/ viernes 14 de diciembre de 2018

El mundo de la realeza | La crisis monárquica en España

Felipe VI asistió, con abucheos de la gente, una multitud, quién pide la abolición de la monarquía, a la toma de posesión del presidente López Obrador este pasado 1 de diciembre.

Yo recuerdo que cuando vi por primera vez en la prensa a Felipe, él tenía 16 años y estudiaba en Lakefield, Canadá. Yo era más joven. Lo recuerdo jurando la bandera, haciendo el servicio militar, con sus novias, cuando juró la constitución al cumplir la mayoría de edad, cuando se matriculó y se graduó de la Universidad, él era conocido como el El preparao hasta que se casó.

Desde que se descubrieron las supuestas amigas de Juan Carlos, si señores, sin el Don, la intervención de la emérita en el club Bilderberg, el pasado de Letizia, desde que Iñaki Urdangarin aprendiera a ser corrupto y por esto está en la cárcel, los escándalos de los nietos de los eméritos, Las infantas una divorciada y otra supuestamente también corrupta como su marido… Y los miles de torturados españoles por acoso electrónico y organizado, donde se ve implicada hasta la policía. Precisamente una organización contra la tortura llamada Viatec le escribió al rey y este, que ha de saber cómo todo jefe de estado, de estas torturas y suicidios por culpa de las agencias de seguridad y de quienes correspondan, se hizo de la vista gorda, pues no respondió. Muchas víctimas esperan una respuesta y una actuación de parte de “el rey de todos los españoles” quien, por cierto, hace poco se aumentó el salario junto con su familia.

Si los reyes están disgustados en privado, también es un asunto de Estado. En las monarquías no hay amor. Si Felipe vino a la toma de posesión del presidente López Obrador es cuestión de intereses personales y de negocios aquí en nuestro país. Y para colmo, La examante del rey Juan Carlos lo acusó de tener cuentas en Suiza y utilizarla de testaferro.

Según el periódico La República: “Los partidos republicados de Espeña han solicitado que se investigue al rey Juan Carlos por posibles actos de corrupción, esto tras algunas revelaciones que realizó su examante, la empresaria alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein. Ésta lo acusó de utilizarla como testaferro para ocultar su patrimonio en cuentas de Suiza. Estas declaraciones fueron grabadas por el excomisario José Manuel Villarejo, quien se encuentra en prisión preventiva por el presunto delito de organización criminal".

La familia real española es extremadamente impopular con la gente, lo que se debe principalmente a los muchos escándalos de los últimos años. Los jóvenes socialistas piden un referéndum sobre la abolición de la monarquía. Sin embargo, una enmienda constitucional requeriría una mayoría de tres cuartos en ambas cámaras; es poco probable que llegue a ellos.

Felipe VI asistió, con abucheos de la gente, una multitud, quién pide la abolición de la monarquía, a la toma de posesión del presidente López Obrador este pasado 1 de diciembre.

Yo recuerdo que cuando vi por primera vez en la prensa a Felipe, él tenía 16 años y estudiaba en Lakefield, Canadá. Yo era más joven. Lo recuerdo jurando la bandera, haciendo el servicio militar, con sus novias, cuando juró la constitución al cumplir la mayoría de edad, cuando se matriculó y se graduó de la Universidad, él era conocido como el El preparao hasta que se casó.

Desde que se descubrieron las supuestas amigas de Juan Carlos, si señores, sin el Don, la intervención de la emérita en el club Bilderberg, el pasado de Letizia, desde que Iñaki Urdangarin aprendiera a ser corrupto y por esto está en la cárcel, los escándalos de los nietos de los eméritos, Las infantas una divorciada y otra supuestamente también corrupta como su marido… Y los miles de torturados españoles por acoso electrónico y organizado, donde se ve implicada hasta la policía. Precisamente una organización contra la tortura llamada Viatec le escribió al rey y este, que ha de saber cómo todo jefe de estado, de estas torturas y suicidios por culpa de las agencias de seguridad y de quienes correspondan, se hizo de la vista gorda, pues no respondió. Muchas víctimas esperan una respuesta y una actuación de parte de “el rey de todos los españoles” quien, por cierto, hace poco se aumentó el salario junto con su familia.

Si los reyes están disgustados en privado, también es un asunto de Estado. En las monarquías no hay amor. Si Felipe vino a la toma de posesión del presidente López Obrador es cuestión de intereses personales y de negocios aquí en nuestro país. Y para colmo, La examante del rey Juan Carlos lo acusó de tener cuentas en Suiza y utilizarla de testaferro.

Según el periódico La República: “Los partidos republicados de Espeña han solicitado que se investigue al rey Juan Carlos por posibles actos de corrupción, esto tras algunas revelaciones que realizó su examante, la empresaria alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein. Ésta lo acusó de utilizarla como testaferro para ocultar su patrimonio en cuentas de Suiza. Estas declaraciones fueron grabadas por el excomisario José Manuel Villarejo, quien se encuentra en prisión preventiva por el presunto delito de organización criminal".

La familia real española es extremadamente impopular con la gente, lo que se debe principalmente a los muchos escándalos de los últimos años. Los jóvenes socialistas piden un referéndum sobre la abolición de la monarquía. Sin embargo, una enmienda constitucional requeriría una mayoría de tres cuartos en ambas cámaras; es poco probable que llegue a ellos.