/ viernes 7 de febrero de 2020

Los #Lord y #Ladys en la 4T

Por: Gabriela Salido


El pasado viernes un padre de familia decidió bajarse del avión en el que viajaba el Presidente con destino a Villahermosa, argumentando razones de seguridad, razones que se traducen en salvaguardar la integridad física de sus seres queridos, su familia.


Derivado de esta acción los usuarios de redes sociales iniciaron un linchamiento utilizando diferentes hashtag como #LordMeBajo, #LordRidiculo, etc.


Esta historia escaló con un tweet de Simón Levi, quien fuera Subsecretario de Planeación Turística de la Secretaría de Turismo, cargo al que renunció en abril del 2019, donde se descalificaba al padre de familia,


Estos debates en redes sociales, producto de las acciones del Presidente de la República y las diferentes opiniones, sumando a la “pasión“ de sus defensores ha llevado a una insana y poco constructiva polarización en redes sociales.


Cada día se reproduce más las acciones que marcan o señalan a personas en lo individual. Los señalamientos del ex Subsecretario Levi ante la declaración de este padre de familia vía Twitter incluyeron la descalificación por supuestamente haber estado preso, dando a conocer una liga con un supuesto expediente judicial.


Sin embargo, con esta acción somos testigos de la inequidad en la que se encuentran los diferentes actores ante los señalamientos de personajes que hacen uso de su capacidad de llegar a sectores, medios y la posibilidad de viralizar mensajes producto de una imagen construida por el nivel de exposición que les ha proporcionado un cargo público, circunstancias que difícilmente logrará alcanzar un ciudadano común y corriente a quien está tratando de desacreditar exponiendo condiciones de su vida personal, sean o no ciertas.


Lo anterior sin dejar de lado que este tipo de señalamientos perdurarán a través del tiempo, y que como dicen: “lo que se sube a la red, permanecerá para siempre en la red”.


Suponiendo sin conceder que los señalamientos del ex funcionario fueran ciertos, la duda respecto a si el estar sujeto a procesos penales no le da derecho a una persona a tomar medidas por aquellos que quiere, al margen de que en su momento se sancionará o no las acciones derivadas del proceso judicial


Deberíamos cuestionar si nuestras leyes no representan sanción suficiente como para requerir el escarnio público y eterno que proveen las redes sociales, recordándonos la película de “La letra escarlata” donde una mujer es acusada de adulterio y condenada a llevar en su pecho una letra “A”, de adúltera, color escarlata para que todos la vean.


Curiosamente después de este penoso tuit los usuarios de redes sociales desmintieron al ex funcionario explicando que las referencias que había utilizado y promovido correspondían a un homónimo, no al padre de familia que había sido ya insultado, agredido, cuestionado y ridiculizado por los seguidores de la 4T.


¿Es necesario desacreditar todas y cada una de las voces que hablan o cuestionando a la 4T? ¿No es posible escuchar y quizás conceder posiciones distinta, aunque no coincidamos con ellas? La bruma que envuelve la intolerancia se hace patente en este tipo de reacciones y con ella el autoritarismo se asoma cada vez más violento.


Al final el ex funcionario no se ha disculpado del daño hecho al señor Francisco Quiroz, ojalá los usuarios de redes sociales exijan con el mismo apasionamiento el respeto a la diferencia de opiniones.

@gabysalido

Por: Gabriela Salido


El pasado viernes un padre de familia decidió bajarse del avión en el que viajaba el Presidente con destino a Villahermosa, argumentando razones de seguridad, razones que se traducen en salvaguardar la integridad física de sus seres queridos, su familia.


Derivado de esta acción los usuarios de redes sociales iniciaron un linchamiento utilizando diferentes hashtag como #LordMeBajo, #LordRidiculo, etc.


Esta historia escaló con un tweet de Simón Levi, quien fuera Subsecretario de Planeación Turística de la Secretaría de Turismo, cargo al que renunció en abril del 2019, donde se descalificaba al padre de familia,


Estos debates en redes sociales, producto de las acciones del Presidente de la República y las diferentes opiniones, sumando a la “pasión“ de sus defensores ha llevado a una insana y poco constructiva polarización en redes sociales.


Cada día se reproduce más las acciones que marcan o señalan a personas en lo individual. Los señalamientos del ex Subsecretario Levi ante la declaración de este padre de familia vía Twitter incluyeron la descalificación por supuestamente haber estado preso, dando a conocer una liga con un supuesto expediente judicial.


Sin embargo, con esta acción somos testigos de la inequidad en la que se encuentran los diferentes actores ante los señalamientos de personajes que hacen uso de su capacidad de llegar a sectores, medios y la posibilidad de viralizar mensajes producto de una imagen construida por el nivel de exposición que les ha proporcionado un cargo público, circunstancias que difícilmente logrará alcanzar un ciudadano común y corriente a quien está tratando de desacreditar exponiendo condiciones de su vida personal, sean o no ciertas.


Lo anterior sin dejar de lado que este tipo de señalamientos perdurarán a través del tiempo, y que como dicen: “lo que se sube a la red, permanecerá para siempre en la red”.


Suponiendo sin conceder que los señalamientos del ex funcionario fueran ciertos, la duda respecto a si el estar sujeto a procesos penales no le da derecho a una persona a tomar medidas por aquellos que quiere, al margen de que en su momento se sancionará o no las acciones derivadas del proceso judicial


Deberíamos cuestionar si nuestras leyes no representan sanción suficiente como para requerir el escarnio público y eterno que proveen las redes sociales, recordándonos la película de “La letra escarlata” donde una mujer es acusada de adulterio y condenada a llevar en su pecho una letra “A”, de adúltera, color escarlata para que todos la vean.


Curiosamente después de este penoso tuit los usuarios de redes sociales desmintieron al ex funcionario explicando que las referencias que había utilizado y promovido correspondían a un homónimo, no al padre de familia que había sido ya insultado, agredido, cuestionado y ridiculizado por los seguidores de la 4T.


¿Es necesario desacreditar todas y cada una de las voces que hablan o cuestionando a la 4T? ¿No es posible escuchar y quizás conceder posiciones distinta, aunque no coincidamos con ellas? La bruma que envuelve la intolerancia se hace patente en este tipo de reacciones y con ella el autoritarismo se asoma cada vez más violento.


Al final el ex funcionario no se ha disculpado del daño hecho al señor Francisco Quiroz, ojalá los usuarios de redes sociales exijan con el mismo apasionamiento el respeto a la diferencia de opiniones.

@gabysalido