La política mexicana como el dios Jano mira al futuro y al pasado, dos rostros con horizontes distintos; mientras se unge a José Antonio Meade como nuevo enviado de los dioses, en el Senado languidece en comparecencia de la glosa del V Informe el responsable de la política interior, Miguel Ángel Osorio Chong. El “águila o sol”, las dos caras de la misma moneda mexicana ha concluido.
Con relación al formato de Glosa es anquilosado, los parlamentos modernos se sustentan en el sistema de “pregunta parlamentaria”, -no se ha difundido lo suficiente-, y en cuanto al evento fue tan señero de los mandamás tricolores como un “cortejo de funeral”, en el Senado, encabezado por Emilio Gamboa y aún por el presidente de los diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín. Los cuestionamientos de la oposición, PT-Morena, PRD e independientes Alejandro Encinas y Manuel Cárdenas quienes dieron los resultados contundentes del incremento en los índices de violencia e inseguridad. La contrarréplica fue inédita por parte del presidente de la Comisión de Seguridad Pública, Ernesto Gándara al compartir la responsabilidad entre Poderes de la unión y órdenes de gobierno por lo que “nos estamos generando”, fue así que de un plumazo evaporo la república y la división de poderes, ¡ver para creer!
Mientras el Congreso se encuentra atrapado por minucias del pasado, en el Palacio nacional se dirime la figura del nuevo primogénito del poder. Con el “prematuro lanzamiento” de José Antonio Meade como presunto candidato oficial a la Presidencia de la República, el sistema político mexicano llega a su cenit donde el presidente Enrique Peña Nieto elige a su candidato, pero no a su sucesor, como ocurría en el viejo “tricolor”.
Tampoco ha sido el Partido Revolucionario Institucional quien por medio de uno de sus sectores llevara a la convencionalidad de “destapar” al nominado aspirante; fue un miembro del Gabinete, Luis Videgaray, Secretario de Relaciones, quien vía twitter se autoréplica, “no se confundan presente a tres Secretarios con calidez, gratitud, reconocimiento trayectoria”.
La impronta de su “destape” exaltó el virtuosismo del “nuevo sol”, con Meade, “México tiene estabilidad económica, es uno de los mexicanos más talentosos” y en cuanto a su carrera administrativa discurso al establecer una analogía con Plutarco Elías Calles.
El constructor de las instituciones de México, vale advertir, en su función de estadista fue la construcción de un Estado nacional que emergía, en la actualidad se trata de un Estado inserto en la globalidad o sea una infra nación cuyos problemas se derivan y atienden de conformidad con los mercados, donde la nación o se reestructura o se sumerge.
Eh ahí el desiderátum que enfrenta el gobierno se ha de preparar para que país. “Es la nación, estúpido”, diría el viejo Clinton.
¿UN INE CONDICIONADO?, el diseño de esta propuesta se perfila en la presentación de las plataformas electorales, por una parte, y por otra el “Debate de candidatos”, ambos eventos dependen del Instituto Nacional Electoral. Aunque ninguno de los dos se traduce en garantía de políticas públicas del gobierno que emerge de la elección.
Los debates destacaran “los contrastes” y aumentan a tres por disposición de la autoridad electoral, donde se condiciona al comportamiento de las “audiencias” no de los “electores”, incluso de la programación de los corporativos de la televisión, los intereses dominantes del “futbol”, se adecuan fechas y horarios, para transmitir imágenes con “bajo contenido” , porque importa el show debate, no interesa el discurso formulado en un compromiso ante la nación. ¿De veras cree el INE que aumentar debates le incrementa su nivel de aceptación y certeza?
Las plataformas electorales son una simple lista de “buenas intenciones. Hoy importa más la voracidad de quienes buscan apoderarse del gobierno para fines personales. no hay proyecto de nación alterno al del PRI porque los populismos de derecha y de izquierda en alianza escatológica reducen su oferta electoral a darle una beca a todos mexicanos.
