/ viernes 14 de diciembre de 2018

Desde los tendidos de la plaza México

Antonio Ferrera cortó orejas salió en hombros



Confirmando el dicho: “no hay quinto malo”; la soleada tarde, de muy agradable clima otoñal se disfrutó el arte, temple y gusto del toreo que pocos aficionados disfrutaron, pues predominaron los aficionados futbolísticos y hubo partidos aquí, allá y acullá. Con lo Toros de Santa Bárbara y uno de Lebrija que reservaba la embestida. Los del ganadero Borrego en general débiles, el cuarto muy noble y trasmitía se fue con arrastre lento, el que cerró plaza fue el lunar. 16 años después regresó a esta plaza el hispano Antonio Ferrera dispuesto a justificar sus triunfos en su patria, abrió plaza con “Calesero” y se vio dispuesto con recursos dejó estocada caída y dio vuelta al ruedo. Ya con su segundo “Abuelo” Ferrera que vestía de agua y oro, bordó un quitazo muy coreado y su faena fue un disfrute del torero y los aficionados, variedad, sentimiento y entrega. Clavó la espada en la arena y sorprendió toreando sin ayudado por ambos lados festejada con alegría y sonoros olés. Para rematar con estocada entera “traserita” y así cortar las orejas del de hierro de Santa Bárbara que lucio junto al ganadero al dar felices la vuelta al ruedo. El segundo espada Jerónimo escuchó aplausos cuando se abrió de capa pero no se confió con la muleta. Su segundo débil no transmitió y todo quedó sin redondear. El hidrocálido Juan Pablo Sánchez hizo gala de su calidad y logró muletazos muy festejados templados y lentos el sello de la casa, duró poco el de Santa Bárbara Juan Pablo lo aguantó y sacó lo bueno que tuvo. Mal con la espada perdió un oreja ya ganada. Y lo dicho el toro que cerró plaza no tuvo tela. Todos salimos contentos pues fue una tarde de buen toreo tres estilos tres edades y se disfrutó lo bueno.

LA GALLICULTURA IMPORTANTE ACTIVIDAD AGROPECUARIA TRADICIONAL ANCESTRAL

Se refiere a la crianza y reproducción del gallo combatiente. Actividad que jamás ha recibido un peso de subsidio, por el contrario, genera aportaciones económicas importantes debido a la exportación. Generando más de un millón de empleos. Actualmente la hábitat natural de estos gallos silvestres que datan de hace millones de años, casi ha desparecido debido a la urbanización así que los combates son ahora en los palenques y realizados por los galleros. Junto a las ferias como las corridas de toros que le dan sabor y color al folklore mexicano, son tradiciones. Dándose así a la tarea de preservar esta maravillosa ave Todo inicia formando lotes de cría, una misión sagrada que requiere la tecnología más avanzada y genera más de un millón de empleos directos e indirectos en México. Los pequeños productores no pueden competir con los con los industriales de pollo, huevo, cerdo, leche. Es por ello que las mascotas y la gallicultura es opción para la supervivencia de las farmacias veterinarias y forrajeras: 17,500 galleros. Su actividad desaparecería como los laboratorios y fábricas de alimentos balanceados. Más de 12,000 profesionales de la veterinaria y agronomía perderían sus empleos. La crianza de los pollos de pelea es la actividad pecuaria más extendida por todos los climas y regiones del país. “Los verdaderos amantes de los animales somos los que los producimos” Afirman estos galleros. ¡Que vivan y respeten nuestras tradiciones peleas de gallos, corridas de toros, charrería y rodeos!…NOS VEREMOS MÁS TARDE…QUE EL CILELO LOS JUZGUE…

Antonio Ferrera cortó orejas salió en hombros



Confirmando el dicho: “no hay quinto malo”; la soleada tarde, de muy agradable clima otoñal se disfrutó el arte, temple y gusto del toreo que pocos aficionados disfrutaron, pues predominaron los aficionados futbolísticos y hubo partidos aquí, allá y acullá. Con lo Toros de Santa Bárbara y uno de Lebrija que reservaba la embestida. Los del ganadero Borrego en general débiles, el cuarto muy noble y trasmitía se fue con arrastre lento, el que cerró plaza fue el lunar. 16 años después regresó a esta plaza el hispano Antonio Ferrera dispuesto a justificar sus triunfos en su patria, abrió plaza con “Calesero” y se vio dispuesto con recursos dejó estocada caída y dio vuelta al ruedo. Ya con su segundo “Abuelo” Ferrera que vestía de agua y oro, bordó un quitazo muy coreado y su faena fue un disfrute del torero y los aficionados, variedad, sentimiento y entrega. Clavó la espada en la arena y sorprendió toreando sin ayudado por ambos lados festejada con alegría y sonoros olés. Para rematar con estocada entera “traserita” y así cortar las orejas del de hierro de Santa Bárbara que lucio junto al ganadero al dar felices la vuelta al ruedo. El segundo espada Jerónimo escuchó aplausos cuando se abrió de capa pero no se confió con la muleta. Su segundo débil no transmitió y todo quedó sin redondear. El hidrocálido Juan Pablo Sánchez hizo gala de su calidad y logró muletazos muy festejados templados y lentos el sello de la casa, duró poco el de Santa Bárbara Juan Pablo lo aguantó y sacó lo bueno que tuvo. Mal con la espada perdió un oreja ya ganada. Y lo dicho el toro que cerró plaza no tuvo tela. Todos salimos contentos pues fue una tarde de buen toreo tres estilos tres edades y se disfrutó lo bueno.

LA GALLICULTURA IMPORTANTE ACTIVIDAD AGROPECUARIA TRADICIONAL ANCESTRAL

Se refiere a la crianza y reproducción del gallo combatiente. Actividad que jamás ha recibido un peso de subsidio, por el contrario, genera aportaciones económicas importantes debido a la exportación. Generando más de un millón de empleos. Actualmente la hábitat natural de estos gallos silvestres que datan de hace millones de años, casi ha desparecido debido a la urbanización así que los combates son ahora en los palenques y realizados por los galleros. Junto a las ferias como las corridas de toros que le dan sabor y color al folklore mexicano, son tradiciones. Dándose así a la tarea de preservar esta maravillosa ave Todo inicia formando lotes de cría, una misión sagrada que requiere la tecnología más avanzada y genera más de un millón de empleos directos e indirectos en México. Los pequeños productores no pueden competir con los con los industriales de pollo, huevo, cerdo, leche. Es por ello que las mascotas y la gallicultura es opción para la supervivencia de las farmacias veterinarias y forrajeras: 17,500 galleros. Su actividad desaparecería como los laboratorios y fábricas de alimentos balanceados. Más de 12,000 profesionales de la veterinaria y agronomía perderían sus empleos. La crianza de los pollos de pelea es la actividad pecuaria más extendida por todos los climas y regiones del país. “Los verdaderos amantes de los animales somos los que los producimos” Afirman estos galleros. ¡Que vivan y respeten nuestras tradiciones peleas de gallos, corridas de toros, charrería y rodeos!…NOS VEREMOS MÁS TARDE…QUE EL CILELO LOS JUZGUE…