La comunidad ubica en el centro de atención las actividades para volver a las rutinas afines a una vida cotidiana, a la deseada y esperada nueva realidad – normalidad. Sin duda, es un anhelo loable sin bajar la guardia en los protocolos y ocupar la mente con pensamientos y acciones positivas.
En este sentido, la colectividad acentúa lo que más evoca y extraña después de 15 meses de confinamiento: las reuniones en familia y amistades, caminar en los centros comerciales, el super, ir al tianguis, a la escuela, viajes, restaurante, teatro, cine, eventos deportivos, realizar ejercicio en espacios públicos y gimnasio, etc.
En esta ocasión comentemos del ejercicio y los deportes.
1. Hace una semana, la oportunidad del futbol y su campeonato con público presencial en simbólico estadio de nuestra ciudad capital. Más allá del distintivo de los colores en los uniformes, el rendimiento deportivo y la capacidad de demora - gratificación aplazada durante 23 años del equipo que obtuvo el triunfo, es un indicador de los deseos de la población de gozar espectáculos deportivos que generalmente conlleva a la práctica de quienes gustan de él.
De las infracciones a las Reglas de Juego, observamos las “tarjetas amarillas” o amonestaciones, conocidas secuelas de jugadas antideportivas, evidencias que “el deporte es una modalidad de actividad física que tiene como fin la competición” y quienes han experimentado de manera directa en el campo de juego retienen en la memoria esos momentos de adrenalina.
Se reflexiona que si bien, en el deporte la presencia ocasional de conductas inapropiadas es una realidad, también lo es, la afirmación que el deporte y ejercicio físico son de grandes beneficios en las esferas de la vida.
2. Es reconocido que la calidad y esperanza de vida tienen una relación directa con la funcionalidad que aporta el ejercicio físico. Esquematicemos sus particularidades del practicarlo en tiempo y forma.
a) En la promoción de la salud pública y considerando que vamos saliendo de un problema a nivel global personifica un área de oportunidad focalizarlo integralmente desde el bien común.
Imaginemos el potencial personal y comunitario con las pertinentes ENTRADAS (insumos): contexto a favor, comportamiento individual (estilos de vida), objetivos y estrategias; en los PROCESOS: activación física, alimentación y nutrición; en las SALIDAS (resultados): a los “7 puertos de la vida”… Salud (física, mental, social), Valores, Familia, Trabajo, Autodesarrollo, Participación comunitaria y Esparcimiento.
Entonces, apoyemos las buenas prácticas a partir de temprana edad, fomentemos una vida sana que acote adicciones (comportamentales, alcohol, tabaco/nicotina, drogas e incluso unos medicamentos) y permita llegar a un envejecimiento activo y saludable.
b) La prevención de comportamientos antisociales. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible resalta su importancia.
Puntos clave: Las actividades deportivas y físicas son herramientas para la paz; requieren espacios adecuados y seguros; abonan al fomento del empoderamiento, igualdad de género, cohesión e inclusión social; en lo particular a los valores deportivos cimentados en el trabajo en equipo, el juego limpio, el respeto de las reglas, la cooperación, la disciplina y tolerancia; generan aptitudes esenciales para la participación en actividades grupales y de vida profesional.
Hoy domingo 6 de junio 2021, participación comunitaria… asistamos todos a votar.
hazael.ruiz@hotmail.com
