/ jueves 18 de enero de 2018

El mundo de la realeza

INTERESES PRIVADOS DE LAS MONARQUÍAS

No solamente sirven sus escándalos para deleitarnos, sino que ellos se deleitan con sus riquezas que salen de los impuestos que pagan los ciudadanos. Los monarcas y sus familias viven de esos impuestos que utilizan para invertir a título privado en grandes empresas cuyos empleados no son bien remunerados, y para decir algo a favor de la realeza, los empleados de ellos a pesar de que firman suculentos contratos, a veces los traicionan.

¿Cómo? al publicar sus anécdotas de la realeza con o sin ellos. Se puede decir que violan ese acuerdo, el contrato para ganar mucho más dinero.

Pero regresando al tema, tienen ellos muchas propiedades y dinero que no cualquiera puede imaginar. Yates, castillos, palacios, tierras, inversiones en empresas petroleras, joyas, aviones privados, propiedades en el extranjero y eso que  uno sueña con viajar y no se puede.

Ellos viven en “el cielo” muy por arriba de nuestro nivel económico y social. Pueden controlar la prensa, la moda, las críticas, censurar lo que no les gusta.

Por eso se dice el lema “vivir como rey” porque a las personas de condición económica pudiente se les aplica este lema. Y a pesar de esa riqueza hay príncipes y princesas que se han suicidado, como ya les he comentado. Bien, tienen trabajo que hacer, y espero que no se dejen llevar solamente por la ambición, sino como dice el lema g del príncipe Carlos “ich dien” que significa “yo sirvo”.

La realeza tiene un trabajo, como ya anteriormente les he explicado, y este consiste en tener fundaciones de diversos temas que van desde la arquitectura, el diseño, la pintura, la poesía, ciertas enfermedades como el sida y la diabetes, deportes, combatir la pobreza, por supuesto, la educación, los jóvenes, por cierto, se interesan en que estos estudien y consigan trabajo.

Carlos de Gales, por ejemplo, está interesado en producir comida inorgánica, en que la gente tenga valores morales, pues se cree que estos ya se perdieron, y Haakon de Noruega también, junto con Mette Marit, su esposa, están preocupados por la dignidad de los jóvenes y adultos, por los derechos humanos, se les critica de hecho, por ser “príncipes radicales” cuando deben de estar apartados de toda política.

También se pueden interesar en ecología, en asuntos militares, el cambio climático, la globalización, la economía, la salud, están enterados de todo lo que ocurre en el mundo gracias a sus asesores quienes les dan la orientación adecuada para que ellos expresen sus ideas a través de sus discursos.

El mundo de la realeza tiene una justificación de clase histórica: son dinastías que han sobrevivido al paso del tiempo gracias a sus pueblos y tradiciones. Pueblo y monarquía, monarquía y pueblo, esa combinación es justamente lo que lleva a un país a tener turismo, y este genera dinero y el placer de la gente de poder estar en un país rico en leyendas y anécdotas y así, de generación en generación, tanto esa anécdotas familiares e históricas se complementan y se heredan a gente que puede divulgarlas, ya sea ahora por internet, por correo o por los medios masivos de comunicación.

La realeza también se puede justificar como la parte histórica de una gran familia que se ha compuesto por siglos hasta los años 60, cuando algunos reyes se casaron “por amor” con plebeyas que ahora, están sentadas en los tronos reales al lado de sus maridos.

A los herederos de  los diversos tronos europeos les llegará su hora. Pero, antes, deben viajar, estudiar, informarse, conocer gente, conocer los problemas actuales de una sociedad avanzada tanto en ciencia como en tecnología, sin dejar de disfrutar sus pasatiempos.

Es importante destacar la labor de Isabel II, quien, durante 66 años, ha logrado conservar el trono real pese a ciertas crisis que han tenido lugar en diversos años gracias a escándalos familiares, financieros, y ella creo lo que le llamo “el estilo isabelino” a su reinado.

Juan Carlos de Borbón y familia no son queridos por su pueblo aparte de los escándalos familiares desde décadas y siglos atrás, ahora son juzgados por los republicanos con dureza y por ex cortesanos por ser simplemente “pillos” como es el caso de Cristina de Borbón y de su esposo, Iñaki Urdangarín, involucrados en un supuesto caso de corrupción y su tía, Pilar de Borbón, estaba envuelta en otro caso de corrupción, aunque ella lo negó.

España es un país que me agrada, y yo admiraba a “Juanito” el rey emérito hasta que este defraudó a todos con sus indiscreciones y con el hecho de que se dieron a conocer que él tiene amigas y de diversas reputaciones.

España grita: “REPUBLICA YA” Y yo les comento que, aparte de que es una familia disfuncional, no sé ni yo misma como debo justificar la existencia del trono español. En otros lugares la cos es similar, como en el reino africano de Swazilandia, o en el nuevo reino de Rama X, mejor conocido como Maha Vajilarognkorn, de Tailandia. Sesenta años esperando el trono, tres matrimonios y el monarca es demasiado liberal en sus costumbres privadas y es un monarca que tiene autoridad militar. Muchos hubieran preferido que su hermana fuera la sucesora del fallecido rey Bhumibol, Rama IX.

