/ domingo 1 de julio de 2018

Mi voto, el del corazón

Una es la responsabilidad de votar con la razón por quien sea la mejor opción entre los contendientes para la Presidencia de la República y otro es el voto del corazón, ese voto a favor del mejor candidato, del mas preparado, del de mayor experiencia en encargos públicos, del mejor ser humano. A favor del que ofrece la estabilidad de este país a través del respeto y conservación de sus instituciones.

Hay que ser claros. México, es más que un extenso territorio y más de 120 millones de habitantes; es más que un mosaico de culturas y divisiones territoriales que conforman la Federación, este país está lleno de maravillas, entre ellas la libertad de opinión, ideas y libre pensamiento que vale mucho conservar.

Hoy estaremos eligiendo titular para la Presidencia de la República pero, también para la integración del congreso de la Unión (conformado por las cámaras de senadores y diputados) así como para diferentes alcaldías y diputaciones locales, por ello entonces la importancia de acudir a las urnas a ejercer razonadamente nuestro voto del corazón, Para hacerlo por el mejor candidato dejando atras cualquier otro sentimiento que pueda influir de forma errónea en nuestra decisión, pensemos que con esto viviremos los próximos 6 años.

Las instituciones, el estado de derecho, las libertades y las maravillas de este país entre muchas otras cosas todos los días nos permiten la libre interacción social, nos resuelven problemas cotidianos y hacen posible la vida diaria. Sería muy difícil imaginar esa vida diaria sin la presencia de estas. ¿Qué sería de México sin ellas

Este cumulo de cosas, son las que tenemos que sostener, fortalecer e incluso defender ante cualquier amenaza. Por ello es que mi voto razonado será también un voto del corazón porque apoyarse en los instintos emocionales puede simplificar los procesos de decisión.

Yo sí quiero votar, votaré, y lo hare por el candidato que tiene el compromiso con el respeto a esas instituciones, con la congruencia, con el progreso, y el respeto a la historia de este país.

Y es la invitación que hago en estos momentos a todos los mexicanos. Vayan a votar, pero voten a consciencia, voten razonado, voten con la libertad que da la democracia que hoy tenemos voten con el corazón, quiero con esto hacerles reflexionar de la decisión tan importante de hacerlo y hacerlo pensando en los próximos 6 años que le deparan a esta nación.

La propia ley electoral nos concedió un lapso de tres días al terminar las campañas para reflexionar, para terminar de decidir en el caso de los que no lo hicieron antes por la mejor opción.

Votemos entonces y amanezcamos mañana 2 de julio con la tranquilidad, de haberlo hecho bien, con la congruencia que nos da la razón y con el sentimiento que nace del corazón. Porque habremos votado por esas libertades e instituciones que han hecho al México de hoy y que prometen mejorarlo para el futuro de nuestros hijos.

Porque El Corazón tiene razones, que la razón ignora.

Senador del PRI

Una es la responsabilidad de votar con la razón por quien sea la mejor opción entre los contendientes para la Presidencia de la República y otro es el voto del corazón, ese voto a favor del mejor candidato, del mas preparado, del de mayor experiencia en encargos públicos, del mejor ser humano. A favor del que ofrece la estabilidad de este país a través del respeto y conservación de sus instituciones.

Hay que ser claros. México, es más que un extenso territorio y más de 120 millones de habitantes; es más que un mosaico de culturas y divisiones territoriales que conforman la Federación, este país está lleno de maravillas, entre ellas la libertad de opinión, ideas y libre pensamiento que vale mucho conservar.

Hoy estaremos eligiendo titular para la Presidencia de la República pero, también para la integración del congreso de la Unión (conformado por las cámaras de senadores y diputados) así como para diferentes alcaldías y diputaciones locales, por ello entonces la importancia de acudir a las urnas a ejercer razonadamente nuestro voto del corazón, Para hacerlo por el mejor candidato dejando atras cualquier otro sentimiento que pueda influir de forma errónea en nuestra decisión, pensemos que con esto viviremos los próximos 6 años.

Las instituciones, el estado de derecho, las libertades y las maravillas de este país entre muchas otras cosas todos los días nos permiten la libre interacción social, nos resuelven problemas cotidianos y hacen posible la vida diaria. Sería muy difícil imaginar esa vida diaria sin la presencia de estas. ¿Qué sería de México sin ellas

Este cumulo de cosas, son las que tenemos que sostener, fortalecer e incluso defender ante cualquier amenaza. Por ello es que mi voto razonado será también un voto del corazón porque apoyarse en los instintos emocionales puede simplificar los procesos de decisión.

Yo sí quiero votar, votaré, y lo hare por el candidato que tiene el compromiso con el respeto a esas instituciones, con la congruencia, con el progreso, y el respeto a la historia de este país.

Y es la invitación que hago en estos momentos a todos los mexicanos. Vayan a votar, pero voten a consciencia, voten razonado, voten con la libertad que da la democracia que hoy tenemos voten con el corazón, quiero con esto hacerles reflexionar de la decisión tan importante de hacerlo y hacerlo pensando en los próximos 6 años que le deparan a esta nación.

La propia ley electoral nos concedió un lapso de tres días al terminar las campañas para reflexionar, para terminar de decidir en el caso de los que no lo hicieron antes por la mejor opción.

Votemos entonces y amanezcamos mañana 2 de julio con la tranquilidad, de haberlo hecho bien, con la congruencia que nos da la razón y con el sentimiento que nace del corazón. Porque habremos votado por esas libertades e instituciones que han hecho al México de hoy y que prometen mejorarlo para el futuro de nuestros hijos.

Porque El Corazón tiene razones, que la razón ignora.

Senador del PRI