/ sábado 12 de marzo de 2022

La filtración de llamadas

Por una #SociedadHorizontal


La Junta de Coordinación Política (JUCOPO) del Senado decidió que el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, tendrá que comparecer ante la Cámara Alta. El citatorio senatorial es para atender los cuestionamientos relacionados con la filtración de sus conversaciones, en el caso de su excuñada Alejandra Cuevas, a quien se responsabiliza de la muerte de su hermano.

Las grabaciones publicadas desde la semana pasada, en las que el fiscal se queja del proyecto del ministro Pérez Dayán, han generado gran polémica, tanto por la obtención previa de una posible sentencia de la SCJN, como por la propia independencia del Poder Judicial que queda cuestionada. En uno de los audios, el funcionario pronostica que la propuesta de Pérez Dayán no prosperará, debido a “tres o cuatro ministros que nomás no se la van a dejar pasar”. Con referencia a estos hechos, el presidente López Obrador dijo que Gertz Manero es un hombre inteligente al que le tiene confianza, ya que es un “buen fiscal”.

No es el único caso en que se han interceptado llamadas de actores públicos relevantes; lo que posiblemente si sea la primera vez, es que se trate de llamadas que involucran al Fiscal General de la República. Mas allá de las repercusiones políticas o judiciales que estos hechos pudieran tener, vale la pena reflexionar sobre el momento que vive el país y la probabilidad de que haya más episodios como este.

La sucesión presidencial adelantada, la consecuente competencia por el poder, el previsible desgaste que ello generará -como cada sexenio- en la figura del mandatario y su equipo, aunadas al amplio espectro de tecnologías que hoy permiten interceptar llamadas, definen un escenario de nuevos y variados “escándalos”. Es altamente probable que en los próximos meses tengamos más filtraciones de comunicaciones de miembros de la llamada clase política.

En el 2019, México ocupaba el segundo lugar entre los países más afectados por el uso de software espía (spyware) en Latinoamérica, con un 21% de los casos detectados en la región. Entre las tecnologías más empleadas se encuentra el ya famoso Pegasus, pero también una amplia gama de instrumentos incluso más sofisticados.

Cabe recordar que una investigación realizada en 2017, reveló que periodistas, activistas y jefes de Estado estaban siendo vigilados por gobiernos que compraron el programa israelí Pegasus, desarrollado originalmente con el fin de combatir el terrorismo y la delincuencia. Según la investigación realizada por 17 organizaciones de medios, la ONG Forbidden Stories y Amnistía Internacional, se cree que alrededor de 50.000 números telefónicos fueron potenciales objetivos de espionaje mediante esta tecnología.

Lo preocupante es que este tipo de tecnologías se han vuelto cada vez más accesibles, por lo que es posible que no solo estén en manos de actores gubernamentales a nivel federal, sino también de gobiernos estatales e incluso actores privados que busquen utilizar la información obtenida con estos métodos, en su propio beneficio.

El caso Gertz Manero debe recordarnos que las filtraciones de conversaciones, cuando de litigios judiciales se trata, no solo ayudan a que haya mas transparencia. Las publicaciones pueden también ser parte de estrategias de presión o distracción de la opinión pública, en beneficio de intereses desconocidos. La #SociedadHorizontal debe estar al tanto de esto, para no ser presa de estos sesgos.


Por una #SociedadHorizontal


La Junta de Coordinación Política (JUCOPO) del Senado decidió que el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, tendrá que comparecer ante la Cámara Alta. El citatorio senatorial es para atender los cuestionamientos relacionados con la filtración de sus conversaciones, en el caso de su excuñada Alejandra Cuevas, a quien se responsabiliza de la muerte de su hermano.

Las grabaciones publicadas desde la semana pasada, en las que el fiscal se queja del proyecto del ministro Pérez Dayán, han generado gran polémica, tanto por la obtención previa de una posible sentencia de la SCJN, como por la propia independencia del Poder Judicial que queda cuestionada. En uno de los audios, el funcionario pronostica que la propuesta de Pérez Dayán no prosperará, debido a “tres o cuatro ministros que nomás no se la van a dejar pasar”. Con referencia a estos hechos, el presidente López Obrador dijo que Gertz Manero es un hombre inteligente al que le tiene confianza, ya que es un “buen fiscal”.

No es el único caso en que se han interceptado llamadas de actores públicos relevantes; lo que posiblemente si sea la primera vez, es que se trate de llamadas que involucran al Fiscal General de la República. Mas allá de las repercusiones políticas o judiciales que estos hechos pudieran tener, vale la pena reflexionar sobre el momento que vive el país y la probabilidad de que haya más episodios como este.

La sucesión presidencial adelantada, la consecuente competencia por el poder, el previsible desgaste que ello generará -como cada sexenio- en la figura del mandatario y su equipo, aunadas al amplio espectro de tecnologías que hoy permiten interceptar llamadas, definen un escenario de nuevos y variados “escándalos”. Es altamente probable que en los próximos meses tengamos más filtraciones de comunicaciones de miembros de la llamada clase política.

En el 2019, México ocupaba el segundo lugar entre los países más afectados por el uso de software espía (spyware) en Latinoamérica, con un 21% de los casos detectados en la región. Entre las tecnologías más empleadas se encuentra el ya famoso Pegasus, pero también una amplia gama de instrumentos incluso más sofisticados.

Cabe recordar que una investigación realizada en 2017, reveló que periodistas, activistas y jefes de Estado estaban siendo vigilados por gobiernos que compraron el programa israelí Pegasus, desarrollado originalmente con el fin de combatir el terrorismo y la delincuencia. Según la investigación realizada por 17 organizaciones de medios, la ONG Forbidden Stories y Amnistía Internacional, se cree que alrededor de 50.000 números telefónicos fueron potenciales objetivos de espionaje mediante esta tecnología.

Lo preocupante es que este tipo de tecnologías se han vuelto cada vez más accesibles, por lo que es posible que no solo estén en manos de actores gubernamentales a nivel federal, sino también de gobiernos estatales e incluso actores privados que busquen utilizar la información obtenida con estos métodos, en su propio beneficio.

El caso Gertz Manero debe recordarnos que las filtraciones de conversaciones, cuando de litigios judiciales se trata, no solo ayudan a que haya mas transparencia. Las publicaciones pueden también ser parte de estrategias de presión o distracción de la opinión pública, en beneficio de intereses desconocidos. La #SociedadHorizontal debe estar al tanto de esto, para no ser presa de estos sesgos.