/ domingo 9 de septiembre de 2018

La cuarta transformación

“ESTAMOS A PUNTO DE LOGRAR LA CUARTA TRANSFORMACIÓN EN LA HISTORIA DE MÉXICO.”

Andrés Manuel López Obrador.


Y así ha comenzado la cuarta transformación en la historia del país: Justo en la primera sesión de esta histórica 64 Legislatura, el Senado de la República mostró su signo de cambio, sí cambio de opinión, luego de que los senadores de Morena, sus aliados de la coalición y los trepadores de última hora –hablamos de los senadores que el Partido Verde concedió al Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, para que éste alcanzara la mayoría absoluta y con ello estar en posibilidad de llegar a las reformas constitucionales que pretende hacer el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador-, bueno, todos ellos que el pasado martes en la misma sesión votaron en contra y a favor de un mismo tema: la licencia de Manuel Velasco para que regrese a Chiapas a terminar su mandato como gobernador... Algo nunca antes visto.

Cabe señalar que la primera votación económica en el Pleno —a mano alzada— fue en conciencia, sin señales por parte de nadie y los senadores tuvieron oportunidad de decir “no” a la maniobra del senador-gobernador Manuel Velasco, hoy también amigo de AMLO.

Sin embargo, fueron suficientes poco menos de cinco horas para que los senadores realizaran dos maniobras que nunca se había visto en la vida parlamentaria de México: rechazar la solicitud de licencia del senador chiapaneco Manuel Velasco, y someter a votación el mismo tema dos veces en una misma sesión, en afán de dar marcha atrás y proceder afirmativamente a la solicitud.

Pero, ¿qué fue lo que hizo Velasco? Comencemos recordando los principios del Partido Verde siglas bajo las que el chiapaneco ha alcanzado sus objetivos políticos, institución siempre del lado “correcto” de la historia; de conformidad con esos principios, Manuel se alineó con el candidato presidencial que tenía más oportunidad de ganar la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador; posteriormente, anunció que no buscaría una senaduría, lo cual dejó así hasta unos días antes de las elecciones cuando el Verde bajó a uno de sus candidatos al Senado para sustituirlo por el Gober. Finalmente, cambió la Constitución de Chiapas para tener oportunidad de ir a tomar protesta como senador, dejar a una de sus huestes momentáneamente al frente del gobierno, pedir licencia en el Senado para regresar a gobernar y, cuando termine su periodo en diciembre, retornar a su escaño senatorial. Y aunque la Constitución prohíbe que los gobernadores salten al Senado, encontró la manera, faltaba más…

Las senadoras Xóchitl Gálvez del PAN y Blanca Piña de Morena, se anticiparon a decir por qué no debía aprobarse la licencia, señalando que Velasco había dañado a las instituciones al modificar la Constitución de Chiapas para permitirle ser candidato al Senado sin separarse de su cargo; rendir protesta como miembro de la Cámara alta y dejar a un sustituto como gobernador interino para, una vez habiendo tomado protesta cono Senador, regresarse a Chiapas y terminar el sexenio, a fin de volver al Senado. A todo eso, dijeron las senadoras, no debían prestarse los senadores.

La votación se tomó a mano alzada, como suele ocurrir en estos casos, y la mayoría se pronunció por negar la solicitud de licencia de Velasco, lo que daba muestras de un acto de legalidad e independencia por parte de la Cámara alta: Incluso Velasco parecía haberse conformado al decir a los reporteros: “Soy muy respetuoso de lo que decidan”…

Solo minutos después el gobernador-senador empezó a mover sus influencias con los líderes de las bancadas de Morena, Ricardo Monreal, del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong y de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, a quienes convenció de que se diera una segunda votación sobre el tema.

Ante las quejas de los senadores –principalmente del PAN y Morena-, se habló de un “derecho humano” el hecho de que un senador pueda pedir licencia, a lo que hubo quienes cuestionaron: “¿Entonces para qué lo votamos? Que nos avise y ya”…. El caso es que la segunda votación se dio —nominal, a diferencia de la anterior— validando la petición del chiapaneco por 84 votos a favor, 31 en contra y cuatro abstenciones.

Apenas unos cuantos días duró la esperanza: Inicialmente la negativa a la licencia fue temporalmente un gran mensaje, pensamos que ya nadie se burlaría de la ley; el haber reculado y concedido el capricho de Velasco es una burla que alcanza a quienes concedieron esa mayoría en el Congreso, pensando en que las formas de hacer política serían distintas.


