/ jueves 18 de abril de 2019

Notre Dame: lecciones y reflexiones

Lamentablemente el lunes de esta semana fuimos testigos de un incendio en una zona de la catedral de Notre Dame en París, Francia. Lo que se sabe hasta el día de hoy es que la Fiscalía de París –encabezada por Rémy Heitz- inició una investigación para determinar qué fue exactamente lo que sucedió. Se descartó por completo un acto terrorista y la línea que se sigue es que fue un accidente a consecuencia de las remodelaciones que se realizan en una parte del techo de dicha catedral.

Los daños aún no se han cuantificado. Lo que sí se pudo ver, en videos que se hicieron virales, era cómo se consumía parte del techo, cómo los vitrales explotaban, y el desprendimiento y caída de la aguja central de 96 metros de altura la cual fue agregada durante el S. XIX. Sin embargo, la estructura y las dos torres frontales de 69 metros lograron salvarse, al igual que la corona de espinas que habría usado Jesús. Tristemente lo que tardó más de 180 años en construirse con una longitud total de 128 metros por 12 metros de ancho, se destruyó una parte de una zona después de nueve horas de incendio. Aún no se ha reportado con exactitud qué es lo que está intacto o qué se salvó como el órgano principal que es un destacado instrumento obra de Aristide Cavaillé-Coll (uno de los fabricantes de órganos más importantes del S. XIX) y las obras de arte que adornaban paredes y techos. Por lo que el mundo occidental aún se siente cimbrado por lo que esto representa.

HISTORIA

Notre Dame (nuestra dama en francés) comenzó a construirse en el S. XII (comenzó en el año de 1163 y concluyó en el año de 1345) tomando forma con un gran estilo gótico europeo de la época. En dicho lugar, antes existía una catedral románica. Además de que fue allí mismo donde fue edificada la primera iglesia cristiana de París, la Basílica de Saint-Etienne, alrededor del año 528. Por lo que tiene toda historia religiosa y social dentro del contexto mundial. Para la época de la Revolución Francesa, en 1789, sufrió daños profundos como la mutilación y decapitación de unas figuras que representaban a unos reyes ubicados en la fachada del lado occidental. Posteriormente, con Napoleón Bonaparte, en el año de 1804, éste fue coronado como emperador allí.

En la época de 1852 y 1870, hubo varias obras de reforma urbana y se destruyó gran parte medieval de lo que era en ese momento París, afectando todo lo que rodeaba a Notre Dame. Y en el año 1909 se hizo la Beatificación de Juana de Arco.

PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

Este monumento histórico es parte del patrimonio de la humanidad desde 1991 según datos de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, en español).

Norte Dame es una de las iglesias más visitadas del mundo, al año recibe aproximadamente 13 millones de visitantes, los cuales pagan por entrar y dichos recursos se utilizan para la remodelación. Ahora tendrá que reconstruirse, no sólo pasar por una remodelación.

Recordemos que apenas hace meses atrás también se incendió y destruyó otro patrimonio de la humanidad, me refiero al Museo Nacional de Brasil) donde se perdieron más de 20 millones de objetos.

De aquí que debemos reflexionar sobre que, o algo se está haciendo mal o se está dejando de hacer en términos de protección y prevención de daños, ya que dentro de los más de 1092 lugares considerados como patrimonio de la humanidad, se tienen reportes de daños irreversibles por falta de recursos para su mantenimiento y por el excesivo turismo que acude a visitarlos.

Se tienen datos de que la UNESCO desde el año 2000 reportó daños en Notre Dame debido a las tormentas en París y al paso del tiempo, lo cual por desgaste natural ya requería obras de mantenimiento para preservarla. Pese a esto, se tardaron más de 10 años en dar inicio a su restauración.

AYUDA INTERNACIONAL

Varios países expresaron su sentir y su solidaridad con Francia para ser parte de su reconstrucción. México hizo lo propio al expresar su ofrecimiento de poner a su disposición apoyo y conocimientos. Francia fue sumamente solidario con México ante el sismo del 2017. Incluso, actualmente miembros del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) están en París, para capacitarse en materia de preservación y rescate de patrimonio. Suena irónico pero así es esto.

CAPITAL POLÍTICO

Ante el movimiento de los chalecos amarillos (surgido en octubre del 2018 por el incremento al combustible), es momento de que el presidente galo se vuelva a empoderar ante este triste acontecimiento para unificar nuevamente a la sociedad francesa. Recordemos que lo hizo el entonces alcalde Rudy Giuliani cuando ocurrió el trágico suceso de las Torres Gemelas en Nueva York el aquel 11 de septiembre del 2001.

“La reconstrucción la haremos todos juntos.” Emmanuel Macron, Presidente de Francia.

