/ viernes 22 de junio de 2018

El observador parlamentario | El odio de “lesa humanidad”

La tensión fue máxima en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el debate de la sesión fue apasionado al condenar las jaulas de niños que son separados de sus padres carentes de documentación migratoria por los guardias de la frontera.

Desde la Presidencia de la Comisión Permanente, el senador Ernesto Cordero Arroyo, preciso que “el pueblo estadounidense quedará muy preocupado” cuando llegue el día que México deje de colaborar con Estados Unidos contra el terrorismo, delincuencia organizada y migración, "el pueblo estadounidense quedará muy preocupado"

La barbarie de esas medidas anti migratoria por “cruel e inhumana” es un modo de extermino de la humanidad.

La recomendación del Congreso se envió al Ejecutivo, a los 32 gobiernos de la Federación, así como a los órganos gubernamentales internacionales, las asociaciones parlamentarias internacionales y continentales, y al Consejo de Europa. Se acordó también la formación de un grupo plural de legisladores para entrevistarse con sus homólogos en el Capitolio de Washington.

La acción parlamentaria recibirá sin duda, una adhesión múltiple por las consecuencias que reviste, la opinión mundial se muestra consternada por el profundo odio que la promueve, se recuerda de inmediato a las escenas de los campos de concentración nazi durante el exterminio genocida de la Segunda Guerra Mundial, así también a las políticas de segregación racial del apartheid, como actos de odio de lesa humanidad

El Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dijo en su tuit que “los mexicanos no hacen nada por nosotros” al criticar las leyes migratorias nacionales

El mandatario estadounidense trato de justificar lo injustificable descargando la responsabilidad de la sobrecarga de migración centroamericana como si el país fuera el causante. Cuando es un problema universal y multifactorial, comenzando porqué debe compartirse su responsabilidad.

La decisión del órgano del Congreso de la Unión pone a salvo el decoro de la identidad nacional, se ha respondido a una agresión externa dentro de los lìmites de la diplomacia, solo que la cooperación involucra también atender con recursos propios el problema del tráfico de las drogas. A su vez es un asunto como el migratorio no es posible resolverlo unilateralmente, en especial porque la fuente de origen y financiamiento son los consumidores norteamericanos, se trata pues de un círculo doblemente vicioso.

El pueblo de los Estados Unidos se van a preocupar como nosotros también.

Bicentenario delNigromante, se cumple este 22 de junio los doscientos años del natalicio de Ignacio Ramírez, quien nació en San Miguel el Grande, Guanajuato. Fue uno de los notables pensadores liberales mexicanos, y un destacado legislador del Congreso constituyente de 1856.

La transcendencia histórica de Ramírez lo ubica como el más importante pensador, escritor, de su generación, que fue la de la Reforma, quien ingresara con solo 24 años de edad a la Academia de Letrán, cuya presidencia la ejercía el insurgente Andrés Quintana Roo, para sustentar su tesis de “No hay Dios”. Un tema que estremeció en una nación que aún no agotaba la separación entre Estado e iglesia.

El diputado Ignacio Ramírez fue un político puro, es decir un liberal radical, Emilio Rabasa lo critica, mientras Daniel Cosio Villegas lo ubica en la primera fila de participantes del debate en el Constituyente de 1856, junto con León Guzmán, y Zarco “al grado de que no hubo debate mayor o menor en que no echara su cuarto de espadas”.

Sus aportaciones legislativas son diversas, en especial la educativa al propiciar la escuela Lancasteriana, asimismo dentro del esa política social concedió gran importancia al libro como instrumento de la educación, suele entonces ubicársele como precursor de la Textos escolares que los niños mexicanos reciben para aprender.

Axiología parlamentaria, de tal modo mientras en la frontera del sur de Estados Unidos se enjaula a los niños, Ignacio Ramírez los libera del mundo ciego de la discriminación e ignorancia.

La tensión fue máxima en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el debate de la sesión fue apasionado al condenar las jaulas de niños que son separados de sus padres carentes de documentación migratoria por los guardias de la frontera.

Desde la Presidencia de la Comisión Permanente, el senador Ernesto Cordero Arroyo, preciso que “el pueblo estadounidense quedará muy preocupado” cuando llegue el día que México deje de colaborar con Estados Unidos contra el terrorismo, delincuencia organizada y migración, "el pueblo estadounidense quedará muy preocupado"

La barbarie de esas medidas anti migratoria por “cruel e inhumana” es un modo de extermino de la humanidad.

La recomendación del Congreso se envió al Ejecutivo, a los 32 gobiernos de la Federación, así como a los órganos gubernamentales internacionales, las asociaciones parlamentarias internacionales y continentales, y al Consejo de Europa. Se acordó también la formación de un grupo plural de legisladores para entrevistarse con sus homólogos en el Capitolio de Washington.

La acción parlamentaria recibirá sin duda, una adhesión múltiple por las consecuencias que reviste, la opinión mundial se muestra consternada por el profundo odio que la promueve, se recuerda de inmediato a las escenas de los campos de concentración nazi durante el exterminio genocida de la Segunda Guerra Mundial, así también a las políticas de segregación racial del apartheid, como actos de odio de lesa humanidad

El Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dijo en su tuit que “los mexicanos no hacen nada por nosotros” al criticar las leyes migratorias nacionales

El mandatario estadounidense trato de justificar lo injustificable descargando la responsabilidad de la sobrecarga de migración centroamericana como si el país fuera el causante. Cuando es un problema universal y multifactorial, comenzando porqué debe compartirse su responsabilidad.

La decisión del órgano del Congreso de la Unión pone a salvo el decoro de la identidad nacional, se ha respondido a una agresión externa dentro de los lìmites de la diplomacia, solo que la cooperación involucra también atender con recursos propios el problema del tráfico de las drogas. A su vez es un asunto como el migratorio no es posible resolverlo unilateralmente, en especial porque la fuente de origen y financiamiento son los consumidores norteamericanos, se trata pues de un círculo doblemente vicioso.

El pueblo de los Estados Unidos se van a preocupar como nosotros también.

Bicentenario delNigromante, se cumple este 22 de junio los doscientos años del natalicio de Ignacio Ramírez, quien nació en San Miguel el Grande, Guanajuato. Fue uno de los notables pensadores liberales mexicanos, y un destacado legislador del Congreso constituyente de 1856.

La transcendencia histórica de Ramírez lo ubica como el más importante pensador, escritor, de su generación, que fue la de la Reforma, quien ingresara con solo 24 años de edad a la Academia de Letrán, cuya presidencia la ejercía el insurgente Andrés Quintana Roo, para sustentar su tesis de “No hay Dios”. Un tema que estremeció en una nación que aún no agotaba la separación entre Estado e iglesia.

El diputado Ignacio Ramírez fue un político puro, es decir un liberal radical, Emilio Rabasa lo critica, mientras Daniel Cosio Villegas lo ubica en la primera fila de participantes del debate en el Constituyente de 1856, junto con León Guzmán, y Zarco “al grado de que no hubo debate mayor o menor en que no echara su cuarto de espadas”.

Sus aportaciones legislativas son diversas, en especial la educativa al propiciar la escuela Lancasteriana, asimismo dentro del esa política social concedió gran importancia al libro como instrumento de la educación, suele entonces ubicársele como precursor de la Textos escolares que los niños mexicanos reciben para aprender.

Axiología parlamentaria, de tal modo mientras en la frontera del sur de Estados Unidos se enjaula a los niños, Ignacio Ramírez los libera del mundo ciego de la discriminación e ignorancia.