Así la “Regeneración Nacional”…

gamogui@hotmail.com



“ESTAMOS A PUNTO DE LOGRAR LA CUARTA TRANSFORMACIÓN EN LA HISTORIA DE MÉXICO.”

Andrés Manuel López Obrador.


Y así ha comenzado la cuarta transformación en la historia del país: Justo en la primera sesión de esta histórica 64 Legislatura, el Senado de la República mostró su signo de cambio, sí cambio de opinión, luego de que los senadores de Morena, sus aliados de la coalición y los trepadores de última hora –hablamos de los senadores que el Partido Verde concedió al Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, para que éste alcanzara la mayoría absoluta y con ello estar en posibilidad de llegar a las reformas constitucionales que pretende hacer el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador-, bueno, todos ellos que el pasado martes en la misma sesión votaron en contra y a favor de un mismo tema: la licencia de Manuel Velasco para que regrese a Chiapas a terminar su mandato como gobernador... Algo nunca antes visto.

Cabe señalar que la primera votación económica en el Pleno —a mano alzada— fue en conciencia, sin señales por parte de nadie y los senadores tuvieron oportunidad de decir “no” a la maniobra del senador-gobernador Manuel Velasco, hoy también amigo de AMLO.

Sin embargo, fueron suficientes poco menos de cinco horas para que los senadores realizaran dos maniobras que nunca se había visto en la vida parlamentaria de México: rechazar la solicitud de licencia del senador chiapaneco Manuel Velasco, y someter a votación el mismo tema dos veces en una misma sesión, en afán de dar marcha atrás y proceder afirmativamente a la solicitud.

Pero, ¿qué fue lo que hizo Velasco? Comencemos recordando los principios del Partido Verde siglas bajo las que el chiapaneco ha alcanzado sus objetivos políticos, institución siempre del lado “correcto” de la historia; de conformidad con esos principios, Manuel se alineó con el candidato presidencial que tenía más oportunidad de ganar la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador; posteriormente, anunció que no buscaría una senaduría, lo cual dejó así hasta unos días antes de las elecciones cuando el Verde bajó a uno de sus candidatos al Senado para sustituirlo por el Gober. Finalmente, cambió la Constitución de Chiapas para tener oportunidad de ir a tomar protesta como senador, dejar a una de sus huestes momentáneamente al frente del gobierno, pedir licencia en el Senado para regresar a gobernar y, cuando termine su periodo en diciembre, retornar a su escaño senatorial. Y aunque la Constitución prohíbe que los gobernadores salten al Senado, encontró la manera, faltaba más…

Las senadoras Xóchitl Gálvez del PAN y Blanca Piña de Morena, se anticiparon a decir por qué no debía aprobarse la licencia, señalando que Velasco había dañado a las instituciones al modificar la Constitución de Chiapas para permitirle ser candidato al Senado sin separarse de su cargo; rendir protesta como miembro de la Cámara alta y dejar a un sustituto como gobernador interino para, una vez habiendo tomado protesta cono Senador, regresarse a Chiapas y terminar el sexenio, a fin de volver al Senado. A todo eso, dijeron las senadoras, no debían prestarse los senadores.

La votación se tomó a mano alzada, como suele ocurrir en estos casos, y la mayoría se pronunció por negar la solicitud de licencia de Velasco, lo que daba muestras de un acto de legalidad e independencia por parte de la Cámara alta: Incluso Velasco parecía haberse conformado al decir a los reporteros: “Soy muy respetuoso de lo que decidan”…

Solo minutos después el gobernador-senador empezó a mover sus influencias con los líderes de las bancadas de Morena, Ricardo Monreal, del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong y de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, a quienes convenció de que se diera una segunda votación sobre el tema.

Ante las quejas de los senadores –principalmente del PAN y Morena-, se habló de un “derecho humano” el hecho de que un senador pueda pedir licencia, a lo que hubo quienes cuestionaron: “¿Entonces para qué lo votamos? Que nos avise y ya”…. El caso es que la segunda votación se dio —nominal, a diferencia de la anterior— validando la petición del chiapaneco por 84 votos a favor, 31 en contra y cuatro abstenciones.

Apenas unos cuantos días duró la esperanza: Inicialmente la negativa a la licencia fue temporalmente un gran mensaje, pensamos que ya nadie se burlaría de la ley; el haber reculado y concedido el capricho de Velasco es una burla que alcanza a quienes concedieron esa mayoría en el Congreso, pensando en que las formas de hacer política serían distintas.


Así la “Regeneración Nacional”…

gamogui@hotmail.com



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