/ jueves 19 de septiembre de 2019

El oro negro en turbulencia mundial

Después de que el pasado sábado se diera el ataque estratégico con drones guiados a la mayor empresa productora de petróleo en Arabia Saudita (AS), la gran incertidumbre y especulación sobre el oro negro, no se han hecho esperar.

Veo esta situación con dos grandes aristas: i) una geopolítica y ii) otra geoeconómica. Para la primera, es importante entender que, aunque el grupo de los hutíes en Yemén se atribuyó el acontecimiento, dicho grupo está respaldado por el Estado Islámico de Irán. Geográficamente Yemén está situado al sur de AS y la dirección de los drones provenía del noreste. Recordemos que los últimos dos años han estado caracterizados por la gran tensión bilateral Estados Unidos (EU)-Irán porque el mandatario estadounidense decidió romper con el pacto nuclear que se había firmado desde el año 2015 a cambio del levantamiento de las sanciones económicas. Sin embargo, al salirse del acuerdo, las sanciones hacia Irán volvieron y la tensión aumentó más aún ya que el presidente irání dijo -desde hace un año- que EU se arrepentiría por haberlo hecho. Por lo que, aunque este lamentable acontecimiento sucedió en AS, se pudiera interpretar que estaba dirigido realmente hacia EU porque el país importa petróleo para poder cubrir su consumo anual. En este año se calcula que producirá 18.57 millones de barriles por día, pero su demanda estará en un estimado de los 21.10 millones de barriles diarios. Así que el ataque de los drones fue el resultado de un movimiento estratégico para darle al eje neurálgico del gran aliado y socio de EU.

Para la segunda arista, la geoeconómica, debemos considerar que AS es el mayor exportador de petróleo dentro de los 14 países miembros de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) con sede en Viena. Este organismo fue creado en septiembre de 1960. Recordemos que la Guerra Fría estaba en pleno apogeo cuando un grupo de 5 países (Irán, Irak, Kuwait, Arabia Saudita y Venezuela) decidieron crear la Conferencia de Baghdad para: i) coordinar las políticas petroleras y ii) controlar los precios internacionales del petróleo. Con el tiempo se fueron sumando más países y otros se salieron por lo que a la fecha los actuales miembros son: Angola, AS, Argelia, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Gabón, Irak, Irán, Guinea Ecuatorial, Kuwait, Libia, Nigeria y Venezuela. Se puede apreciar que este bloque de países productores y exportadores del oro negro concentra 759 millones de habitantes y más de 3’605,913 millones de euros del PIB anual a nivel mundial. Dentro de este grupo, el que más reservas cuenta es Venezuela, seguido por AS, Irán Irak y Kuwait. Sin embargo, el que más producción de crudo tuvo en el mes de julio pasado fue AS seguido por: Irak, EAU, Kuwait e Irán. Por lo que fácilmente identificamos el poder económico y político que pudieran tener no sólo en la región sino a nivel global.

Como consecuencia de este atentado petrolero, AS se ha visto en la necesidad de reducir a la mitad su producción de petróleo, pero aún no declara hasta cuándo se estabilizará. Por lo que mientras esto vuelve a su normalidad, vemos dos efectos de impacto inmediato: a) los precios del barril se han disparado en los mercados internacionales llegando a niveles hasta casi de 72 dólares por barril del tipo Brent y la compra de futuros del petróleo se ubicó alrededor de los 65 dólares por barril, y b) los mercados bursátiles también se vieron afectados ya que las acciones de varias aerolíneas asiáticas bajaron debido al gran consumo del keroseno que requieren para que sus aviones funcionen. Esto por mencionar sólo algunos derivados del petróleo, pero recordemos que también el precio de otros productos podría incrementarse como: gasolina, diésel, fuelóleo, bencina, gases, plásticos, telas, asfalto, cauchos, jabones, lubricantes, entre otros.

Para América Latina pudiera ser interesante ver cómo reaccionará Venezuela. Pudiera utilizar al petróleo como moneda de cambio ante EU. Para México, por un lado, es bueno que tenga más ingresos con la mezcla mexicana a través de PEMEX, pero, por otro lado, el precio de dólar estará más volátil, así como la bolsa de valores. Por lo que no debemos anticiparnos a tomar decisiones precipitadamente. Es muy factible que a corto plazo esto se estabilice y el precio se ajuste. Pero la tensión política-nuclear entre EU-Irán no cesará. Es decir, el tema geoeconómico llegará a un balance, pero el geopolítico prevalecerá.

