/ martes 7 de junio de 2022

Cuarta transformación avanza

Los resultados de las elecciones celebradas ayer indican que la cuarta transformación avanza. El veredicto de las urnas entregó cuatro nuevas gubernaturas al Partido Morena, que ahora, por sí mismo, tendrá veinte y dos más, San Luis Potosí y Morelos, con sus aliados políticos, mientras que, en su conjunto, los partidos de la oposición conservarán diez. López Obrador volvió a mostrar músculo e hizo evidente lo que algunas encuestas de semanas anteriores señalaron, el presidente está mejor evaluado, al menos en 27 entidades federativas, que los gobernadores en turno.


La nueva geometría política del país indica que Morena creció significativamente y que a pasos agigantados se convierte en el nuevo partido hegemónico, más allá de que en sus filas luzcan figuras que surgieron en PRI, PRD o PAN. Los electores que acudieron ayer a las urnas depositaron su confianza en Morena y expresaron por la vía del voto que por el momento no quieren regresar con los partidos de la coalición. Señaladamente pierde el PRI, que se quedará solo con Coahuila y Estado de México, mientras que Durango lo compartirá con el PAN, el cual, a su vez, conserva seis gubernaturas con la ratificación de Aguascalientes y MC seguirá con 2 de las más importantes del país.


Por las elecciones de ayer, el INE y los organismos electorales locales merecen, de nuevo, un amplio reconocimiento. La logística fue impecable, con poco más del 99% de las casillas instaladas, incidentes menores que llevaron a que en algunos lugares focalizados en Tamaulipas y Oaxaca se suspendieran por intervalos de tiempo las votaciones, la documentación estuvo completa, los conteos rápidos y los programas de información sobre el desarrollo de la jornada y de los resultados funcionaron con el profesionalismo que los caracteriza.


Los ciudadanos volvieron a dar una demostración de compromiso cívico integrando las mesas directivas de casillas y contando con imparcialidad los votos depositados en las urnas. La participación ciudadana es diferenciada, conforme al avance de los prep´s en Aguascalientes es del 45.99%, en Durango del 49.94%, en Hidalgo del 47.58%, en Oaxaca del 38.01%, en Quintana Roo del 40.30% y en Tamaulipas del 53.31%. La más baja en Oaxaca y la más alta en Tamaulipas.


Habrá que analizar otros temas para saber cuál es el efecto en estas elecciones de múltiples señalamientos sobre la indebida intervención del crimen organizado, la compra y coacción del voto denunciada por unos y por otros, el papel casi inadvertido de las Fiscalías en materia de delitos electorales y el inaceptable activismo de servidores públicos de Morena que volvieron a desbordar los límites constitucionales que les establecen restricciones y se volcaron en una cruzada de apoyo por sus candidaturas, inobservando múltiples determinaciones de las autoridades electorales.


Mientras tanto, el territorio nacional se sigue pintando de guinda a la par que se desvanecen los tenues equilibrios de poder desde las entidades federativas que ahora son del partido mayoritario, casi hegemónico. El eje articulador sigue siendo el proyecto de López Obrador que da pasos definitivos para las elecciones del próximo año y la sucesión presidencial de 2024 ya en marcha.


*Profesor en UNAM Y UP. Especialista en materia Electoral.

@MarcoBanos

Los resultados de las elecciones celebradas ayer indican que la cuarta transformación avanza. El veredicto de las urnas entregó cuatro nuevas gubernaturas al Partido Morena, que ahora, por sí mismo, tendrá veinte y dos más, San Luis Potosí y Morelos, con sus aliados políticos, mientras que, en su conjunto, los partidos de la oposición conservarán diez. López Obrador volvió a mostrar músculo e hizo evidente lo que algunas encuestas de semanas anteriores señalaron, el presidente está mejor evaluado, al menos en 27 entidades federativas, que los gobernadores en turno.


La nueva geometría política del país indica que Morena creció significativamente y que a pasos agigantados se convierte en el nuevo partido hegemónico, más allá de que en sus filas luzcan figuras que surgieron en PRI, PRD o PAN. Los electores que acudieron ayer a las urnas depositaron su confianza en Morena y expresaron por la vía del voto que por el momento no quieren regresar con los partidos de la coalición. Señaladamente pierde el PRI, que se quedará solo con Coahuila y Estado de México, mientras que Durango lo compartirá con el PAN, el cual, a su vez, conserva seis gubernaturas con la ratificación de Aguascalientes y MC seguirá con 2 de las más importantes del país.


Por las elecciones de ayer, el INE y los organismos electorales locales merecen, de nuevo, un amplio reconocimiento. La logística fue impecable, con poco más del 99% de las casillas instaladas, incidentes menores que llevaron a que en algunos lugares focalizados en Tamaulipas y Oaxaca se suspendieran por intervalos de tiempo las votaciones, la documentación estuvo completa, los conteos rápidos y los programas de información sobre el desarrollo de la jornada y de los resultados funcionaron con el profesionalismo que los caracteriza.


Los ciudadanos volvieron a dar una demostración de compromiso cívico integrando las mesas directivas de casillas y contando con imparcialidad los votos depositados en las urnas. La participación ciudadana es diferenciada, conforme al avance de los prep´s en Aguascalientes es del 45.99%, en Durango del 49.94%, en Hidalgo del 47.58%, en Oaxaca del 38.01%, en Quintana Roo del 40.30% y en Tamaulipas del 53.31%. La más baja en Oaxaca y la más alta en Tamaulipas.


Habrá que analizar otros temas para saber cuál es el efecto en estas elecciones de múltiples señalamientos sobre la indebida intervención del crimen organizado, la compra y coacción del voto denunciada por unos y por otros, el papel casi inadvertido de las Fiscalías en materia de delitos electorales y el inaceptable activismo de servidores públicos de Morena que volvieron a desbordar los límites constitucionales que les establecen restricciones y se volcaron en una cruzada de apoyo por sus candidaturas, inobservando múltiples determinaciones de las autoridades electorales.


Mientras tanto, el territorio nacional se sigue pintando de guinda a la par que se desvanecen los tenues equilibrios de poder desde las entidades federativas que ahora son del partido mayoritario, casi hegemónico. El eje articulador sigue siendo el proyecto de López Obrador que da pasos definitivos para las elecciones del próximo año y la sucesión presidencial de 2024 ya en marcha.


*Profesor en UNAM Y UP. Especialista en materia Electoral.

@MarcoBanos