Académica de Universidad Iberoamericana aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007

Lamentablemente el lunes de esta semana fuimos testigos de un incendio en una zona de la catedral de Notre Dame en París, Francia. Lo que se sabe hasta el día de hoy es que la Fiscalía de París –encabezada por Rémy Heitz- inició una investigación para determinar qué fue exactamente lo que sucedió. Se descartó por completo un acto terrorista y la línea que se sigue es que fue un accidente a consecuencia de las remodelaciones que se realizan en una parte del techo de dicha catedral.

Los daños aún no se han cuantificado. Lo que sí se pudo ver, en videos que se hicieron virales, era cómo se consumía parte del techo, cómo los vitrales explotaban, y el desprendimiento y caída de la aguja central de 96 metros de altura la cual fue agregada durante el S. XIX. Sin embargo, la estructura y las dos torres frontales de 69 metros lograron salvarse, al igual que la corona de espinas que habría usado Jesús. Tristemente lo que tardó más de 180 años en construirse con una longitud total de 128 metros por 12 metros de ancho, se destruyó una parte de una zona después de nueve horas de incendio. Aún no se ha reportado con exactitud qué es lo que está intacto o qué se salvó como el órgano principal que es un destacado instrumento obra de Aristide Cavaillé-Coll (uno de los fabricantes de órganos más importantes del S. XIX) y las obras de arte que adornaban paredes y techos. Por lo que el mundo occidental aún se siente cimbrado por lo que esto representa.

HISTORIA

Notre Dame (nuestra dama en francés) comenzó a construirse en el S. XII (comenzó en el año de 1163 y concluyó en el año de 1345) tomando forma con un gran estilo gótico europeo de la época. En dicho lugar, antes existía una catedral románica. Además de que fue allí mismo donde fue edificada la primera iglesia cristiana de París, la Basílica de Saint-Etienne, alrededor del año 528. Por lo que tiene toda historia religiosa y social dentro del contexto mundial. Para la época de la Revolución Francesa, en 1789, sufrió daños profundos como la mutilación y decapitación de unas figuras que representaban a unos reyes ubicados en la fachada del lado occidental. Posteriormente, con Napoleón Bonaparte, en el año de 1804, éste fue coronado como emperador allí.

En la época de 1852 y 1870, hubo varias obras de reforma urbana y se destruyó gran parte medieval de lo que era en ese momento París, afectando todo lo que rodeaba a Notre Dame. Y en el año 1909 se hizo la Beatificación de Juana de Arco.

PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

Este monumento histórico es parte del patrimonio de la humanidad desde 1991 según datos de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, en español).

Norte Dame es una de las iglesias más visitadas del mundo, al año recibe aproximadamente 13 millones de visitantes, los cuales pagan por entrar y dichos recursos se utilizan para la remodelación. Ahora tendrá que reconstruirse, no sólo pasar por una remodelación.

Recordemos que apenas hace meses atrás también se incendió y destruyó otro patrimonio de la humanidad, me refiero al Museo Nacional de Brasil) donde se perdieron más de 20 millones de objetos.

De aquí que debemos reflexionar sobre que, o algo se está haciendo mal o se está dejando de hacer en términos de protección y prevención de daños, ya que dentro de los más de 1092 lugares considerados como patrimonio de la humanidad, se tienen reportes de daños irreversibles por falta de recursos para su mantenimiento y por el excesivo turismo que acude a visitarlos.

Se tienen datos de que la UNESCO desde el año 2000 reportó daños en Notre Dame debido a las tormentas en París y al paso del tiempo, lo cual por desgaste natural ya requería obras de mantenimiento para preservarla. Pese a esto, se tardaron más de 10 años en dar inicio a su restauración.

AYUDA INTERNACIONAL

Varios países expresaron su sentir y su solidaridad con Francia para ser parte de su reconstrucción. México hizo lo propio al expresar su ofrecimiento de poner a su disposición apoyo y conocimientos. Francia fue sumamente solidario con México ante el sismo del 2017. Incluso, actualmente miembros del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) están en París, para capacitarse en materia de preservación y rescate de patrimonio. Suena irónico pero así es esto.

CAPITAL POLÍTICO

Ante el movimiento de los chalecos amarillos (surgido en octubre del 2018 por el incremento al combustible), es momento de que el presidente galo se vuelva a empoderar ante este triste acontecimiento para unificar nuevamente a la sociedad francesa. Recordemos que lo hizo el entonces alcalde Rudy Giuliani cuando ocurrió el trágico suceso de las Torres Gemelas en Nueva York el aquel 11 de septiembre del 2001.

“La reconstrucción la haremos todos juntos.” Emmanuel Macron, Presidente de Francia.

Académica de Universidad Iberoamericana aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007