/ viernes 6 de octubre de 2017

La recuperación de la capa de ozono

El pasado 16 de septiembre, paralelamente a los festejos patrios, se celebró el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, en conmemoración de la firma del Protocolo de Montreal, instrumento global que cumple 30 años de su creación y el cual tiene como principal objetivo la protección de la capa de ozono a través de medidas para controlar y progresivamente eliminar la producción y utilización de sustancias que la agotan.

El ozono, que químicamente se representa como O3, es un gas que se encuentra en la estratósfera de nuestro planeta entre 10 y 40 kilómetros de distancia de la superficie terrestre. Aunque su presencia es menor que la de otros gases en el planeta, el ozono es un elemento esencial para la vida humana, ya que funciona como un escudo natural que repele la radiación de los rayos ultravioleta provenientes del sol, los cuales son dañinos para los seres vivos.

En los años ochenta, gracias a las investigaciones sobre el medio ambiente atmosférico desarrolladas por científicos del mundo como el ingeniero químico mexicano Mario Molina, se demostró que había un agotamiento de la cantidad de ozono sobre la región de la Antártida, fenómeno al cual se le denominó como “agujero de la capa de ozono” y se determinó que constituía una seria amenaza ambiental y para la salud de los seres humanos.

La disminución del ozono en la estratósfera, se encuentra relacionada con el aumento de casos de cáncer en la piel, cataratas, afectaciones a los animales y a las plantas, así como con el cambio climático, debido a que hay una mayor penetración de los rayos ultravioleta a la tierra.

La causa del agujero en la capa de ozono es la utilización de sustancias que contienen clorofluorocarbonos (CFC), gases que se encuentran en los sistemas de refrigeración para aire acondicionado, aerosoles para el cabello y otros productos.

El Protocolo de Montreal fijó un calendario para eliminar gradualmente la producción y utilización de dichas sustancias, hasta ahora se han tenido progresos importantes en todo el mundo. Desde su adopción, se han dejado de emitir a la atmósfera cerca de 140 mil millones de toneladas de compuestos industriales que afectan al ozono.

Desde hace algunos años el mundo recibió la noticia de que el agujero en la capa de ozono se ha reducido de forma importante, anuncio que sorprendió a la comunidad científica, ya que no se esperaba una recuperación del ozono tan rápida.

El año pasado, un grupo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts, encabezado por Susan Solomon, publicó en la revista Science que el agujero en la capa de ozono se había reducido cerca de cuatro mil millones de kilómetros cuadrados, aproximadamente la superficie de la India.

El científico mexicano Mario Molina señaló que, de acuerdo con los avances mostrados en su recuperación, la capa de ozono podría llegar a recuperarse completamente en aproximadamente dos décadas, siempre y cuando se sigan reduciendo las emisiones de clorofluorocarbonos.

Actualmente, nuestro país ha eliminado el 99% de las sustancias que dañan a la capa de ozono y es el primer país de América Latina que cuenta con las instalaciones y tecnología adecuadas para la disposición y el manejo de dichas sustancias.

Sin duda, México es un referente obligado en materia de protección a la capa de ozono, fue el primer país que ratificó el Protocolo de Montreal, demostrando que los países en desarrollo también debían tener el compromiso para proteger el medio ambiente.

Este es el camino que debemos seguir a fin de construir un México sostenible y un futuro prometedor para las futuras generaciones.

 

Senador por el PRI de Sinaloa

@AaronIrizar

Facebook.com/aaron.irizarlopez

El pasado 16 de septiembre, paralelamente a los festejos patrios, se celebró el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, en conmemoración de la firma del Protocolo de Montreal, instrumento global que cumple 30 años de su creación y el cual tiene como principal objetivo la protección de la capa de ozono a través de medidas para controlar y progresivamente eliminar la producción y utilización de sustancias que la agotan.

El ozono, que químicamente se representa como O3, es un gas que se encuentra en la estratósfera de nuestro planeta entre 10 y 40 kilómetros de distancia de la superficie terrestre. Aunque su presencia es menor que la de otros gases en el planeta, el ozono es un elemento esencial para la vida humana, ya que funciona como un escudo natural que repele la radiación de los rayos ultravioleta provenientes del sol, los cuales son dañinos para los seres vivos.

En los años ochenta, gracias a las investigaciones sobre el medio ambiente atmosférico desarrolladas por científicos del mundo como el ingeniero químico mexicano Mario Molina, se demostró que había un agotamiento de la cantidad de ozono sobre la región de la Antártida, fenómeno al cual se le denominó como “agujero de la capa de ozono” y se determinó que constituía una seria amenaza ambiental y para la salud de los seres humanos.

La disminución del ozono en la estratósfera, se encuentra relacionada con el aumento de casos de cáncer en la piel, cataratas, afectaciones a los animales y a las plantas, así como con el cambio climático, debido a que hay una mayor penetración de los rayos ultravioleta a la tierra.

La causa del agujero en la capa de ozono es la utilización de sustancias que contienen clorofluorocarbonos (CFC), gases que se encuentran en los sistemas de refrigeración para aire acondicionado, aerosoles para el cabello y otros productos.

El Protocolo de Montreal fijó un calendario para eliminar gradualmente la producción y utilización de dichas sustancias, hasta ahora se han tenido progresos importantes en todo el mundo. Desde su adopción, se han dejado de emitir a la atmósfera cerca de 140 mil millones de toneladas de compuestos industriales que afectan al ozono.

Desde hace algunos años el mundo recibió la noticia de que el agujero en la capa de ozono se ha reducido de forma importante, anuncio que sorprendió a la comunidad científica, ya que no se esperaba una recuperación del ozono tan rápida.

El año pasado, un grupo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts, encabezado por Susan Solomon, publicó en la revista Science que el agujero en la capa de ozono se había reducido cerca de cuatro mil millones de kilómetros cuadrados, aproximadamente la superficie de la India.

El científico mexicano Mario Molina señaló que, de acuerdo con los avances mostrados en su recuperación, la capa de ozono podría llegar a recuperarse completamente en aproximadamente dos décadas, siempre y cuando se sigan reduciendo las emisiones de clorofluorocarbonos.

Actualmente, nuestro país ha eliminado el 99% de las sustancias que dañan a la capa de ozono y es el primer país de América Latina que cuenta con las instalaciones y tecnología adecuadas para la disposición y el manejo de dichas sustancias.

Sin duda, México es un referente obligado en materia de protección a la capa de ozono, fue el primer país que ratificó el Protocolo de Montreal, demostrando que los países en desarrollo también debían tener el compromiso para proteger el medio ambiente.

Este es el camino que debemos seguir a fin de construir un México sostenible y un futuro prometedor para las futuras generaciones.

 

Senador por el PRI de Sinaloa

@AaronIrizar

Facebook.com/aaron.irizarlopez