/ viernes 19 de enero de 2018

Juego de palabras | Y Shasha she shalío con la shuya

Quienes siguieron  los pasos de la formación de alianza entre el PRD, el PAN y el MC – a nivel nacional Por México al Frente y local por La CDMX al Frente – supieron siempre  que la idea y el empuje venían de la señora Alejandra Barrales Magdaleno, quien en los momentos de la aglutinación tenía tres pelotas en el aire: senadora de la República, presidenta del PRD y por unos meses Secretaria de Gobernación del gobierno de la CDMX.

La coalición de dos de los tres grandes grupos políticos originalmente opositores al PRI – luego también enemigos de Morena – tenía sentido. El PAN, fragmentado por la decisión inamovible de Ricardo Anaya de ser candidato presidencial, estaba destinado a terminar la jornada del primero de julio en un cuarto lugar, como el que ocupó en las últimas elecciones mexiquenses. El PRD, desangrado por Morena, probablemente  terminaría quinto. Movimiento Social entró en la tercia sólo por la candidatura de Jalisco. Pero juntos, tenían una lejana posibilidad en la competencia nacional contra el PRI y Morena y una bastante decente en la CDMX.

No soy húngaro ni pitoniso, pero siempre me resultó claro que quien creó y manejó el Frente y sucedáneos fue Shashita ( todos ustedes que hablan ruso saben que Sasha es diminutivo cariñoso de Alejandro/a ).

No Ricardo Anaya, quien encabezaba el grupo más fuerte; no Miguel Ángel Mancera, quien gobernaba y gobierna la ciudad y quien aportó los recursos y la influencia para armarlo. Siempre fue Barrales la bujía del equipo, porque siempre quiso la candidatura a gobernar la Ciudad y, lo que es más importante, porque siempre supo que tenía una excelente oportunidad de ganarla, ante un PRI local abandonado por la dirigencia nacional durante 25 años , y una Morena que destilaría un candidato a capricho de Andrés Manuel López Obrador. Cuando  esa candidata resultó ser Claudia Shinbaum , la suerte estaba prácticamente echada: todas las mujeres que han sido impuestas por López Obrador como candidatas, han perdido.

( Sheinbaum resultaba además especialmente vulnerable a una guerra sucia cuyas modalidades no son ajenas al talento político de Barrales. Recién destapada había sido golpeada por escándalo del Colegio Rébsamen, y además, la delegación que había heredado de su delincuente esposo Carlos Imaz

- quien fue compañero de René Bejarano en el famoso caso de los dólares ligados – fue expoliada sin compasión, sin olvidar que fue cómplice en la construcción, y falta de entrega de cuentas, de los primeros segundos pisos viales ).    

Buenos días. Buena suerte.

juegodrepalabras1@yahoo.com

Sitio Web: juegodsepalabras.mx

Quienes siguieron  los pasos de la formación de alianza entre el PRD, el PAN y el MC – a nivel nacional Por México al Frente y local por La CDMX al Frente – supieron siempre  que la idea y el empuje venían de la señora Alejandra Barrales Magdaleno, quien en los momentos de la aglutinación tenía tres pelotas en el aire: senadora de la República, presidenta del PRD y por unos meses Secretaria de Gobernación del gobierno de la CDMX.

La coalición de dos de los tres grandes grupos políticos originalmente opositores al PRI – luego también enemigos de Morena – tenía sentido. El PAN, fragmentado por la decisión inamovible de Ricardo Anaya de ser candidato presidencial, estaba destinado a terminar la jornada del primero de julio en un cuarto lugar, como el que ocupó en las últimas elecciones mexiquenses. El PRD, desangrado por Morena, probablemente  terminaría quinto. Movimiento Social entró en la tercia sólo por la candidatura de Jalisco. Pero juntos, tenían una lejana posibilidad en la competencia nacional contra el PRI y Morena y una bastante decente en la CDMX.

No soy húngaro ni pitoniso, pero siempre me resultó claro que quien creó y manejó el Frente y sucedáneos fue Shashita ( todos ustedes que hablan ruso saben que Sasha es diminutivo cariñoso de Alejandro/a ).

No Ricardo Anaya, quien encabezaba el grupo más fuerte; no Miguel Ángel Mancera, quien gobernaba y gobierna la ciudad y quien aportó los recursos y la influencia para armarlo. Siempre fue Barrales la bujía del equipo, porque siempre quiso la candidatura a gobernar la Ciudad y, lo que es más importante, porque siempre supo que tenía una excelente oportunidad de ganarla, ante un PRI local abandonado por la dirigencia nacional durante 25 años , y una Morena que destilaría un candidato a capricho de Andrés Manuel López Obrador. Cuando  esa candidata resultó ser Claudia Shinbaum , la suerte estaba prácticamente echada: todas las mujeres que han sido impuestas por López Obrador como candidatas, han perdido.

( Sheinbaum resultaba además especialmente vulnerable a una guerra sucia cuyas modalidades no son ajenas al talento político de Barrales. Recién destapada había sido golpeada por escándalo del Colegio Rébsamen, y además, la delegación que había heredado de su delincuente esposo Carlos Imaz

- quien fue compañero de René Bejarano en el famoso caso de los dólares ligados – fue expoliada sin compasión, sin olvidar que fue cómplice en la construcción, y falta de entrega de cuentas, de los primeros segundos pisos viales ).    

Buenos días. Buena suerte.

juegodrepalabras1@yahoo.com

Sitio Web: juegodsepalabras.mx