“La juventud es la edad del crecimiento y del desarrollo, de la actividad, y de la viveza, de la imaginación y el ímpetu”. (José Marti, 1853 – 1895).
Mañana 12 de agosto, la ONU celebra el Día Internacional de la Juventud. Informa que la población mundial actual es de 1,800 millones de personas entre los 18 y los 29 años y que constituye la generación más numerosa de la historia. El 24 por ciento de la pirámide por edades de un total de 7,350 millones de personas en el mundo.
Al respecto de la edad cronológica, expertos afirman que cada etapa de la vida tiene una función y un tiempo óptimo. Que es necesario dar tiempo al tiempo, y meditar el estimular demasiado rápido a un adolescente a la juventud y de la juventud a la adultez, coincidiremos de las diferencias de una persona de 14 con otra de 18 años, de 19 a 24, e incluso de 25 a 29 años de edad, en sus decisiones de los caminos y veredas del primer empleo, luces y sombras.
En la representación social de los primeros años de la juventud sus retos son ampliamente conocidos: Continúa la búsqueda de identidad, experimenta lo diferente, música, pertenencia al grupo de amistad, el amor, aceptar la diversidad, la igualdad y equidad de género, aventuras, ser, sentir, equivocarse, aprender, olvidar, crear capacidades, abrir rutas al futuro y un largo etcétera… en ese crecimiento, a veces, unos días con mirada al horizonte y otros pudiera parecer sombrío.
El “pergamino de vida” se observa en la “inscripción de los cuerpos”. No nos referimos a los tatuajes en la piel, nos referimos a algo más profundo e indeleble, a las huellas y marcas que quedan registrados en los estilos de vida saludables y de riesgos. Ejemplo: adicciones, inactividad física, comes mal y otros, dejan marcas y consecuencias negativas en lo físico, psicológico, social y espiritual. Entonces, visibilicemos: “la única persona que estará contigo toda la vida, eres tú, así que ámate, considérate, cuídate y vive orgulloso de ti”.
La activación física es tan noble en todas las etapas de la vida, que quienes abren esa puerta, tienen más oportunidades en la vida y de vida. Incluso, la cultura física y el deporte es un derecho fundamental para todos, reconocido en el artículo 4o. de nuestra Constitución.
Del comportamiento antisocial en la juventud indicadores apuntan ser menor al 2 por ciento de su grupo, pero, genera víctimas. Estudios en criminología explican que normalmente quienes cometen delitos comprenden la diferencia entre el bien y el mal. Sin embargo, la gratificación inmediata, entre otros importantes factores son decisivos para insistir en estas conductas. ¿Cuándo se decide cambiar un comportamiento fuera de la ley? Algunas pistas: “por una cuestión de la edad, al enamorse, los accesos a mejores oportunidades percibidas, en el caso de mujeres la maternidad”.
Desde la mirada formal de la ONU: “Los jóvenes tienen un papel protagónico en la sostenibilidad, la inclusividad y el éxito de las iniciativas dirigidas a la consolidación de la paz. Son la esperanza para construir un mundo mejor, pero muchos de ellos sufren maltrato y discriminación. En este año 2018, “el énfasis en su capacidad para participar en la configuración de una paz verdadera y contribuir a la prevención y la transformación de los conflictos, la inclusión, la justicia social, la reconciliación y la paz sostenible”.
Por cierto, el reconocimiento a los jóvenes que inician un nuevo ciclo escolar y bienvenida a los accesos que forjan excelentes oportunidades.
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