué hace con él?


  • ¿Se lo come a chupetones?
  • ¿Se lo pone?
  • ¿Lo envía de regreso a su tierra?
  • ¿Se lo regala a su niño para que juegue?


RESPUESTA: c. Aunque ahora aparece en el diccionario con varias acepciones diferentes, el significado original de la palabra mameluco es: “Miembro de una casta militar egipcia, originalmente compuesta de esclavos”, así que si se encuentra usted uno, por favor envíelo de regreso a su tierra.


Existen tres tipos de matemáticos: los que se equivocan al contar y los que no. ¿Cómo dijo? ¡Hasta la próxima!