/ viernes 11 de junio de 2021

Confianza ciudadana

El 6 de junio de 2021 será una fecha histórica para nuestra democracia. Desde septiembre del año pasado se ha señalado que el proceso de organización de la elección no tenía precedente, pues además de realizarse en un contexto de pandemia sanitaria, el INE tenía que convencer y capacitar a millones de ciudadanas y ciudadanos para lograr la integración del mayor número de casillas que se debían instalar a lo largo y ancho del país.


Con independencia del complejo proceso logístico que implicaron dichas tareas, conforme se acercaba la jornada electoral se fue observando cómo la ciudadanía se fue apropiando de la elección. Un ejemplo claro de dicha actitud fue que el INE necesitaba más de 1.4 millones de mexicanas y mexicanos para integrar las casillas y para mayo ya se contaba con el doble de personas con interés de participar.

Un rasgo especial de la democracia mexicana es la ciudadanización de los procesos electorales. Nuestras vecinas y vecinos reciben y cuentan los votos el día de la jornada electoral. No es la autoridad electoral. Recordemos que ante la desconfianza que implicaba que el gobierno en turno fuera quien realizara dichas tareas, desde hace muchos años se diseñó un sistema en el que la ciudadanía, con la debida capacitación, es quien se encargan de instalar las casillas, de entregar las boletas electorales, de marcar nuestros dedos y credenciales para garantizar que nadie vote más de una vez y de contar los votos.

Conociendo ello y teniendo en consideración que el INE había implementado protocolos sanitarios en las casillas para garantizar que el derecho al voto no pusiera en riesgo nuestra salud, cerca de 48 millones de personas, esto es, el 52% de los posibles votantes acudieron a las urnas. Ese porcentaje de participación en la votación es el más alto para una elección intermedia en lo que va de este siglo.

Derivado de esa confianza ciudadana, la autoridad instrumentó dos procedimientos para garantizar información y certidumbre a la población respecto de los resultados de la elección. El mismo día de la jornada electoral realizó 16 conteos rápidos para informar cuáles eran las tendencias de votación en la elección federal y en las 15 elecciones de gubernaturas.

Por otra parte, desarrolló para la elección de diputaciones federales el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP). De esta manera la ciudadanía podría verificar los resultados a distintos niveles, esto es, en casillas, distrito, estado, circunscripción y a nivel nacional. Este programa inició el domingo a las 20 horas y concluyó su funcionamiento a la misma hora del pasado lunes, con información del 99.55% de actas de casillas capturadas.

Seamos claros: La confianza ciudadana se paga con confianza institucional y más cuando se trata de elecciones. Por ello, en menos de 24 horas, puede advertirse que los datos contenidos en el PREP de la elección federal coinciden significativamente con las tendencias de votación que arrojó el Conteo Rápido. Una vez más la tecnología y la ciencia (matemáticas y estadística) al servicio de la ciudadanía.

Si bien el miércoles pasado iniciaron los cómputos oficiales y concluyen este domingo, dicha actividad no implica que el trabajo ciudadano haya sido incorrecto. El objetivo es asegurar, ante la presencia de representantes de partidos políticos, que los votos fueron contados correctamente.

De hecho, es en esta etapa en que el INE puede abrir paquetes electorales para recontar los votos y con ello resolver las dudas que existen sobre el cómputo ciudadano. La experiencia demuestra que los resultados son constantes y no hay cambios mayores. En esta ocasión la autoridad recontará más del 59% de actas de casillas y a la fecha de entrega de este texto, ya se habían recontado el 98.64%.

El proceso electoral de 2021 no ha concluido. Todavía falta que los partidos políticos presenten sus impugnaciones ante los tribunales y el INE concluya la fiscalización de los gastos de campaña de candidatas y candidatos. La fecha límite es el 22 de julio. En esta etapa se analizará con exhaustividad el reporte de gastos, se resolverán las quejas y se impondrán, en su caso, las sanciones correspondientes. También podrá determinarse si hubo o no rebase en el tope de gastos de campaña. Dicha información es útil para los tribunales al momento de pronunciare sobre la validez de una elección.

A finales de agosto el INE tendrá que realizar la asignación de diputaciones por representación proporcional y con ello conoceremos la integración definitiva de la Cámara de Diputadas y Diputados. Tengamos paciencia y responsabilidad. Hasta el momento ninguna fuerza política puede afirmar que ganó todo o que perdió todo.

La única que puede cantar victoria es la ciudadanía. Lo ocurrido el domingo es una muestra más que la jornada electoral es un espacio donde las y los ciudadanos tienen el rol principal.

