/ domingo 30 de diciembre de 2018

¿Les gustó el 2018?

Llegado el final de cada año, no puedo evitar preguntarme y al mismo tiempo hacer este cuestionamiento a los demás: ¿te gustó el año que concluye?

Por supuesto, en lo personal, cada quien habla de cómo le fue en la feria, lo bueno, lo malo, lo regular, etc. En cuanto a lo colectivo, finalmente se acaban viendo las cosas del mismo modo, ya que sucesos que para algunos pudieron ser los más felices, para otros cuantos implicaron cosas catastróficas.

Finalmente hay que recordar algo, incluso en los más graves procesos de crisis, el dinero existente sigue siendo el mismo, el problema es que pasa de unas manos a otras, con frecuencia dejando descobijados a los más, para cubrir a los menos. Por otra parte, está la forma en que ven los chinos todos los procesos difíciles en nuestras vidas, ellos señalan que crisis es igual a oportunidades y es cierto, sólo que hay que estar en condiciones para aprovecharlas.

Por ejemplo, en plena crisis de 1995, Carlos Slim, con su innegable olfato para hacer negocios, dijo que era una buena ocasión para adquirir gangas, algo que por lo visto no sólo apreció el magnate más grande que tenemos en este país, sino otras grandes corporaciones mundiales. Recordemos lo que hizo Nestlé en aquel entonces, comprando líneas alimenticias completas, como Yogurth Chambourcy, Helados Bambino, Chocolates la Azteca y otras más, que ahora, llevan la nomenclatura de la gran empresa suiza.

De modo que mientras muchos recordamos a 1995 como un año de grandes dificultades, hay quienes pueden verlo como el período en que crecieron a alturas inconmensurables. Estuvieron en el lugar indicado, en el momento correcto y con las capacidades adecuadas para aprovecharlo.

Algo que sin duda nos será útil a todos frente al iniciante 2019, es una evaluación de nuestras propias capacidades y la mejor forma de aprovecharlas a lo largo del año, sin duda nos será mucho más útil que estar haciendo listas de propósitos de aquellas que resultan fallidas desde el momento mismo en que se escriben.

Evalúen sus talentos, potenciales, aquello para lo que hayan estudiado o se hayan preparado por la vía autodidacta. Dicen y dicen bien que cada cabeza es un mundo y es un hecho que un talento, por ejemplo, para escribir bien, no será igual de útil en una persona con orientación hacia el periodismo, que en alguien con una tendencia más empresarial en su desarrollo.

Cada año lo hacemos nosotros mismos y termina representando algo en nuestras vidas, conforme a lo que nos hayamos impulsado a hacer, ya que la vida no tiene límites y sí muchos puntos de apoyo para impulsarla. Es algo que vivimos día a día y basta que cobremos conciencia de ello para que lo aprovechemos de la mejor forma.

Insisto, ningún año pinta fácil por sí mismo y si es o no próspero o feliz, finalmente es algo que depende de nosotros, ya que si por una parte existen grandes condiciones para hacer negocios, éstos no se hacen solos, tenemos que trabajar para lograrlos y si hay voluntad y talento para desempeñarnos, terminará por no importarnos tanto que las condiciones vigentes lo faciliten, simplemente lo haremos y punto.

Hagamos una evaluación a conciencia de nosotros mismos durante el 2018, viendo qué de lo que hicimos funcionó y qué no. Aquello que podemos mejorar y cómo podemos hacerlo. Será una forma constructiva de desearnos un feliz 2018 al terminar el año, algo que facilitará el buscar un mejor 2019, insisto, en conciencia de que depende de nosotros.


¡Felicidades!


FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @Yoladelatorre


Llegado el final de cada año, no puedo evitar preguntarme y al mismo tiempo hacer este cuestionamiento a los demás: ¿te gustó el año que concluye?

Por supuesto, en lo personal, cada quien habla de cómo le fue en la feria, lo bueno, lo malo, lo regular, etc. En cuanto a lo colectivo, finalmente se acaban viendo las cosas del mismo modo, ya que sucesos que para algunos pudieron ser los más felices, para otros cuantos implicaron cosas catastróficas.

Finalmente hay que recordar algo, incluso en los más graves procesos de crisis, el dinero existente sigue siendo el mismo, el problema es que pasa de unas manos a otras, con frecuencia dejando descobijados a los más, para cubrir a los menos. Por otra parte, está la forma en que ven los chinos todos los procesos difíciles en nuestras vidas, ellos señalan que crisis es igual a oportunidades y es cierto, sólo que hay que estar en condiciones para aprovecharlas.

Por ejemplo, en plena crisis de 1995, Carlos Slim, con su innegable olfato para hacer negocios, dijo que era una buena ocasión para adquirir gangas, algo que por lo visto no sólo apreció el magnate más grande que tenemos en este país, sino otras grandes corporaciones mundiales. Recordemos lo que hizo Nestlé en aquel entonces, comprando líneas alimenticias completas, como Yogurth Chambourcy, Helados Bambino, Chocolates la Azteca y otras más, que ahora, llevan la nomenclatura de la gran empresa suiza.

De modo que mientras muchos recordamos a 1995 como un año de grandes dificultades, hay quienes pueden verlo como el período en que crecieron a alturas inconmensurables. Estuvieron en el lugar indicado, en el momento correcto y con las capacidades adecuadas para aprovecharlo.

Algo que sin duda nos será útil a todos frente al iniciante 2019, es una evaluación de nuestras propias capacidades y la mejor forma de aprovecharlas a lo largo del año, sin duda nos será mucho más útil que estar haciendo listas de propósitos de aquellas que resultan fallidas desde el momento mismo en que se escriben.

Evalúen sus talentos, potenciales, aquello para lo que hayan estudiado o se hayan preparado por la vía autodidacta. Dicen y dicen bien que cada cabeza es un mundo y es un hecho que un talento, por ejemplo, para escribir bien, no será igual de útil en una persona con orientación hacia el periodismo, que en alguien con una tendencia más empresarial en su desarrollo.

Cada año lo hacemos nosotros mismos y termina representando algo en nuestras vidas, conforme a lo que nos hayamos impulsado a hacer, ya que la vida no tiene límites y sí muchos puntos de apoyo para impulsarla. Es algo que vivimos día a día y basta que cobremos conciencia de ello para que lo aprovechemos de la mejor forma.

Insisto, ningún año pinta fácil por sí mismo y si es o no próspero o feliz, finalmente es algo que depende de nosotros, ya que si por una parte existen grandes condiciones para hacer negocios, éstos no se hacen solos, tenemos que trabajar para lograrlos y si hay voluntad y talento para desempeñarnos, terminará por no importarnos tanto que las condiciones vigentes lo faciliten, simplemente lo haremos y punto.

Hagamos una evaluación a conciencia de nosotros mismos durante el 2018, viendo qué de lo que hicimos funcionó y qué no. Aquello que podemos mejorar y cómo podemos hacerlo. Será una forma constructiva de desearnos un feliz 2018 al terminar el año, algo que facilitará el buscar un mejor 2019, insisto, en conciencia de que depende de nosotros.


¡Felicidades!


FB: YolandaDeLaTorreV

Tw: @Yoladelatorre