En un país donde ha tenido rebeldía militar hacia el gobierno, más no así hacia el anterior rey, ahora veremos como Maha, como monarca, actual y que tan largo será su reinado. Su padre estuvo en su trono 70 años.

Mónaco ya tiene su “pequeña” familia real. Alberto II, ya tiene heredero varón legítimo y, si no se considera feliz en su matrimonio, se ve que se lleva más o menos bien con su esposa, Y de hecho, aumentará su familia, ya que Pierre y su esposa, sobrinos del soberano, serán padres por segunda vez, haciendo de la princesa Carolina otra vez abuela. Estefanía tiene tres hijos: dos hijas y un varón, a los cuales les gusta el circo, sobre todo a Paulina, la menor, ha debutado ahí sobre un elefante hace unos años.

Los reyes de Bélgica, Felipe y Matilde, son populares pese a los escándalos de Laurent, hermano del soberano. Ella es la primera belga que se sienta en el trono real y tiene ascendencia aristocrática. Su suegra, la reina Paola, princesa italiana de nacimiento, ha estado enferma. Y tanto ella como Alberto II, el rey emérito, lograron superar su crisis matrimonial que tuvieron en los años 60. Alberto, mujeriego, y a ella, quien se cree que también fue infiel, ahora disfrutan su vejez no sin dejar de apoyar a su hijo, el rey.

Alberto II de Bélgica de joven, era aficionado a las motos, asi como Harald de Noruega es aficionado a la vela y su esposa, Sonia, le gusta pintar y caminar por las bonitas, largas y peligrosos caminos de las montañas noruegas. Y por supuesto, el esquí, que para todo noruego es indispensable aprender desde casi bebés.

A la realeza se les ve en bicicleta, en carreras, caminando, bailando, esquiando también en agua y nieve, surfeando, leyendo a pequeños niños, viajando con su familia, desde la India o hasta México de vacaciones.

El polo, la equitación, la cacería, nadar, el futbol, etc también forman parte de sus intereses. Visitar hospitales, si es posible de incógnito, las carreras de caballos que tanto le gustan a la soberana inglesa como a su familia, incluso hacer barbacoas familiares e incluso hacer y dar entrevistas para televisión y permitir entrevistas exclusivas y en el caso de los monarcas, permitir que sus declaraciones intimas o muy familiares sean publicadas gracias a otras personas cercanas a ellos, como pueden ser sus mejores amigos. ¿Ustedes, queridos lectores míos, que les parece?

INTERESES PRIVADOS DE LAS MONARQUÍAS

No solamente sirven sus escándalos para deleitarnos, sino que ellos se deleitan con sus riquezas que salen de los impuestos que pagan los ciudadanos. Los monarcas y sus familias viven de esos impuestos que utilizan para invertir a título privado en grandes empresas cuyos empleados no son bien remunerados, y para decir algo a favor de la realeza, los empleados de ellos a pesar de que firman suculentos contratos, a veces los traicionan.

¿Cómo? al publicar sus anécdotas de la realeza con o sin ellos. Se puede decir que violan ese acuerdo, el contrato para ganar mucho más dinero.

Pero regresando al tema, tienen ellos muchas propiedades y dinero que no cualquiera puede imaginar. Yates, castillos, palacios, tierras, inversiones en empresas petroleras, joyas, aviones privados, propiedades en el extranjero y eso que  uno sueña con viajar y no se puede.

Ellos viven en “el cielo” muy por arriba de nuestro nivel económico y social. Pueden controlar la prensa, la moda, las críticas, censurar lo que no les gusta.

Por eso se dice el lema “vivir como rey” porque a las personas de condición económica pudiente se les aplica este lema. Y a pesar de esa riqueza hay príncipes y princesas que se han suicidado, como ya les he comentado. Bien, tienen trabajo que hacer, y espero que no se dejen llevar solamente por la ambición, sino como dice el lema g del príncipe Carlos “ich dien” que significa “yo sirvo”.

La realeza tiene un trabajo, como ya anteriormente les he explicado, y este consiste en tener fundaciones de diversos temas que van desde la arquitectura, el diseño, la pintura, la poesía, ciertas enfermedades como el sida y la diabetes, deportes, combatir la pobreza, por supuesto, la educación, los jóvenes, por cierto, se interesan en que estos estudien y consigan trabajo.

Carlos de Gales, por ejemplo, está interesado en producir comida inorgánica, en que la gente tenga valores morales, pues se cree que estos ya se perdieron, y Haakon de Noruega también, junto con Mette Marit, su esposa, están preocupados por la dignidad de los jóvenes y adultos, por los derechos humanos, se les critica de hecho, por ser “príncipes radicales” cuando deben de estar apartados de toda política.

También se pueden interesar en ecología, en asuntos militares, el cambio climático, la globalización, la economía, la salud, están enterados de todo lo que ocurre en el mundo gracias a sus asesores quienes les dan la orientación adecuada para que ellos expresen sus ideas a través de sus discursos.

