A raíz de la llamada que sostuvieron Kamala Harris y Andrés Manuel López Obrador, a principios de semana, se tomaron varias decisiones en ambos lados de la frontera.
De manera oficial se dio a conocer que lograr una completa apertura de la frontera entre México y Estados Unidos, la implementación de políticas migratorias y continuar con la cooperación para la pandemia fueron los asuntos que trataron, pero lo cierto es que varias cosas sucedieron en los días siguientes.
Primero, después de siete meses, el Senado de Estados Unidos ratificó a Kenneth Lee Salazar como nuevo embajador de Estados Unidos en México. El demócrata de 66 años sustituirá a Christopher Landau quien dejó la representación en enero tras la toma de protesta del presidente Joe Biden.
Salazar se comprometió a crear un cambio transformador en la relación entre Estados Unidos y México, y destacó que construirá el diálogo en temas de seguridad, de comercio, "asegurar" las "fronteras compartidas y crear un marco ordenado, seguro y humano para la migración", un tema político clave en Estados Unidos.
Sin embargo, es bien sabido que el nuevo diplomático es un destacado abogado y político ambientalista que se dedica a defender los temas del cambio climático y su currículum así lo demuestra.
Veamos, el nuevo embajador estadunidense fue asesor legal principal del gobernador de Colorado, Roy Romer, de 1987 a 1990, después estuvo al frente del Departamento Estatal de Recursos Naturales, desde donde ideó la enmienda constitucional de ese estado que creó el programa Great Outdoors Colorado, misma que ayuda en la preservación de tierras de cultivo, espacios abiertos y corredores fluviales.
Ya como fiscal general de Colorado en 1988, Salazar creó la Unidad de Delitos Ambientales dentro de la Fiscalía General, así como también apoyó una medida electoral para limitar la venta de armas de fuego en ferias dedicadas a esos artefactos. En 2008 fue nombrado por el presidente Barack Obama como secretario del Interior donde también estuvo involucrado con temas ambientales.
Por si esto fuera poco el embajador es asociado como un referente del fracking, que como se sabe se refiere a la extracción de recursos naturales para el desarrollo de combustibles fósiles.
Con estos antecedentes no es difícil darnos cuenta que la nueva encomienda de Kenneth Lee Salazar será clave para que México cumpla con lo establecido en el T-MEC y con los compromisos de la agenda 2030 sobre todo en los términos de medio ambiente y cambio climático.
Otro punto en el que hay que centrar nuestra atención es que el juez federal Juan Pablo Gómez Fierro emitió una sentencia definitiva contra la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica y que el sector privado buscaba que no se aplicará ya que entre las principales razones por las que se decidió fallar a favor se encuentran que la Ley ejerce discrecionalidad al tener acceso a red, genera distorsiones en el mercado y representa amenazas al medio ambiente. todo lo anterior contemplado en el TMEC. Con esto se le da certidumbre al tratado entre los 3 países en materia de energía y sustentabilidad comercial.
Además de la reciente visita del asesor de Seguridad Nacional del Presidente Biden, Jake Sullivan; el secretario del Departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y la subsecretaria de Estado, Uzra Zeya, quienes estuvieron en nuestro país el 10 de agosto para promover la cooperación entre Estados Unidos y México en distintas áreas de nuestra agenda bilateral.
Con ellos llegaron a México el director del Consejo de Seguridad Nacional, Juan González; la asesora en Seguridad Nacional de la Vicepresidencia, embajadora Nancy McEldowney; la embajadora Julissa Reynoso; el funcionario sénior de la Oficina del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Ricardo Zuniga; y el subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional David Shahoulian.
Se dio a conocer que en su visita el asesor de Seguridad Nacional Sullivan y su equipo de colaboradores se reunieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador, el secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard, el fiscal general Alejandro Gertz, y el secretario de Hacienda Ramírez de la O, así como otros representantes de alto rango del gobierno mexicano.
“La visita se produjo tras la llamada telefónica de la vicepresidenta Kamala Harris y el presidente López Obrador el 9 de agosto, y ofreció una oportunidad de analizar prioridades económicas y de seguridad, como la competitividad, nuestra frontera común, la recuperación de la pandemia de COVID-19, la cooperación en el área de seguridad y el desarrollo en el sur de México y América Central”, dice un comunicado de la embajada norteamericana.
Los dos temas, tanto el de seguridad, como el medio ambiente son asuntos no menores para la administración de Biden, quien ha manifestado su preocupación ante el cambio climático y ha formulado su interés en la creación de energías renovables y menos contaminantes.
Mientras que, en materia de seguridad, desde el inicio de su gobierno Biden reconoció que este asunto era uno de los puntos en los que tendría que centrar su atención.
Sin embargo, aunque en la última reunión entre funcionarios de México y Estados Unidos se abordó el tema, permanece pendiente la apertura de la frontera terrestre. Los cruces se encuentran cerrados desde el 21 de marzo de 2020 para actividades no esenciales, no hubo acuerdos y esta medida seguirá por lo menos dos meses más. Confiamos en que Joe Biden acepte la invitación de AMLO a México y su visita sea uno de los factores que permitan que se destrabe este asunto si las contingencias de la pandemia lo permiten.
Dr. J. Hector Muñoz Escobar
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