/ jueves 14 de diciembre de 2017

Fama

Luz Elena González es una madre precavida

  -¿Luz Elena González, es cierto que tienes cámaras por toda tu casa y circuito cerrado para vigilar a la servidumbre?

-Sí, porque en el 2013 caché a una nana que le pegaba a  mi hijo Santiago y lo dejaba 3 horas sentado en la silla de comer sin sacarlo, la corrimos, pero desde ese momento hasta ahora tenemos circuito cerrado al estilo Big Brother, una enfermera y una amiga mía que contraté para  supervisar el personal por la seguridad de mis hijos.

-¿Es cierto que tu hijo  ya no tiene el síndrome que hacía que se enojara mucho y que les pegara a ti y a su papi?

-Mi hijo era muy enojón, intolerante a la frustración porque al no poder hacer lo que otros, los niños que tienen ese síndrome se hacen agresivos y en su momento nos pegaba a su papá y a mí, pero con tantas terapias se le quitó y además nunca le pegamos porque el neurólogo dijo que si lo hubiéramos hecho lo haríamos más agresivo. Tuvimos que ser pacientes con él y con la gente que no entendía lo que él sufría y regañaban a Santiago, que cuando era más chico, le gustaba meterse a los vestidores de las señoras y una señora le gritó muy agresiva  pero yo me paré como ogro y le grité a ella igualito y le dije “Al niño no le gritas, ¿qué te crees, con qué derecho?”.

Santiago ahora ya tiene10 años y ya tiene madurez neurológica, pero de chico no entendía y eso repercutió en que no tenía amigos ni jugaba con nadie porque cuando sus compañeros de escuela construían Lego, él lo destruía y ellos pensaban que era grosero hasta que sus terapeutas, neurólogo y todo el equipo que trabaja para nosotros les explicaron a los niños en la escuela que él no era malo sino diferente, lo entendieron, él maduró y ya tiene muchos amigos afortunadamente ya todo está en órden.

-¿Muchas parejas se divorcian al enfrentar estos problemas?

 -Mi marido, Bernardo y yo tuvimos muchos pleitos, yo me sentía incomprendida y le dije “si no vamos a terapia nos vamos a separar” y me dijo “vamos a terapia” y en la terapia salió que el  incomprendido era él.

-¿Pagaron una fortuna para curar a tu hijo?

 -Sí, fue una fortuna porque el seguro no paga nada porque a los ocho años (ya tiene 10) se curó del Síndrome de inmadurez del lóbulo frontal izquierdo, pero mientras, tuvimos que contratar un equipo grande para él, una sicóloga particular que iba con Santiago a la escuela, en las tardes maestra particular para reforzarle sus lecciones, un instructor de natación particular para su coordinación, su neurólogo, sí, es un dineral.

 -¿Lo pagan entre los dos?

-No, mi marido ha tenido mucho éxito, Santiago es afortunado que su papá le proporcione lo mejor y yo ahorro mi dinero, Bernardo es muy responsable y para él antes que nada están sus hijos y yo.

-¿Y además te da todos tus gustos?

 Sí, es muy espléndido, me deja comprar lo que quiero nunca me ha dicho que no a nada, es muy lindo y yo soy muy linda con él, ahora más linda que antes porque cuando eres artista a veces viene la soberbia y creer que eres mejor, te ciegas y te atoras, pero en estos años que he vivido con él me aterrizó, me dijo mis errores aunque yo para todo tenía justificación y una autodefensa,  pero solucionamos muchos malentendidos y por eso tuvimos a María José que ya tiene casi 5 años y Bernardo es el amor de mi vida.

Así concluyó Luz Elena quien es muy afortunada al haber encontrado un marido comprensivo, inteligente, que no tuvo que esperar a ver si el seguro le respondía por los problemas de salud de su hijo y además siempre dejó que Luz Elena ahorrara lo suyo…. Luz Elena supo escoger muy bien a su pareja porque además Bernardo es guapo y joven y no le duele nada.