El mundo de la realeza tiene una justificación de clase histórica: son dinastías que han sobrevivido al paso del tiempo gracias a sus pueblos y tradiciones. Pueblo y monarquía, monarquía y pueblo, esa combinación es justamente lo que lleva a un país a tener turismo, y este genera dinero y el placer de la gente de poder estar en un país rico en leyendas y anécdotas y así, de generación en generación, tanto esa anécdotas familiares e históricas se complementan y se heredan a gente que puede divulgarlas, ya sea ahora por internet, por correo o por los medios masivos de comunicación.

La realeza también se puede justificar como la parte histórica de una gran familia que se ha compuesto por siglos hasta los años 60, cuando algunos reyes se casaron “por amor” con plebeyas que ahora, están sentadas en los tronos reales al lado de sus maridos.

A los herederos de  los diversos tronos europeos les llegará su hora. Pero, antes, deben viajar, estudiar, informarse, conocer gente, conocer los problemas actuales de una sociedad avanzada tanto en ciencia como en tecnología, sin dejar de disfrutar sus pasatiempos.

Es importante destacar la labor de Isabel II, quien, durante 66 años, ha logrado conservar el trono real pese a ciertas crisis que han tenido lugar en diversos años gracias a escándalos familiares, financieros, y ella creo lo que le llamo “el estilo isabelino” a su reinado.

Juan Carlos de Borbón y familia no son queridos por su pueblo aparte de los escándalos familiares desde décadas y siglos atrás, ahora son juzgados por los republicanos con dureza y por ex cortesanos por ser simplemente “pillos” como es el caso de Cristina de Borbón y de su esposo, Iñaki Urdangarín, involucrados en un supuesto caso de corrupción y su tía, Pilar de Borbón, estaba envuelta en otro caso de corrupción, aunque ella lo negó.

España es un país que me agrada, y yo admiraba a “Juanito” el rey emérito hasta que este defraudó a todos con sus indiscreciones y con el hecho de que se dieron a conocer que él tiene amigas y de diversas reputaciones.

España grita: “REPUBLICA YA” Y yo les comento que, aparte de que es una familia disfuncional, no sé ni yo misma como debo justificar la existencia del trono español. En otros lugares la cos es similar, como en el reino africano de Swazilandia, o en el nuevo reino de Rama X, mejor conocido como Maha Vajilarognkorn, de Tailandia. Sesenta años esperando el trono, tres matrimonios y el monarca es demasiado liberal en sus costumbres privadas y es un monarca que tiene autoridad militar. Muchos hubieran preferido que su hermana fuera la sucesora del fallecido rey Bhumibol, Rama IX.

En un país donde ha tenido rebeldía militar hacia el gobierno, más no así hacia el anterior rey, ahora veremos como Maha, como monarca, actual y que tan largo será su reinado. Su padre estuvo en su trono 70 años.

Mónaco ya tiene su “pequeña” familia real. Alberto II, ya tiene heredero varón legítimo y, si no se considera feliz en su matrimonio, se ve que se lleva más o menos bien con su esposa, Y de hecho, aumentará su familia, ya que Pierre y su esposa, sobrinos del soberano, serán padres por segunda vez, haciendo de la princesa Carolina otra vez abuela. Estefanía tiene tres hijos: dos hijas y un varón, a los cuales les gusta el circo, sobre todo a Paulina, la menor, ha debutado ahí sobre un elefante hace unos años.

Los reyes de Bélgica, Felipe y Matilde, son populares pese a los escándalos de Laurent, hermano del soberano. Ella es la primera belga que se sienta en el trono real y tiene ascendencia aristocrática. Su suegra, la reina Paola, princesa italiana de nacimiento, ha estado enferma. Y tanto ella como Alberto II, el rey emérito, lograron superar su crisis matrimonial que tuvieron en los años 60. Alberto, mujeriego, y a ella, quien se cree que también fue infiel, ahora disfrutan su vejez no sin dejar de apoyar a su hijo, el rey.

Alberto II de Bélgica de joven, era aficionado a las motos, asi como Harald de Noruega es aficionado a la vela y su esposa, Sonia, le gusta pintar y caminar por las bonitas, largas y peligrosos caminos de las montañas noruegas. Y por supuesto, el esquí, que para todo noruego es indispensable aprender desde casi bebés.

A la realeza se les ve en bicicleta, en carreras, caminando, bailando, esquiando también en agua y nieve, surfeando, leyendo a pequeños niños, viajando con su familia, desde la India o hasta México de vacaciones.

El polo, la equitación, la cacería, nadar, el futbol, etc también forman parte de sus intereses. Visitar hospitales, si es posible de incógnito, las carreras de caballos que tanto le gustan a la soberana inglesa como a su familia, incluso hacer barbacoas familiares e incluso hacer y dar entrevistas para televisión y permitir entrevistas exclusivas y en el caso de los monarcas, permitir que sus declaraciones intimas o muy familiares sean publicadas gracias a otras personas cercanas a ellos, como pueden ser sus mejores amigos. ¿Ustedes, queridos lectores míos, que les parece?