/ sábado 4 de abril de 2020

Cumplir protocolos, único camino

Es el momento de escribir nuestra historia: que el país sea visto como el más disciplinado y responsabilidad social salvando la vida. En los temas de esta columna catorcenal se procura poner bajo la mirada el trabajo en la prevención que, por cierto, siempre es pertinente además de ser fortaleza que potencia respuestas adecuadas para los distintos escenarios - esperados, inesperados, deseados, no deseados - posibles en el tejido social.

Con base al contexto que vivimos de la emergencia sanitaria mundial y en el país, calificada por expertos como escenario de origen “inesperado y no deseados” con múltiples consecuencias negativas, a la fecha “esperadas y no deseados” para personas, empresas y el gobierno, resulta importante reflexionar: “el cuidémonos”, aplicando acciones de protección y ayuda mutua; al practicar el “Quédate en casa”, acotamos, frenamos la veloz propagación del contagio del Covid-19.

Es necesario el concurso de todos para superar la crisis y proteger al tejido social a favor del bien común, familiar y personal. No hay duda: es un solo enemigo que enfrentar, que reclama la acción y disciplina de cada uno de los que radicamos en México. Sólo actuando como una sola entidad conformada por millones de personas “quedándose en casa” (adultos, niñas y niños, jóvenes, adultos mayores) - nos cuidamos a nosotros y cuidamos a los demás - saldremos con las menores pérdidas humanas, económicas y sociales.

En el análisis de caso por caso, es importante visibilicemos un reto, que por sus características es representativo en las áreas de oportunidad para acotar la actual crisis sanitaria mundial en espacios cerrados con miles de personas “bajo un mismo techo” e interactuando con personas que entran y salen. Nos referimos al Protocolo de Atención ante el COVID-19 aplicable en los Centros Penitenciarios y Centros Especializados en Atención a Adolescentes de la Ciudad de México.

Comentemos algunos puntos del referido Protocolo:

-Población objetivo: Personas privadas de su libertad, servidores públicos adscritos a las diversas instalaciones, familiares que visitan a las personas privadas de su libertad, abogados, personas de las Organizaciones Civiles y demás relacionadas.

-En la Ciudad de México existen 13 Centros Penitenciarios (11 varoniles y 2 femeniles), en donde la población es de 24,755 personas privadas de su libertad. Más, 6 Centros Especializados en Atención a Adolescentes con un total de 121 personas. Tres Centros tienen la mayor concentración (76%): Reclusorio Preventivo Varonil Oriente 8,327; Reclusorio Preventivo Varonil Norte con una población de 7,072; y Reclusorio Varonil Sur con 3,317.

-El documento, enunciativamente, contiene: Introducción; Presentación; Población por Centro Penitenciario; Acciones a realizar por fases; Estrategias de detección, atención, aislamiento, otros.

Para concluir, mi agradecimiento ciudadano y de la esfera laboral, a los miles de compañeros y autoridades servidores públicos que mantienen la capacidad instalada en forma ininterrumpida, atendiendo la normatividad durante las 24 horas de los 365 días del año; a las 25 mil personas privadas de su libertad en los diferentes Centros de internamiento por su respeto a los Protocolos; y a los familiares que con valioso apoyo hacen posible que las actividades fluyan y generen fortaleza a los que ahí permanecen, en espera de su reinserción social. Todos, sin duda alguna, marcarán el antes y después, es estos espacios.

hazael.ruiz@hotmail.com


Es el momento de escribir nuestra historia: que el país sea visto como el más disciplinado y responsabilidad social salvando la vida. En los temas de esta columna catorcenal se procura poner bajo la mirada el trabajo en la prevención que, por cierto, siempre es pertinente además de ser fortaleza que potencia respuestas adecuadas para los distintos escenarios - esperados, inesperados, deseados, no deseados - posibles en el tejido social.

Con base al contexto que vivimos de la emergencia sanitaria mundial y en el país, calificada por expertos como escenario de origen “inesperado y no deseados” con múltiples consecuencias negativas, a la fecha “esperadas y no deseados” para personas, empresas y el gobierno, resulta importante reflexionar: “el cuidémonos”, aplicando acciones de protección y ayuda mutua; al practicar el “Quédate en casa”, acotamos, frenamos la veloz propagación del contagio del Covid-19.

Es necesario el concurso de todos para superar la crisis y proteger al tejido social a favor del bien común, familiar y personal. No hay duda: es un solo enemigo que enfrentar, que reclama la acción y disciplina de cada uno de los que radicamos en México. Sólo actuando como una sola entidad conformada por millones de personas “quedándose en casa” (adultos, niñas y niños, jóvenes, adultos mayores) - nos cuidamos a nosotros y cuidamos a los demás - saldremos con las menores pérdidas humanas, económicas y sociales.

En el análisis de caso por caso, es importante visibilicemos un reto, que por sus características es representativo en las áreas de oportunidad para acotar la actual crisis sanitaria mundial en espacios cerrados con miles de personas “bajo un mismo techo” e interactuando con personas que entran y salen. Nos referimos al Protocolo de Atención ante el COVID-19 aplicable en los Centros Penitenciarios y Centros Especializados en Atención a Adolescentes de la Ciudad de México.

Comentemos algunos puntos del referido Protocolo:

-Población objetivo: Personas privadas de su libertad, servidores públicos adscritos a las diversas instalaciones, familiares que visitan a las personas privadas de su libertad, abogados, personas de las Organizaciones Civiles y demás relacionadas.

-En la Ciudad de México existen 13 Centros Penitenciarios (11 varoniles y 2 femeniles), en donde la población es de 24,755 personas privadas de su libertad. Más, 6 Centros Especializados en Atención a Adolescentes con un total de 121 personas. Tres Centros tienen la mayor concentración (76%): Reclusorio Preventivo Varonil Oriente 8,327; Reclusorio Preventivo Varonil Norte con una población de 7,072; y Reclusorio Varonil Sur con 3,317.

-El documento, enunciativamente, contiene: Introducción; Presentación; Población por Centro Penitenciario; Acciones a realizar por fases; Estrategias de detección, atención, aislamiento, otros.

Para concluir, mi agradecimiento ciudadano y de la esfera laboral, a los miles de compañeros y autoridades servidores públicos que mantienen la capacidad instalada en forma ininterrumpida, atendiendo la normatividad durante las 24 horas de los 365 días del año; a las 25 mil personas privadas de su libertad en los diferentes Centros de internamiento por su respeto a los Protocolos; y a los familiares que con valioso apoyo hacen posible que las actividades fluyan y generen fortaleza a los que ahí permanecen, en espera de su reinserción social. Todos, sin duda alguna, marcarán el antes y después, es estos espacios.

hazael.ruiz@hotmail.com