/ domingo 15 de noviembre de 2020

Entre piernas y telones | Romeo y Julieta

Exactamente hace poco más de 2 mil 500 años, el teatro empezó así en la lejana Ática. Tespis, el hoy mítico primer actor (habría que decir también dramaturgo, escenógrafo, traspunte, productor…) recorría en su carromato los caminos de la actual Grecia y encada una de sus paradas representaba sus creaciones.

Luego llegaron los grandes trágicos y el portador de las angustias (hoy llamado protagonista) pasó de ser uno con Esquilo, a dos y luego tres con Sófocles y Eurípides. Se le sumó el coro, apareció deus ex maquina y el teatro creció y creció hasta convertirse en el gran espectáculo que nos deslumbra desde hace muchos ayeres.

Sin embargo, de vez en cuando nos encontramos con algún montaje que regresa a esas raíces del actor-narrador-juglar que solo, sin más herramienta que su voz y su cuerpo nos entrega una historia completa y nos maravilla y emociona de nuevo.

Tal es el caso de Romeo y Julieta que en muy singular versión, adaptada y dirigida por Mario Iván Martínez, se presenta en la hoy tan de moda plataforma zoom, a través del streaming.

Para quienes no lo recuerden o lo desconozcan, Mario Iván es un experto en la obra de Shakespeare y de hecho en todo el arte (música, vestuario, pintura) de esa época de esplendor inglés.

Luego que regresó precisamente de Inglaterra, donde hizo sus estudios, Mario Iván realizó dos montajes que hacían honor al llamado Cisne de Avon: A la manera de Shakespeare y Noche de Epifanía, que tuvieron temporadas históricas en muchos escenarios mexicanos y de otros lugares del mundo.

Ahora Mario Iván se lanza a este reto de adecuar uno de los textos dramáticos más conocidos del mundo, con decenas de personajes, y escribirlo y montarlo para un solo actor que da vida a los ocho personajes centrales.

Extraordinario trabajo de adaptación y puesta en escena; sin embargo, de nada serviría el talento de Mario Iván si no tuviera al protagonista adecuado. Y aquí, lo tiene. Vaya que lo tiene.

Se trata del muy joven Rodolfo Ornelas, aún estudiante en la Escuela Nacional de Arte Teatral del INBAL, quien debuta con el pie derecho, y muy bien plantado, para dar vida a los personajes de Romeo, Julieta, Fray Lorenzo, la nodriza, Paris, el padre, Mercucio

De verdad estupendo el trabajo de este joven histrión que luce sus múltiples talentos, pues gestos, voz, postura corporal, todo está cuidado para ofrecer un montaje que atrapa, emociona, divierte, impresiona pese (o gracias, depende del color con que se mire) a la transmisión en zoom.

A lo ya dicho hay que sumarle la presencia (maravillosa) de un trío de estupendos músicos que “visten” cada escena con colores soberbios: Ellos son Dalia Jiménez en el Violín, Juan Antonio García Méndez en la Guitarra y Daniel Moreno Ortiz en la Viola da gamba y como director del ensamble.

La obra se transmite este próximo miércoles 18 y viernes 20 de noviembre, a través de la cartelera en línea de Teatro La Capilla, por ZOOM, a las 20:00 horas. Los accesos tienen un precio de $100.00, se encuentran a la venta a través de Boletópolis.com.

Exactamente hace poco más de 2 mil 500 años, el teatro empezó así en la lejana Ática. Tespis, el hoy mítico primer actor (habría que decir también dramaturgo, escenógrafo, traspunte, productor…) recorría en su carromato los caminos de la actual Grecia y encada una de sus paradas representaba sus creaciones.

Luego llegaron los grandes trágicos y el portador de las angustias (hoy llamado protagonista) pasó de ser uno con Esquilo, a dos y luego tres con Sófocles y Eurípides. Se le sumó el coro, apareció deus ex maquina y el teatro creció y creció hasta convertirse en el gran espectáculo que nos deslumbra desde hace muchos ayeres.

Sin embargo, de vez en cuando nos encontramos con algún montaje que regresa a esas raíces del actor-narrador-juglar que solo, sin más herramienta que su voz y su cuerpo nos entrega una historia completa y nos maravilla y emociona de nuevo.

Tal es el caso de Romeo y Julieta que en muy singular versión, adaptada y dirigida por Mario Iván Martínez, se presenta en la hoy tan de moda plataforma zoom, a través del streaming.

Para quienes no lo recuerden o lo desconozcan, Mario Iván es un experto en la obra de Shakespeare y de hecho en todo el arte (música, vestuario, pintura) de esa época de esplendor inglés.

Luego que regresó precisamente de Inglaterra, donde hizo sus estudios, Mario Iván realizó dos montajes que hacían honor al llamado Cisne de Avon: A la manera de Shakespeare y Noche de Epifanía, que tuvieron temporadas históricas en muchos escenarios mexicanos y de otros lugares del mundo.

Ahora Mario Iván se lanza a este reto de adecuar uno de los textos dramáticos más conocidos del mundo, con decenas de personajes, y escribirlo y montarlo para un solo actor que da vida a los ocho personajes centrales.

Extraordinario trabajo de adaptación y puesta en escena; sin embargo, de nada serviría el talento de Mario Iván si no tuviera al protagonista adecuado. Y aquí, lo tiene. Vaya que lo tiene.

Se trata del muy joven Rodolfo Ornelas, aún estudiante en la Escuela Nacional de Arte Teatral del INBAL, quien debuta con el pie derecho, y muy bien plantado, para dar vida a los personajes de Romeo, Julieta, Fray Lorenzo, la nodriza, Paris, el padre, Mercucio

De verdad estupendo el trabajo de este joven histrión que luce sus múltiples talentos, pues gestos, voz, postura corporal, todo está cuidado para ofrecer un montaje que atrapa, emociona, divierte, impresiona pese (o gracias, depende del color con que se mire) a la transmisión en zoom.

A lo ya dicho hay que sumarle la presencia (maravillosa) de un trío de estupendos músicos que “visten” cada escena con colores soberbios: Ellos son Dalia Jiménez en el Violín, Juan Antonio García Méndez en la Guitarra y Daniel Moreno Ortiz en la Viola da gamba y como director del ensamble.

La obra se transmite este próximo miércoles 18 y viernes 20 de noviembre, a través de la cartelera en línea de Teatro La Capilla, por ZOOM, a las 20:00 horas. Los accesos tienen un precio de $100.00, se encuentran a la venta a través de Boletópolis.com.