*Jefe de oficina de la Presidencia del Consejo General del INE

El 6 de junio de 2021 será una fecha histórica para nuestra democracia. Desde septiembre del año pasado se ha señalado que el proceso de organización de la elección no tenía precedente, pues además de realizarse en un contexto de pandemia sanitaria, el INE tenía que convencer y capacitar a millones de ciudadanas y ciudadanos para lograr la integración del mayor número de casillas que se debían instalar a lo largo y ancho del país.


Con independencia del complejo proceso logístico que implicaron dichas tareas, conforme se acercaba la jornada electoral se fue observando cómo la ciudadanía se fue apropiando de la elección. Un ejemplo claro de dicha actitud fue que el INE necesitaba más de 1.4 millones de mexicanas y mexicanos para integrar las casillas y para mayo ya se contaba con el doble de personas con interés de participar.

Un rasgo especial de la democracia mexicana es la ciudadanización de los procesos electorales. Nuestras vecinas y vecinos reciben y cuentan los votos el día de la jornada electoral. No es la autoridad electoral. Recordemos que ante la desconfianza que implicaba que el gobierno en turno fuera quien realizara dichas tareas, desde hace muchos años se diseñó un sistema en el que la ciudadanía, con la debida capacitación, es quien se encargan de instalar las casillas, de entregar las boletas electorales, de marcar nuestros dedos y credenciales para garantizar que nadie vote más de una vez y de contar los votos.

Conociendo ello y teniendo en consideración que el INE había implementado protocolos sanitarios en las casillas para garantizar que el derecho al voto no pusiera en riesgo nuestra salud, cerca de 48 millones de personas, esto es, el 52% de los posibles votantes acudieron a las urnas. Ese porcentaje de participación en la votación es el más alto para una elección intermedia en lo que va de este siglo.

Derivado de esa confianza ciudadana, la autoridad instrumentó dos procedimientos para garantizar información y certidumbre a la población respecto de los resultados de la elección. El mismo día de la jornada electoral realizó 16 conteos rápidos para informar cuáles eran las tendencias de votación en la elección federal y en las 15 elecciones de gubernaturas.

Por otra parte, desarrolló para la elección de diputaciones federales el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP). De esta manera la ciudadanía podría verificar los resultados a distintos niveles, esto es, en casillas, distrito, estado, circunscripción y a nivel nacional. Este programa inició el domingo a las 20 horas y concluyó su funcionamiento a la misma hora del pasado lunes, con información del 99.55% de actas de casillas capturadas.

Seamos claros: La confianza ciudadana se paga con confianza institucional y más cuando se trata de elecciones. Por ello, en menos de 24 horas, puede advertirse que los datos contenidos en el PREP de la elección federal coinciden significativamente con las tendencias de votación que arrojó el Conteo Rápido. Una vez más la tecnología y la ciencia (matemáticas y estadística) al servicio de la ciudadanía.

Si bien el miércoles pasado iniciaron los cómputos oficiales y concluyen este domingo, dicha actividad no implica que el trabajo ciudadano haya sido incorrecto. El objetivo es asegurar, ante la presencia de representantes de partidos políticos, que los votos fueron contados correctamente.

De hecho, es en esta etapa en que el INE puede abrir paquetes electorales para recontar los votos y con ello resolver las dudas que existen sobre el cómputo ciudadano. La experiencia demuestra que los resultados son constantes y no hay cambios mayores. En esta ocasión la autoridad recontará más del 59% de actas de casillas y a la fecha de entrega de este texto, ya se habían recontado el 98.64%.

El proceso electoral de 2021 no ha concluido. Todavía falta que los partidos políticos presenten sus impugnaciones ante los tribunales y el INE concluya la fiscalización de los gastos de campaña de candidatas y candidatos. La fecha límite es el 22 de julio. En esta etapa se analizará con exhaustividad el reporte de gastos, se resolverán las quejas y se impondrán, en su caso, las sanciones correspondientes. También podrá determinarse si hubo o no rebase en el tope de gastos de campaña. Dicha información es útil para los tribunales al momento de pronunciare sobre la validez de una elección.

A finales de agosto el INE tendrá que realizar la asignación de diputaciones por representación proporcional y con ello conoceremos la integración definitiva de la Cámara de Diputadas y Diputados. Tengamos paciencia y responsabilidad. Hasta el momento ninguna fuerza política puede afirmar que ganó todo o que perdió todo.

La única que puede cantar victoria es la ciudadanía. Lo ocurrido el domingo es una muestra más que la jornada electoral es un espacio donde las y los ciudadanos tienen el rol principal.

*Jefe de oficina de la Presidencia del Consejo General del INE