/ viernes 10 de septiembre de 2021

El sismo

Este septiembre volvió a temblar, un sismo de 7.1 grados de magnitud sacudió la Ciudad de México sin daños relevantes. Como es natural se generan inquietudes y dudas, pero es importante recordar los protocolos establecidos en la ley, los cuales no se rigen exclusivamente por la magnitud, sino también por la velocidad promedio de una onda sísmica.

Como siempre una preocupación importante es la seguridad en las escuelas, en este caso no se reportaron daños mayores y algunas escuelas presentaron afectaciones no estructurales. En la Ciudad de México, antes, durante y después de un sismo se aplica el “Protocolo General de Prevención y Actuación en caso de sismo”, el cual tiene el objetivo de contribuir a la seguridad de las comunidades educativas de educación básica y normal en la Ciudad de México, a través de recomendaciones, procesos que sirvan para la correcta toma de decisiones ante un evento sísmico, dando cumplimiento a lo establecido en los Programas Internos de Protección Civil Escolar, de acuerdo a las necesidades de cada plantel.

Se ha hecho mucho para mejorar la seguridad en las escuelas, por ejemplo, se reformaron lineamientos, se han hecho intervenciones en prácticamente todas las escuelas públicas de educación básica, y revisión estructural en las escuelas particulares del mismo nivel, para dar mayor confianza y certidumbre. Asimismo, el apoyo del Gobierno de la Ciudad de México en la infraestructura física educativa ha sido fundamental para mantener las escuelas seguras; bajo el liderazgo de la Dra. Sheinbaum se ha invertido como nunca para tener instalaciones dignas en beneficio de la comunidad educativa.

El sismo, sin duda, es un evento que nos afecta a todos; sin embargo, gracias a las instituciones de protección civil y a la mejoría en la respuesta por el gobierno ante estos eventos, como la realización frecuente de simulacros, tenemos una capacidad de acción que nos permite salvar muchas vidas. La realidad es que es algo que no podemos prever, pero sí prepararnos para cuando ocurra.

La Ciudad de México se ha caracterizado por tener desastres naturales muy seguidos como los sismos e inundaciones, sin embargo, nos hemos distinguido por ser resilientes y salir adelante ante la adversidad. XXXTwitter: @LuisH_Fernandez

Este septiembre volvió a temblar, un sismo de 7.1 grados de magnitud sacudió la Ciudad de México sin daños relevantes. Como es natural se generan inquietudes y dudas, pero es importante recordar los protocolos establecidos en la ley, los cuales no se rigen exclusivamente por la magnitud, sino también por la velocidad promedio de una onda sísmica.

Como siempre una preocupación importante es la seguridad en las escuelas, en este caso no se reportaron daños mayores y algunas escuelas presentaron afectaciones no estructurales. En la Ciudad de México, antes, durante y después de un sismo se aplica el “Protocolo General de Prevención y Actuación en caso de sismo”, el cual tiene el objetivo de contribuir a la seguridad de las comunidades educativas de educación básica y normal en la Ciudad de México, a través de recomendaciones, procesos que sirvan para la correcta toma de decisiones ante un evento sísmico, dando cumplimiento a lo establecido en los Programas Internos de Protección Civil Escolar, de acuerdo a las necesidades de cada plantel.

Se ha hecho mucho para mejorar la seguridad en las escuelas, por ejemplo, se reformaron lineamientos, se han hecho intervenciones en prácticamente todas las escuelas públicas de educación básica, y revisión estructural en las escuelas particulares del mismo nivel, para dar mayor confianza y certidumbre. Asimismo, el apoyo del Gobierno de la Ciudad de México en la infraestructura física educativa ha sido fundamental para mantener las escuelas seguras; bajo el liderazgo de la Dra. Sheinbaum se ha invertido como nunca para tener instalaciones dignas en beneficio de la comunidad educativa.

El sismo, sin duda, es un evento que nos afecta a todos; sin embargo, gracias a las instituciones de protección civil y a la mejoría en la respuesta por el gobierno ante estos eventos, como la realización frecuente de simulacros, tenemos una capacidad de acción que nos permite salvar muchas vidas. La realidad es que es algo que no podemos prever, pero sí prepararnos para cuando ocurra.

La Ciudad de México se ha caracterizado por tener desastres naturales muy seguidos como los sismos e inundaciones, sin embargo, nos hemos distinguido por ser resilientes y salir adelante ante la adversidad. XXXTwitter: @LuisH_Fernandez