/ domingo 22 de julio de 2018

La seguridad, salud y condiciones de trabajo para el Jefe de Estado

Mucho se ha analizado y discutido, respecto de la supresión del Estado Mayor Presidencial como responsable de la integridad de la principal institución de nuestro sistema y régimen políticos. Cada titular del Poder Ejecutivo, siguiendo la imprescindible obra de Daniel Cosío Villegas, tiene su “estilo personal de gobernar”. Ahora, a partir del próximo 1 de diciembre, no será diferente.

El candidato triunfador, se ha referido a que la suya será una Presidencia de la República itinerante, quizá inspirado en la situación juarista durante la intervención francesa. Dicho anuncio demandará desde luego, por más austera que vaya a ser la administración federal, ciertas condiciones de seguridad, confort y condiciones para que Andrés Manuel López Obrador, pueda mejor hacer su trabajo. Incluso deberán acompañarlo, dependiendo de la temática de la gira, algunos secretarios del gabinete, funcionarios de primer nivel y un equipo logístico, a todas luces indispensable para aportar el ambiente necesario.

Pensemos, que como sucede año con año, en las tragedias que azuelan a nuestro país como consecuencia de terremotos, inundaciones y desastres naturales en general. La presencia de las Fuerzas Armadas y del Presidente de la República, siempre anima a la población afectada. Pero al mismo tiempo, él y su equipo de civiles y militares, corren peligro. Varias han sido las trágicas anécdotas sobre todo, de integrantes del Estado Mayor Presidencial que han perdido la vida ya sea antes o después de la visita del Presidente a una zona devastada.

Para el siguiente sexenio, es obligado hacer las cosas diferentes pero mejor. Y en eso va el ejercicio a cabalidad de las facultades de la Presidencia de la República. De allí que insistir en las garantías que el Estado Mayor Presidencial o la instancia que se vaya a encargar de ello, será determinante para la estabilidad del sistema político e incluso, del Estado mexicano. No es una exageración señalarlo, si se le compara con la forma en que en otros países salvaguardan a la persona que representa la voluntad mayoritaria de la población así como la proyección de los intereses de la Nación.

El Presidente de la República, vale recordarlo, es el único General y Almirante de cinco estrellas. Es por denominación constitucional Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas. De allí que cualquier afectación por mínima o sencilla que sea, será entonces, responsabilidad de todos los militares, sin excepción. Por lo tanto, ellos mismos, los militares, deberán cuidarlo, estar atentos a sus requerimientos en tanto titular de la máxima institución como es la Presidencia de la República.

Carecer de seguridad militar para el Jefe del Poder Ejecutivo, se trata de un riesgo innecesario. La lealtad institucional del Estado Mayor Presidencial, como parte de las Fuerzas Armadas, está más que demostrada con las tres alternancias que hemos vivido en lo que va del siglo XXI. La del 2000 con el PAN, la de 2012, con el PRI y ahora con Morena.


javierolivaposada@gmail.com

@JOPso


Mucho se ha analizado y discutido, respecto de la supresión del Estado Mayor Presidencial como responsable de la integridad de la principal institución de nuestro sistema y régimen políticos. Cada titular del Poder Ejecutivo, siguiendo la imprescindible obra de Daniel Cosío Villegas, tiene su “estilo personal de gobernar”. Ahora, a partir del próximo 1 de diciembre, no será diferente.

El candidato triunfador, se ha referido a que la suya será una Presidencia de la República itinerante, quizá inspirado en la situación juarista durante la intervención francesa. Dicho anuncio demandará desde luego, por más austera que vaya a ser la administración federal, ciertas condiciones de seguridad, confort y condiciones para que Andrés Manuel López Obrador, pueda mejor hacer su trabajo. Incluso deberán acompañarlo, dependiendo de la temática de la gira, algunos secretarios del gabinete, funcionarios de primer nivel y un equipo logístico, a todas luces indispensable para aportar el ambiente necesario.

Pensemos, que como sucede año con año, en las tragedias que azuelan a nuestro país como consecuencia de terremotos, inundaciones y desastres naturales en general. La presencia de las Fuerzas Armadas y del Presidente de la República, siempre anima a la población afectada. Pero al mismo tiempo, él y su equipo de civiles y militares, corren peligro. Varias han sido las trágicas anécdotas sobre todo, de integrantes del Estado Mayor Presidencial que han perdido la vida ya sea antes o después de la visita del Presidente a una zona devastada.

Para el siguiente sexenio, es obligado hacer las cosas diferentes pero mejor. Y en eso va el ejercicio a cabalidad de las facultades de la Presidencia de la República. De allí que insistir en las garantías que el Estado Mayor Presidencial o la instancia que se vaya a encargar de ello, será determinante para la estabilidad del sistema político e incluso, del Estado mexicano. No es una exageración señalarlo, si se le compara con la forma en que en otros países salvaguardan a la persona que representa la voluntad mayoritaria de la población así como la proyección de los intereses de la Nación.

El Presidente de la República, vale recordarlo, es el único General y Almirante de cinco estrellas. Es por denominación constitucional Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas. De allí que cualquier afectación por mínima o sencilla que sea, será entonces, responsabilidad de todos los militares, sin excepción. Por lo tanto, ellos mismos, los militares, deberán cuidarlo, estar atentos a sus requerimientos en tanto titular de la máxima institución como es la Presidencia de la República.

Carecer de seguridad militar para el Jefe del Poder Ejecutivo, se trata de un riesgo innecesario. La lealtad institucional del Estado Mayor Presidencial, como parte de las Fuerzas Armadas, está más que demostrada con las tres alternancias que hemos vivido en lo que va del siglo XXI. La del 2000 con el PAN, la de 2012, con el PRI y ahora con Morena.


javierolivaposada@gmail.com

@JOPso