Luz Elena González es una madre precavida

  -¿Luz Elena González, es cierto que tienes cámaras por toda tu casa y circuito cerrado para vigilar a la servidumbre?

-Sí, porque en el 2013 caché a una nana que le pegaba a  mi hijo Santiago y lo dejaba 3 horas sentado en la silla de comer sin sacarlo, la corrimos, pero desde ese momento hasta ahora tenemos circuito cerrado al estilo Big Brother, una enfermera y una amiga mía que contraté para  supervisar el personal por la seguridad de mis hijos.

-¿Es cierto que tu hijo  ya no tiene el síndrome que hacía que se enojara mucho y que les pegara a ti y a su papi?

-Mi hijo era muy enojón, intolerante a la frustración porque al no poder hacer lo que otros, los niños que tienen ese síndrome se hacen agresivos y en su momento nos pegaba a su papá y a mí, pero con tantas terapias se le quitó y además nunca le pegamos porque el neurólogo dijo que si lo hubiéramos hecho lo haríamos más agresivo. Tuvimos que ser pacientes con él y con la gente que no entendía lo que él sufría y regañaban a Santiago, que cuando era más chico, le gustaba meterse a los vestidores de las señoras y una señora le gritó muy agresiva  pero yo me paré como ogro y le grité a ella igualito y le dije “Al niño no le gritas, ¿qué te crees, con qué derecho?”.

Santiago ahora ya tiene10 años y ya tiene madurez neurológica, pero de chico no entendía y eso repercutió en que no tenía amigos ni jugaba con nadie porque cuando sus compañeros de escuela construían Lego, él lo destruía y ellos pensaban que era grosero hasta que sus terapeutas, neurólogo y todo el equipo que trabaja para nosotros les explicaron a los niños en la escuela que él no era malo sino diferente, lo entendieron, él maduró y ya tiene muchos amigos afortunadamente ya todo está en órden.

-¿Muchas parejas se divorcian al enfrentar estos problemas?

 -Mi marido, Bernardo y yo tuvimos muchos pleitos, yo me sentía incomprendida y le dije “si no vamos a terapia nos vamos a separar” y me dijo “vamos a terapia” y en la terapia salió que el  incomprendido era él.

-¿Pagaron una fortuna para curar a tu hijo?

 -Sí, fue una fortuna porque el seguro no paga nada porque a los ocho años (ya tiene 10) se curó del Síndrome de inmadurez del lóbulo frontal izquierdo, pero mientras, tuvimos que contratar un equipo grande para él, una sicóloga particular que iba con Santiago a la escuela, en las tardes maestra particular para reforzarle sus lecciones, un instructor de natación particular para su coordinación, su neurólogo, sí, es un dineral.

 -¿Lo pagan entre los dos?

-No, mi marido ha tenido mucho éxito, Santiago es afortunado que su papá le proporcione lo mejor y yo ahorro mi dinero, Bernardo es muy responsable y para él antes que nada están sus hijos y yo.

-¿Y además te da todos tus gustos?

 Sí, es muy espléndido, me deja comprar lo que quiero nunca me ha dicho que no a nada, es muy lindo y yo soy muy linda con él, ahora más linda que antes porque cuando eres artista a veces viene la soberbia y creer que eres mejor, te ciegas y te atoras, pero en estos años que he vivido con él me aterrizó, me dijo mis errores aunque yo para todo tenía justificación y una autodefensa,  pero solucionamos muchos malentendidos y por eso tuvimos a María José que ya tiene casi 5 años y Bernardo es el amor de mi vida.

Así concluyó Luz Elena quien es muy afortunada al haber encontrado un marido comprensivo, inteligente, que no tuvo que esperar a ver si el seguro le respondía por los problemas de salud de su hijo y además siempre dejó que Luz Elena ahorrara lo suyo…. Luz Elena supo escoger muy bien a su pareja porque además Bernardo es guapo y joven y no le duele nada.