/ domingo 14 de junio de 2020

¿La oportunidad de la crisis?

Muy merecido homenaje el brindado a Giovanni López, muerto a manos de la policía en el municipio priista de Ixtlahuacán de los Membrillos, Jalisco; a petición del diputado de Morena Javier Hidalgo, un minuto de silencio por parte de la Comisión Permanente.

Sin embargo, no deja de llamar la atención la desigualdad en el trato para Alexander, igualmente muerto a manos de la policía municipal en Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca; para Melania, la adolescente pateada por elementos de la policía capitalina durante los disturbios de los seudoanarquistas en la CDMX; al asesinato de Yahir López en Tijuana -asesinado por la policía con la misma técnica con la que eliminaron a George Floyd, en Minneapolis, Minnesota: presionado del cuello con la rodilla hasta que se asfixió-; e igualmente en el caso de Carlos Navarro en Xalapa, Veracruz, el pasado mes de mayo, quien fue arrestado y trasladado al cuartel de la policía de San José, de donde no salió convida, a los 33 años y a decir del reporte oficial, murió de “un infarto”…

El tema es que ni Losé Murat de Oaxaca, ni Jaime Bonilla de Baja California, ni Claudia Sheinbaum, de la Ciudad de México, ni Cuitláhuac García de Veracruz, han sido acusados de represores, cosa que si ha sucedido con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien se ha convertido en el nuevo villano favorito del Presidente.

Y ante la crisis sanitaria derivada del Covid-19, tanto en el aspecto de salud, como en lo económico, un nuevo debate sale a la palestra: sin saber realmente quién empezó primero (¿?) el prejidente de México y el gobernador de Jalisco arman un lío del que quién sabe cuál saldrá mejor librado…

Lo cierto es que los eventos suscitados en Guadalajara condenando el asesinato Giovanni López, a manos de “los polis”, no deja de ser un tema a analizar como revancha hacia el gobernador Enrique Alfaro, quien desde que ganó la gubernatura se deslindó del gobierno de AMLO, por lo que desde entonces ha sido considerado traidor.

Ahora ya con la pandemia encima, el gobernador de Jalisco optó por un camino independiente y muy diferente al del gobierno federal para enfrentar al coronavirus lo cual ha redundado en mejores resultados que quienes han dirigido sus pasos por la administración lopezobradorista en cifras de contagio y fallecimientos, pese a las trabas y bloqueos impuestos desde el gobierno, incluso para la importación de pruebas masivas de detección del virus.

El caso es que de este enfrentamiento ha surgido un liderazgo que puede tener mucho futuro en el ambiente político nacional a corto plazo, para el 2024.La pandemia y la confrontación con el presidente nos llevan a observar un posible precandidato presidencial que, si bien es cierto desde el principio de su carrera política y a medida que ha alcanzado posiciones de gobierno ha mostrado lo suyo; ahora el país entero voltea a verlo y puede ser que lleve ventaja sobre Andrés López…

Quizá sea temprano para hablar del tema pero ha sido el mismo Prejidente -quien tantos años tomó para lograr llegar a “la grande” y habitar el Palacio Nacional-, el que en medio del conflicto, “lo destapó “. Lo cierto es que México necesita urgentemente de un liderazgo fuerte, claro y comprometido, y puede ser la persona del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, mandatario de una de las tres entidades más importantes del país.

Las crisis traen oportunidades… Veremos.


gamogui@hotmail.com


Muy merecido homenaje el brindado a Giovanni López, muerto a manos de la policía en el municipio priista de Ixtlahuacán de los Membrillos, Jalisco; a petición del diputado de Morena Javier Hidalgo, un minuto de silencio por parte de la Comisión Permanente.

Sin embargo, no deja de llamar la atención la desigualdad en el trato para Alexander, igualmente muerto a manos de la policía municipal en Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca; para Melania, la adolescente pateada por elementos de la policía capitalina durante los disturbios de los seudoanarquistas en la CDMX; al asesinato de Yahir López en Tijuana -asesinado por la policía con la misma técnica con la que eliminaron a George Floyd, en Minneapolis, Minnesota: presionado del cuello con la rodilla hasta que se asfixió-; e igualmente en el caso de Carlos Navarro en Xalapa, Veracruz, el pasado mes de mayo, quien fue arrestado y trasladado al cuartel de la policía de San José, de donde no salió convida, a los 33 años y a decir del reporte oficial, murió de “un infarto”…

El tema es que ni Losé Murat de Oaxaca, ni Jaime Bonilla de Baja California, ni Claudia Sheinbaum, de la Ciudad de México, ni Cuitláhuac García de Veracruz, han sido acusados de represores, cosa que si ha sucedido con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien se ha convertido en el nuevo villano favorito del Presidente.

Y ante la crisis sanitaria derivada del Covid-19, tanto en el aspecto de salud, como en lo económico, un nuevo debate sale a la palestra: sin saber realmente quién empezó primero (¿?) el prejidente de México y el gobernador de Jalisco arman un lío del que quién sabe cuál saldrá mejor librado…

Lo cierto es que los eventos suscitados en Guadalajara condenando el asesinato Giovanni López, a manos de “los polis”, no deja de ser un tema a analizar como revancha hacia el gobernador Enrique Alfaro, quien desde que ganó la gubernatura se deslindó del gobierno de AMLO, por lo que desde entonces ha sido considerado traidor.

Ahora ya con la pandemia encima, el gobernador de Jalisco optó por un camino independiente y muy diferente al del gobierno federal para enfrentar al coronavirus lo cual ha redundado en mejores resultados que quienes han dirigido sus pasos por la administración lopezobradorista en cifras de contagio y fallecimientos, pese a las trabas y bloqueos impuestos desde el gobierno, incluso para la importación de pruebas masivas de detección del virus.

El caso es que de este enfrentamiento ha surgido un liderazgo que puede tener mucho futuro en el ambiente político nacional a corto plazo, para el 2024.La pandemia y la confrontación con el presidente nos llevan a observar un posible precandidato presidencial que, si bien es cierto desde el principio de su carrera política y a medida que ha alcanzado posiciones de gobierno ha mostrado lo suyo; ahora el país entero voltea a verlo y puede ser que lleve ventaja sobre Andrés López…

Quizá sea temprano para hablar del tema pero ha sido el mismo Prejidente -quien tantos años tomó para lograr llegar a “la grande” y habitar el Palacio Nacional-, el que en medio del conflicto, “lo destapó “. Lo cierto es que México necesita urgentemente de un liderazgo fuerte, claro y comprometido, y puede ser la persona del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, mandatario de una de las tres entidades más importantes del país.

Las crisis traen oportunidades… Veremos.


gamogui@hotmail.com