Esta semana se llevó a cabo el Foro Económico Mundial, que se celebra desde hace 50 años en Davos, Suiza, el cual tuvo como tema central la preocupación por los crecientes efectos del cambio climático, los objetivos del desarrollo sostenible y las acciones que se han llevado a cabo para avanzar hacia el Acuerdo de París.
“Nuestros esfuerzos para mantener el calentamiento global limitado a 1,5°C se están quedando peligrosamente cortos”, fue la premisa del fundador y presidente del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, mientras que para el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, está claro que “el cambio climático va más rápido que nosotros”.
“Y no será el planeta el que será destruido, nosotros seremos destruidos por el cambio climático, si no actuamos”, señaló en el encuentro de cuatro días que concluyó ayer viernes, en el que participaron cerca de tres mil líderes empresariales, representantes de organizaciones sociales y culturales, de 117 países, incluidos 53 jefes de Estado, entre ellos Donald Trump, Vladimir Putin, Pedro Sánchez y la canciller alemana, Angela Merkel.
Aunque la cumbre abordó los desafíos clave del mundo este año, divididos en seis áreas de actividad principales: ecología, economía, sociedad, industria, tecnología y geopolítica; con la finalidad de crear un mundo “más cohesionado y sostenible”, el tema del cambio climático centro gran parte del debate.
De hecho, el presidente de Estados Unidos y la activista sueca Greta Thunbergprotagonizaron algunas de las escenas más destacadas, sobre todo durante las conversaciones sobre sostenibilidad y efectos del cambio climático, a pesar de que tuvieron participaciones por separado.
Trump denunció a los "profetas de la fatalidad" y rechazó las "predicciones del apocalipsis". Por su parte, la joven sueca insistió en su crítica hacia los líderes políticos, ya que no obstante de la que considera una emergencia climática y de que hay que actuar ante el calentamiento global, no se ha hecho nada por resolver esta crisis.
Si bien es cierto que el tema sigue en los discursos, también es cierto que han sido pocas las acciones para avanzar. La propiaMerkel fue clara: "Para alcanzar los objetivos de París y, en concreto, la bajada de 1.5ºC del calentamiento global, tenemos que apresurarnos, porque a este ritmo no lograremos cumplir la meta fijada".
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