Para más detalle, los invito a escuchar la entrevista que di en “Historias de NegoCEOS” en la siguiente liga: https://www.facebook.com/SaludTVlatino/videos/242195103327734/


Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales Universidad Iberoamericana

aribel.contreras@ibero.mx

Twitter: @Aribel007

Después de que el pasado sábado se diera el ataque estratégico con drones guiados a la mayor empresa productora de petróleo en Arabia Saudita (AS), la gran incertidumbre y especulación sobre el oro negro, no se han hecho esperar.

Veo esta situación con dos grandes aristas: i) una geopolítica y ii) otra geoeconómica. Para la primera, es importante entender que, aunque el grupo de los hutíes en Yemén se atribuyó el acontecimiento, dicho grupo está respaldado por el Estado Islámico de Irán. Geográficamente Yemén está situado al sur de AS y la dirección de los drones provenía del noreste. Recordemos que los últimos dos años han estado caracterizados por la gran tensión bilateral Estados Unidos (EU)-Irán porque el mandatario estadounidense decidió romper con el pacto nuclear que se había firmado desde el año 2015 a cambio del levantamiento de las sanciones económicas. Sin embargo, al salirse del acuerdo, las sanciones hacia Irán volvieron y la tensión aumentó más aún ya que el presidente irání dijo -desde hace un año- que EU se arrepentiría por haberlo hecho. Por lo que, aunque este lamentable acontecimiento sucedió en AS, se pudiera interpretar que estaba dirigido realmente hacia EU porque el país importa petróleo para poder cubrir su consumo anual. En este año se calcula que producirá 18.57 millones de barriles por día, pero su demanda estará en un estimado de los 21.10 millones de barriles diarios. Así que el ataque de los drones fue el resultado de un movimiento estratégico para darle al eje neurálgico del gran aliado y socio de EU.

Para la segunda arista, la geoeconómica, debemos considerar que AS es el mayor exportador de petróleo dentro de los 14 países miembros de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) con sede en Viena. Este organismo fue creado en septiembre de 1960. Recordemos que la Guerra Fría estaba en pleno apogeo cuando un grupo de 5 países (Irán, Irak, Kuwait, Arabia Saudita y Venezuela) decidieron crear la Conferencia de Baghdad para: i) coordinar las políticas petroleras y ii) controlar los precios internacionales del petróleo. Con el tiempo se fueron sumando más países y otros se salieron por lo que a la fecha los actuales miembros son: Angola, AS, Argelia, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Gabón, Irak, Irán, Guinea Ecuatorial, Kuwait, Libia, Nigeria y Venezuela. Se puede apreciar que este bloque de países productores y exportadores del oro negro concentra 759 millones de habitantes y más de 3’605,913 millones de euros del PIB anual a nivel mundial. Dentro de este grupo, el que más reservas cuenta es Venezuela, seguido por AS, Irán Irak y Kuwait. Sin embargo, el que más producción de crudo tuvo en el mes de julio pasado fue AS seguido por: Irak, EAU, Kuwait e Irán. Por lo que fácilmente identificamos el poder económico y político que pudieran tener no sólo en la región sino a nivel global.

Como consecuencia de este atentado petrolero, AS se ha visto en la necesidad de reducir a la mitad su producción de petróleo, pero aún no declara hasta cuándo se estabilizará. Por lo que mientras esto vuelve a su normalidad, vemos dos efectos de impacto inmediato: a) los precios del barril se han disparado en los mercados internacionales llegando a niveles hasta casi de 72 dólares por barril del tipo Brent y la compra de futuros del petróleo se ubicó alrededor de los 65 dólares por barril, y b) los mercados bursátiles también se vieron afectados ya que las acciones de varias aerolíneas asiáticas bajaron debido al gran consumo del keroseno que requieren para que sus aviones funcionen. Esto por mencionar sólo algunos derivados del petróleo, pero recordemos que también el precio de otros productos podría incrementarse como: gasolina, diésel, fuelóleo, bencina, gases, plásticos, telas, asfalto, cauchos, jabones, lubricantes, entre otros.

Para América Latina pudiera ser interesante ver cómo reaccionará Venezuela. Pudiera utilizar al petróleo como moneda de cambio ante EU. Para México, por un lado, es bueno que tenga más ingresos con la mezcla mexicana a través de PEMEX, pero, por otro lado, el precio de dólar estará más volátil, así como la bolsa de valores. Por lo que no debemos anticiparnos a tomar decisiones precipitadamente. Es muy factible que a corto plazo esto se estabilice y el precio se ajuste. Pero la tensión política-nuclear entre EU-Irán no cesará. Es decir, el tema geoeconómico llegará a un balance, pero el geopolítico prevalecerá.

Para más detalle, los invito a escuchar la entrevista que di en “Historias de NegoCEOS” en la siguiente liga: https://www.facebook.com/SaludTVlatino/videos/242195103327734/


Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales Universidad Iberoamericana

aribel.contreras@ibero.mx

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