Actualmente, las instituciones, políticos y funcionarios públicos de todo el mundo atraviesan por una importante crisis de credibilidad, por ello, es preciso fomentar la autocrítica e impulsar reformas que estén a la altura de los nuevos requerimientos e intereses de la sociedad y en beneficio del desarrollo democrático y el fortalecimiento institucional.
La democracia en México se ha construido gracias al compromiso y trabajo de millones de mexicanos que, pese a las inclemencias, han erigido las instituciones sólidas que hoy sostienen a nuestro país.
No podemos poner en peligro el legado democrático de quienes construyeron este país a lo largo del siglo XX, en este sentido, los partidos y demás agrupaciones políticas tienen la obligación de fortalecer las instituciones democráticas y representar debidamente a los ciudadanos que han depositado su confianza en ellos a través del voto.
Consciente de ello, el PRI, en su XXII Asamblea Nacional, realizó un análisis profundo y crítico al interior del partido, a través de un ejercicio democrático que permitió la participación de miles de militantes que compartieron sus opiniones sobre lo que, desde sus perspectivas, hacía falta cambiar al interior del partido para transitar hacia un nuevo PRI, acorde con la nueva realidad política y social del país.
Una de las propuestas más relevantes fue la modificación de los Estatutos, con el objetivo de eliminar los candados de elegibilidad y permitir que tanto militantes como simpatizantes no afiliados, puedan postularse como candidatos y contender por cualquier candidatura.
Hoy los mexicanos reclaman mayores espacios de participación y representatividad, ante esta nueva realidad, el PRI abre sus puertas para que todos aquellos que lo deseen puedan sumarse a nuestro proyecto de nación.
En este marco, la aspiración de José Antonio Meade representa una oportunidad para el PRI, es una persona con más de 20 años en el servicio público, donde se ha desempeñado como titular de las Secretarías de Energía, Desarrollo Social, Relaciones Exteriores y de Hacienda y Crédito Público.
No solo llama la atención por su impecable y amplia trayectoria académica y profesional, sino por su compromiso con las causas y necesidades de México.
Hace unos días la Comisión Política Permanente del Consejo Político Nacional del PRI, autorizó la solicitud del Doctor José Antonio Meade Kuribreña para registrarse en el proceso interno de selección y postulación para contender por la Presidencia de la República. Sin duda, es una muestra del avance democrático y transformador que ha comenzado al interior del partido.
En el PRI, hemos tenido la visión y la sensibilidad para distinguir los cambios y retos en la dinámica global, los hemos afrontado con acciones y estrategias de gran profundidad, que han dado lugar a un nuevo escenario nacional con un futuro más promisorio y de mayores oportunidades para nuestro país.
Las transformaciones vividas por México en los últimos años, obligan a pensar nuestro futuro de manera responsable, democrática y vanguardista. En ese escenario, José Antonio Meade cuenta con un claro panorama de los retos del país y las rutas de trabajo que se requieren para hacer de México una potencia en el siglo XXI.
Senadora por el PRI
graciela.ortiz.glez@gog.org.mx
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