Un experto dice de la Tolerancia “lo tolerante es tolerable, pero, hay acciones intolerables por ser intolerantes”.
En la Agenda; ¡ hoy sábado 16 de noviembre de 2019 !, las Naciones Unidas (ONU) celebra el Día Internacional para la Tolerancia. António Guterres, Secretario General del Organismo, señala oportunidades en el horizonte: “Las personas no nacen para odiar; la intolerancia se aprende y, por lo tanto, se puede prevenir y desaprender”.
La ONU destaca tres aspectos del Fomento de la Tolerancia y no Violencia que consideramos de interés difundir y comentar:
1. “Es más importante que nunca en una era en la que el extremismo y el radicalismo violentos van en aumento y los conflictos se caracterizan por un menosprecio fundamental de la vida humana.”
Reflexionamos que en el México de nuestros días, al analizar los términos clave: extremismo, radicalismo, violencia, aumento, menosprecio a la vida humana y la “Pirámide del odio”, si bien, es tema presente en grupos vulnerables, es de baja prevalencia en odio e ideologías.
Digamos que nuestros retos son mayores, los vinculados a los perfiles violentos, entre otros, las cadenas de producción - suministro con objetivos financieros en oferta y demanda de sustancias psicoactivas, y consecuencias negativas a la salud personal y pública. Segmentados en dos mercados: el interno y externo.
Quizá, si se pidiera la opinión de expertos, acerca del llamado “gen del mal” [de la predisposición genética a conductas violentas]. Las conclusiones de su presencia sería baja. Se acotan sus causas, y obligatoriamente conduce a los factores preparantes y desencadenantes. Sin duda, las respuestas requieren del enfoque sistemático a la solución de problemas y toma de decisiones con objetivos múltiples.
2. “La tolerancia reconoce los derechos humanos universales y las libertades fundamentales de los otros. La gente es naturalmente diversa; solo la tolerancia puede asegurar la supervivencia de comunidades mixtas en cada región del mundo.”
Observamos que en nuestro país, la Ciudad de México destaca en el respeto a los derechos universales y las libertades fundamentales de terceros. Un ejemplo, se fortalecen los protocolos de actuación para aplicarlos con apego a la normativa y desde una mirada puntual de los derechos humanos en los diferentes ámbitos de la vida cotidiana.
3. ¿Cómo luchar contra la intolerancia? La ONU; señala cinco requerimientos: Un marco legal, educación, acceder a la información, toma de conciencia individual y soluciones locales… Respecto, de la toma de conciencia individual, refiere: “La intolerancia en la sociedad es la suma de las intolerancias individuales. Por eso, debemos examinar nuestro papel en el círculo vicioso que lleva a la desconfianza y violencia en la sociedad”.
Siguiendo a la “toma de conciencia individual”; viene a la memoria, la “teoría de la ventanas rotas” que alienta en el prevenir, comportamientos y estilos de vida, para “solucionar los problemas cuando son pequeños, antes que se conviertan en criaturas con múltiples cabezas…una forma y fondo menos radical, más aceptado que el término “cero tolerancia”.
Es oportuno que los que estamos en este tejido social, llamado México, “bajarle tres rayitas” a los intereses particulares para fomentar el bien común. Sin duda, un buen camino, para los escenarios deseados y esperados del bienestar en la comunidad. Entre otros paradigmas, cambiemos: “Hágase la justicia, en los bueyes de mi compadre” por “La justicia debe ser igual para todos”.
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