/ viernes 18 de febrero de 2022

La Revocación de mandato

Por una #SociedadHorizontal


Vivimos en un mundo polarizado. Señalar que en México las tensiones se agravan día con día, se ha vuelto un lugar común. En las últimas semanas, el periodismo, la libertad de expresión, los fantasmas del autoritarismo, han sido parte de una discusión acelerada y profunda. Sin embargo, más allá del debate de coyuntura, desde hace muchísimos años prevalecen profundas contradicciones en nuestro modelo político, económico, social y cultural. El asesinato de comunicadores, por solo poner un crudo ejemplo, es un botón de muestra sobre el deterioro estructural que desde hace décadas no encuentra cauce institucional de solución.

A mas de tres años de gobierno, hoy la llamada 4T se ve envuelta en debates y amplias discusiones que la cuestionan con mucho mayor contundencia. Cabe recordar que ello es parte de la libertad de expresión de la que goza el país, del avance democrático, de la propia actividad periodística.

En este contexto y siendo objetivos, los problemas en esta patria no son exclusivos de este sexenio o no son exclusivos de un color partidista. La presencia del crimen organizado en una tercera parte del territorio, la escasez de motores de crecimiento, la baja cultura de cumplimiento fiscal, la “cooptación” histórica de porciones del Estado por parte de grupos de interés en todas las clases sociales, son tan solo algunos de los cientos de problemas que se han instalado desde hace ya muchas administraciones, sin que nadie -gobiernos, partidos, sectores, grupos- logre hacer algo que verdaderamente cambie el rumbo de las cosas.

El problema no es un gobierno en particular, sino las graves contradicciones sobre las que hemos permitido que evolucione nuestra vida democrática. Esta situación, en lugar de permitirnos mejorar las cosas, ha generado nudos y ataduras que nos detienen. Para un simple botón de muestra, revisemos uno de los temas que mayor atención ha tenido y tendrá en los próximos días: la revocación de mandato. Convocada para el próximo 10 de abril, es un tema que representa las terribles contrariedades que hoy vivimos.

Por unanimidad de votos, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación confirmó el acuerdo emitido por el Instituto Nacional Electoral (INE), en el que se pide al presidente no promocionar la Revocación de Mandato. A partir de una denuncia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la que se señaló que AMLO estaría utilizando indebidamente recursos públicos, al hablar sobre el tema en una conferencia mañanera. Es decir, López Obrador no podrá promocionar el ejercicio de consulta popular en sus presentaciones públicas.

Si no puede hacerlo el presidente, ¿quién puede hacerlo? ¿Pueden los partidos políticos promover su posición frente a la revocación del mandato? No. Tampoco pueden. El INE reiteró que ningún partido político puede promover la participación ciudadana en la consulta de revocación de mandato porque es facultad exclusiva de ese órgano autónomo, apoyado en una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

¿A qué hemos llegado? No pueden promover su posición sobre el tema, a favor o en contra, las instituciones de interés público, mismas que pagamos con nuestros impuestos. Tampoco lo puede hacer el principal actor involucrado, para generar posiciones a favor o en contra. Solo puede hacerlo el INE.

Con una sociedad tan polarizada e incluso dividida, vale la pena preguntarse entonces: ¿realmente este instituto representa a la ciudadanía hoy en día? La #SociedadHorizontal tiene frente a sí el enorme reto de conducir la discusión sobre las contradicciones imperantes en el país, para provocar una verdadera evolución de nuestras instituciones, sin inercias, sesgos, ni prejuicios.

Por una #SociedadHorizontal


Vivimos en un mundo polarizado. Señalar que en México las tensiones se agravan día con día, se ha vuelto un lugar común. En las últimas semanas, el periodismo, la libertad de expresión, los fantasmas del autoritarismo, han sido parte de una discusión acelerada y profunda. Sin embargo, más allá del debate de coyuntura, desde hace muchísimos años prevalecen profundas contradicciones en nuestro modelo político, económico, social y cultural. El asesinato de comunicadores, por solo poner un crudo ejemplo, es un botón de muestra sobre el deterioro estructural que desde hace décadas no encuentra cauce institucional de solución.

A mas de tres años de gobierno, hoy la llamada 4T se ve envuelta en debates y amplias discusiones que la cuestionan con mucho mayor contundencia. Cabe recordar que ello es parte de la libertad de expresión de la que goza el país, del avance democrático, de la propia actividad periodística.

En este contexto y siendo objetivos, los problemas en esta patria no son exclusivos de este sexenio o no son exclusivos de un color partidista. La presencia del crimen organizado en una tercera parte del territorio, la escasez de motores de crecimiento, la baja cultura de cumplimiento fiscal, la “cooptación” histórica de porciones del Estado por parte de grupos de interés en todas las clases sociales, son tan solo algunos de los cientos de problemas que se han instalado desde hace ya muchas administraciones, sin que nadie -gobiernos, partidos, sectores, grupos- logre hacer algo que verdaderamente cambie el rumbo de las cosas.

El problema no es un gobierno en particular, sino las graves contradicciones sobre las que hemos permitido que evolucione nuestra vida democrática. Esta situación, en lugar de permitirnos mejorar las cosas, ha generado nudos y ataduras que nos detienen. Para un simple botón de muestra, revisemos uno de los temas que mayor atención ha tenido y tendrá en los próximos días: la revocación de mandato. Convocada para el próximo 10 de abril, es un tema que representa las terribles contrariedades que hoy vivimos.

Por unanimidad de votos, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación confirmó el acuerdo emitido por el Instituto Nacional Electoral (INE), en el que se pide al presidente no promocionar la Revocación de Mandato. A partir de una denuncia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la que se señaló que AMLO estaría utilizando indebidamente recursos públicos, al hablar sobre el tema en una conferencia mañanera. Es decir, López Obrador no podrá promocionar el ejercicio de consulta popular en sus presentaciones públicas.

Si no puede hacerlo el presidente, ¿quién puede hacerlo? ¿Pueden los partidos políticos promover su posición frente a la revocación del mandato? No. Tampoco pueden. El INE reiteró que ningún partido político puede promover la participación ciudadana en la consulta de revocación de mandato porque es facultad exclusiva de ese órgano autónomo, apoyado en una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

¿A qué hemos llegado? No pueden promover su posición sobre el tema, a favor o en contra, las instituciones de interés público, mismas que pagamos con nuestros impuestos. Tampoco lo puede hacer el principal actor involucrado, para generar posiciones a favor o en contra. Solo puede hacerlo el INE.

Con una sociedad tan polarizada e incluso dividida, vale la pena preguntarse entonces: ¿realmente este instituto representa a la ciudadanía hoy en día? La #SociedadHorizontal tiene frente a sí el enorme reto de conducir la discusión sobre las contradicciones imperantes en el país, para provocar una verdadera evolución de nuestras instituciones, sin inercias, sesgos, ni prejuicios.