/ viernes 27 de agosto de 2021

Cuando se requiere calidad, cantidad y particularmente suficiencia

La región de La Laguna, entre Durango y Coahuila, es una zona de una gran productividad agroalimentaria y de creciente desarrollo industrial, a la que cada vez ha resultado más complicado hacer llegar el agua que requiere, tanto para su producción de alimentos, como para el abastecimiento de la población.

Finalmente, por algo, el agua es vida, algo más allá de ser una frase más, es una verdad contundente, pero demanda mucho más que tener el vital líquido, ya que es necesario que este presente condiciones adecuadas para su consumo y utilización.

Ya les mencionaba que, en algún punto particularmente complicado del abastecimiento de agua para La Laguna, particularmente en Durango, esta llegaba con un elevado contenido de arsénico, del que los científicos señalan que el máximo que puede procesar el cuerpo humano es de 25 microgramos, pero en la zona, los niveles registrados, llegaban a superar los 500 microgramos, lo que genera un elevado potencial no solo dañino, sino letal.

En función de lo mencionado, la presa derivadora que forma parte del proyecto ‘Agua Saludable para La Laguna’, contará con materiales amigables con el entorno ambiental, descartándose, entre otras posibles afectaciones, aquellas que se pudieran registrar en el Cañón de Fernández, que es uno de los puntos estratégicos de esta iniciativa impulsada por el Gobierno Federal, conjuntamente con las administraciones estatales.

Al respecto, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), ha dado a conocer que el proceso para llevar a cabo este proyecto, hace uso de espacio en las orillas del canal de San Jacinto, por haber en la zona, puntos previamente impactados por la actividad humana, estando a una distancia considerable de la zona central de la reserva natural.

Destacan que se tienen ya antecedentes de este tipo de iniciativas en varias regiones del país, siendo lo más destacado, aquello que corresponde al Sistema Cutzamala, en el centro del país, que para funcionar, sustrae agua de diferentes presas, como El Bosque, Villa Victoria y Valle de Bravo.

Sobre ‘Agua Saludable para La Laguna’, la Jefatura de Proyectos de Estudios de Infraestructura Hidroagrícola de la Conagua, informó que se realizaron vastos análisis, desde hace más de una década, buscando posibilidades de abastecimiento a largo plazo de agua, para dar viabilidad a la zona lagunera, contemplándose un funcionamiento que, en una primera instancia, operara hasta el 2045, siempre contando con una alta calidad en el agua utilizada.

La prioridad esencial, es generar una opción viable que, de alguna forma, contrarreste el abatimiento y sobre todo la contaminación de los mantos acuíferos de la Laguna, algo en lo que cobra especial importancia el no seguir sustrayendo este vital líquido cada vez de mayores profundidades, lo que puede implicar toxicidad en el agua y generar una mayor carencia a futuro.

Una parte fundamental de todo este proyecto, es que ahora se cuenta con los recursos necesarios para llevarlo a cabo, lo que genera una oportunidad única, tratándose de más de 800 millones de pesos, que sin duda harán la diferencia, tanto para la calidad de vida en La Laguna, como para preservar e impulsar la productividad agroalimentaria de la región.


FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @yoladelatorre

La región de La Laguna, entre Durango y Coahuila, es una zona de una gran productividad agroalimentaria y de creciente desarrollo industrial, a la que cada vez ha resultado más complicado hacer llegar el agua que requiere, tanto para su producción de alimentos, como para el abastecimiento de la población.

Finalmente, por algo, el agua es vida, algo más allá de ser una frase más, es una verdad contundente, pero demanda mucho más que tener el vital líquido, ya que es necesario que este presente condiciones adecuadas para su consumo y utilización.

Ya les mencionaba que, en algún punto particularmente complicado del abastecimiento de agua para La Laguna, particularmente en Durango, esta llegaba con un elevado contenido de arsénico, del que los científicos señalan que el máximo que puede procesar el cuerpo humano es de 25 microgramos, pero en la zona, los niveles registrados, llegaban a superar los 500 microgramos, lo que genera un elevado potencial no solo dañino, sino letal.

En función de lo mencionado, la presa derivadora que forma parte del proyecto ‘Agua Saludable para La Laguna’, contará con materiales amigables con el entorno ambiental, descartándose, entre otras posibles afectaciones, aquellas que se pudieran registrar en el Cañón de Fernández, que es uno de los puntos estratégicos de esta iniciativa impulsada por el Gobierno Federal, conjuntamente con las administraciones estatales.

Al respecto, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), ha dado a conocer que el proceso para llevar a cabo este proyecto, hace uso de espacio en las orillas del canal de San Jacinto, por haber en la zona, puntos previamente impactados por la actividad humana, estando a una distancia considerable de la zona central de la reserva natural.

Destacan que se tienen ya antecedentes de este tipo de iniciativas en varias regiones del país, siendo lo más destacado, aquello que corresponde al Sistema Cutzamala, en el centro del país, que para funcionar, sustrae agua de diferentes presas, como El Bosque, Villa Victoria y Valle de Bravo.

Sobre ‘Agua Saludable para La Laguna’, la Jefatura de Proyectos de Estudios de Infraestructura Hidroagrícola de la Conagua, informó que se realizaron vastos análisis, desde hace más de una década, buscando posibilidades de abastecimiento a largo plazo de agua, para dar viabilidad a la zona lagunera, contemplándose un funcionamiento que, en una primera instancia, operara hasta el 2045, siempre contando con una alta calidad en el agua utilizada.

La prioridad esencial, es generar una opción viable que, de alguna forma, contrarreste el abatimiento y sobre todo la contaminación de los mantos acuíferos de la Laguna, algo en lo que cobra especial importancia el no seguir sustrayendo este vital líquido cada vez de mayores profundidades, lo que puede implicar toxicidad en el agua y generar una mayor carencia a futuro.

Una parte fundamental de todo este proyecto, es que ahora se cuenta con los recursos necesarios para llevarlo a cabo, lo que genera una oportunidad única, tratándose de más de 800 millones de pesos, que sin duda harán la diferencia, tanto para la calidad de vida en La Laguna, como para preservar e impulsar la productividad agroalimentaria de la región.


FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @yoladelatorre