/ viernes 10 de julio de 2020

El futuro de la educación

La educación no se detiene por una pandemia. Al menos que desees estudiar en el extranjero. Muchas universidades en el mundo han suspendido los trámites para aceptar estudiantes de otros países. Por ejemplo, la Oficina de Inmigración y Aduanas de EE. UU. indicó que los alumnos con visas F-1 y M-1 cuyas escuelas operen en formato en línea “deben abandonar el país o tomar otras medidas, como ser transferidos a una escuela con instrucción presencial”. De acuerdo con The WSJ esas universidades recibirán menos estudiantes, especialmente los provenientes de China.

Algunos estudiantes de origen chino están posponiendo sus planes e incluso revalorando si vale, o no, la pena un título norteamericano. El principal problema es que las próximas fechas para tramitar una visa serán en noviembre, y algunas universidades han propuesto clases a través de un sitio web y sesiones presenciales más breves. De acuerdo con el Ministerio de Educación de China, más de 1,6 millones de alumnos de ese país estudian en el extranjero. La oferta educativa más atractiva está en EE. UU., Australia y el Reino Unido. Sin embargo, los conflictos diplomáticos entre China y EE. UU. han generado que Canadá haya aumentado en 13% su demanda en comparación con 2019. Otro problema, es si una escuela imparte clases completamente en línea, los estudiantes con visas en los EE. UU. tendrán que abandonar el país o transferirse a una escuela con clases presenciales.

En algunas universidades de EE. UU., los alumnos extranjeros representan más del 15% de la matrícula. De acuerdo con el Instituto de Educación Internacional, durante el año académico 2018-19, más de 370 mil ciudadanos chinos representaron el 34% de todos los estudiantes extranjeros, matriculados en instituciones de educación superior. Los gastos por parte de los estudiantes de origen chino representan un tercio (15 mil millones) de los 44 mil 700 millones (US$) que generan los estudiantes extranjeros en los EE. UU. —sumando el costo de matrícula, gastos de seguros médicos y libros—. Una encuesta a casi 600 colegios y universidades de EE. UU. afirman que el 88% considera que disminuirán las inscripciones de alumnos internacionales el próximo ciclo escolar. En otras palabras, habrá menos ingresos en las universidades norteamericanas a causa de la pandemia.

Por último, el coronavirus pone fin a una tradición familiar en los EE. UU. que es el ingreso a la educación superior. Los protocolos de seguridad convertirán el ritual emocional, en un conjunto de decisiones en constante cambio. Por ejemplo, después de que su hijo John fue admitido en el Amherst College en diciembre pasado, Michelle Fitzhenry pensó que llevarlo a la ciudad donde estudiaría los próximos años, sería un gran evento familiar. Ella y su esposo, Jim, habían planeado volar con él a Massachusetts desde Portland, Oregón, en el mes de agosto, y pasar un par de días comprando lo esencial del dormitorio y luego ayudarlo a mudarse a su habitación, conocer a los padres de su nuevo compañero de habitación y quedarse para la cena. El plan será entrar y salir lo más rápido posible. Estas y otras historias son los retos del futuro de la educación superior.

Industria de afeitado. Jorge Brake, CEO de Genomma Lab, afirma que durante el primer trimestre de 2020 la compañía reportó en el mundo un incremento en sus ventas netas de 6.3%, para alcanzar 3,334 millones de pesos respecto al mismo periodo de 2019. Se estima que el segmento de skin care para el cuidado masculino valdrá más de 55 mil millones de pesos para 2022. La empresa mexicana buscará democratizar la categoría de las máquinas de afeitar ¡Órale!



Comunicólogo político y académico de la FCPyS UNAM

@gersonmecalco

La educación no se detiene por una pandemia. Al menos que desees estudiar en el extranjero. Muchas universidades en el mundo han suspendido los trámites para aceptar estudiantes de otros países. Por ejemplo, la Oficina de Inmigración y Aduanas de EE. UU. indicó que los alumnos con visas F-1 y M-1 cuyas escuelas operen en formato en línea “deben abandonar el país o tomar otras medidas, como ser transferidos a una escuela con instrucción presencial”. De acuerdo con The WSJ esas universidades recibirán menos estudiantes, especialmente los provenientes de China.

Algunos estudiantes de origen chino están posponiendo sus planes e incluso revalorando si vale, o no, la pena un título norteamericano. El principal problema es que las próximas fechas para tramitar una visa serán en noviembre, y algunas universidades han propuesto clases a través de un sitio web y sesiones presenciales más breves. De acuerdo con el Ministerio de Educación de China, más de 1,6 millones de alumnos de ese país estudian en el extranjero. La oferta educativa más atractiva está en EE. UU., Australia y el Reino Unido. Sin embargo, los conflictos diplomáticos entre China y EE. UU. han generado que Canadá haya aumentado en 13% su demanda en comparación con 2019. Otro problema, es si una escuela imparte clases completamente en línea, los estudiantes con visas en los EE. UU. tendrán que abandonar el país o transferirse a una escuela con clases presenciales.

En algunas universidades de EE. UU., los alumnos extranjeros representan más del 15% de la matrícula. De acuerdo con el Instituto de Educación Internacional, durante el año académico 2018-19, más de 370 mil ciudadanos chinos representaron el 34% de todos los estudiantes extranjeros, matriculados en instituciones de educación superior. Los gastos por parte de los estudiantes de origen chino representan un tercio (15 mil millones) de los 44 mil 700 millones (US$) que generan los estudiantes extranjeros en los EE. UU. —sumando el costo de matrícula, gastos de seguros médicos y libros—. Una encuesta a casi 600 colegios y universidades de EE. UU. afirman que el 88% considera que disminuirán las inscripciones de alumnos internacionales el próximo ciclo escolar. En otras palabras, habrá menos ingresos en las universidades norteamericanas a causa de la pandemia.

Por último, el coronavirus pone fin a una tradición familiar en los EE. UU. que es el ingreso a la educación superior. Los protocolos de seguridad convertirán el ritual emocional, en un conjunto de decisiones en constante cambio. Por ejemplo, después de que su hijo John fue admitido en el Amherst College en diciembre pasado, Michelle Fitzhenry pensó que llevarlo a la ciudad donde estudiaría los próximos años, sería un gran evento familiar. Ella y su esposo, Jim, habían planeado volar con él a Massachusetts desde Portland, Oregón, en el mes de agosto, y pasar un par de días comprando lo esencial del dormitorio y luego ayudarlo a mudarse a su habitación, conocer a los padres de su nuevo compañero de habitación y quedarse para la cena. El plan será entrar y salir lo más rápido posible. Estas y otras historias son los retos del futuro de la educación superior.

Industria de afeitado. Jorge Brake, CEO de Genomma Lab, afirma que durante el primer trimestre de 2020 la compañía reportó en el mundo un incremento en sus ventas netas de 6.3%, para alcanzar 3,334 millones de pesos respecto al mismo periodo de 2019. Se estima que el segmento de skin care para el cuidado masculino valdrá más de 55 mil millones de pesos para 2022. La empresa mexicana buscará democratizar la categoría de las máquinas de afeitar ¡Órale!



Comunicólogo político y académico de la FCPyS UNAM

@gersonmecalco