*Consuetudoquasi altera natura
Los refranes populares expresan la percepción y sabiduría del pueblo. A la que intitula estas líneas podría agregarse aquella que dice: con estos bueyes nos tocó arar. Y en sentido lato, lo que expresan es que se tiene que hacer algo con implementos o instrumentos de baja o dudosa calidad.
Lo anterior viene a cuento por los comentarios de taxistas, oficinistas, comensales y en general, por la población que ríe, se lamenta, se preocupa por la degradación política en que han terminado las denominadas candidaturas independientes. Una buena idea, que en su momento sirvió para ensanchar la apertura democrática.
Lo que ha sucedido con el registro de candidaturas independientes a presidente de la Republica, es tema de reflexión seria y profunda. Los ciudadanos en general de la Ciudad de México y de otras partes del territorio nacional lo han tomado a chunga, es ya una cuestión de comedia, de zarzuela, lástima que en el fondo sea una tragedia. Los memes en las redes sociales, son imparables. La pregunta obligada es si ya te inscribiste.
La ira social, el descontento, el rechazo e inclusive el desprecio en contra de los partidos políticos no cambiará ni menguará la opción de candidaturas independientes parecía un camino alterno que podría en un momento dado ser viable, lo acontecido lo degrada y lo inscribe en el anecdotario de la milagrería mexicana.
El mexicano con su especial forma de ser, en lugar de tomar en serio estas candidaturas, se ríe, hace chistes, se solaza en la broma de tener candidatos independientes de todos los partidos. No es intención de estas líneas vituperar o ridiculizar a quienes se inscribieron. Nuestra reflexión se inscribe en que esa figura electoral se degradó por el abuso hasta límites del ridículo. Algunos de los inscritos debieran tener clara una expectativa de realidad, de correlación de fuerzas, para no hacer el ridículo.
Al final solo quedarán algunos, los que escondiendo o disimulando el origen de su financiamiento logren reunir las 866 593 mil firmas de apoyo en 17 entidades de la federación y obtengan como premio figurar en la boleta electoral del 2018.
Luego entonces vendrá el problema del financiamiento público de sus campañas. La regulación actual los coloca en una posición sumamente desfavorable, respecto de los candidatos de los partidos. Lo anterior, de suyo grave, es decir, de carecer de opciones reales de ganar los comicios, se magnifica cuando en los hechos, sus candidaturas solo logran la pulverización del voto.
Estas candidaturas, duele decirlo, es para satisfacer anhelos de reflectores, golpear adversarios políticos restándoles votos, cumplir caprichos, instrumentar venganzas o simplemente por una supuesta opción de que los conozcan. Lo anterior, sin descartar la presencia de idealistas puros, que también afortunadamente todavía existen.
*La costumbre es casi una segunda naturaleza
