/ viernes 20 de octubre de 2017

Oaxaca doliente

Difícil encontrar, durante la desastrosa administración de Gabino Cué a un oaxaqueño que no opinara que había una brutal corrupción en su desgobierno. El “tesorito” de Andrés Manuel López Obrador, clave para que accediera al cargo, resultó un fiasco y sin que mediara denuncia en su contra, acabó su sexenio y se fue, impune, a disfrutar de su enriquecimiento.

Murat, ni pinta. El joven impuesto por Los Pinos, se siente rebasado, incapaz de tomar las riendas estatales y, peor ahora, con la afectación del gran sismo. Con su llegada se esfumaron las múltiples protestas de la Sección 22 (Rama rebelde del magisterio, coincidente con la CNTE). Ni duda cabe que, siguiendo las doctas enseñanzas de su archi grillo padre -José Murat-, ya “aceitó” a los tradicionales rijosos.

Fueron estos mentores la causa del rompimiento entre el tabasqueño y Cué. Obrador es padrino y mecenas del grupo sindical disidente y se molestó con Gabino cuando les “cortó la llave” y aceptó se implementara la reforma educativa, que dejó al descubierto la porqueriza de la 22. Miles de aviadores en la nómina, control absoluto de la educación estatal, por parte de sus líderes y la constancia de que, Oaxaca es uno de los primeros lugares con deficiencias en este renglón.

Se le podría poner una palomita al susodicho exejecutivo estatal, por su decisión de imponerse a quienes se negaban a perder privilegios. Ni siquiera eso: desde el Centro se ve que le hicieron “mano de puerco” y, a sabiendas de lo que ocurría con las arcas del estado, pudieron “convencerlo” de hacer a un lado a los mentados ¿maestros?

Éstos hicieron circo y medio: vandalizaron edificios, dejaron a los niños sin clases, durante largos periodos y tomaron carreteras, provocando graves daños económicos y sociales. Así se llegó al 16 de junio, fecha en la que se determinó ponerles un hasta aquí.

Tras varios días de bloqueo carreteril, la policía estatal llegó hasta Nochixtlán y se dio una dolorosa confrontación, que dejó siete muertos, más de 400 heridos y un resentimiento feroz de los pobladores de la región.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos, a más de un año del suceso, emite una Recomendación,que ha indignado a varios sectores. Condena a la policía estatal y a la Federal -que también tomó parte-, por el uso excesivo de fuerza, la falta de coordinación del operativo y obstrucción para realizar la investigación.

De inmediato, la opinión pública, saltó. Se presume que a la policía la recibieron a balazos, por lo que tuvo que responder al fuego. Las pruebas periciales confirmaron que sus balas mataron a algunos. También las había de civiles.

Se les exige que se disculpen públicamente, por el uso excesivo de fuerza y por la mala coordinación del operativo. Lo comenté en mi espacio radiofónico, dándole la razón a la CNDH y el público respondió rabioso. Es la primera vez que escucho una defensa, a rajatabla de las fuerzas de seguridad.

Lo que se comieron los comentócratas es que, la propia Comisión exigió que se investigue y procese, a los seudo maestros que dispararon. No deben quedar impunes.

El Comisionado de la Policía Federal, emitió un documento que norma el uso de la fuerza. Nadie aspira a que les regalen rosas a los delincuentes, pero golpear, torturar y demás violaciones constantes a los Derechos Humanos es inadmisible.

La CNDH quedó como el cohetero, cuando demanda que los cuerpos policiacos actúen con profesionalismo. Los Derechos Humanos son para todos, o, ¿aspiramos a vivir bajo la ley de la selva?

 

catalinanq@hotmail.com

@catalinanq

Difícil encontrar, durante la desastrosa administración de Gabino Cué a un oaxaqueño que no opinara que había una brutal corrupción en su desgobierno. El “tesorito” de Andrés Manuel López Obrador, clave para que accediera al cargo, resultó un fiasco y sin que mediara denuncia en su contra, acabó su sexenio y se fue, impune, a disfrutar de su enriquecimiento.

Murat, ni pinta. El joven impuesto por Los Pinos, se siente rebasado, incapaz de tomar las riendas estatales y, peor ahora, con la afectación del gran sismo. Con su llegada se esfumaron las múltiples protestas de la Sección 22 (Rama rebelde del magisterio, coincidente con la CNTE). Ni duda cabe que, siguiendo las doctas enseñanzas de su archi grillo padre -José Murat-, ya “aceitó” a los tradicionales rijosos.

Fueron estos mentores la causa del rompimiento entre el tabasqueño y Cué. Obrador es padrino y mecenas del grupo sindical disidente y se molestó con Gabino cuando les “cortó la llave” y aceptó se implementara la reforma educativa, que dejó al descubierto la porqueriza de la 22. Miles de aviadores en la nómina, control absoluto de la educación estatal, por parte de sus líderes y la constancia de que, Oaxaca es uno de los primeros lugares con deficiencias en este renglón.

Se le podría poner una palomita al susodicho exejecutivo estatal, por su decisión de imponerse a quienes se negaban a perder privilegios. Ni siquiera eso: desde el Centro se ve que le hicieron “mano de puerco” y, a sabiendas de lo que ocurría con las arcas del estado, pudieron “convencerlo” de hacer a un lado a los mentados ¿maestros?

Éstos hicieron circo y medio: vandalizaron edificios, dejaron a los niños sin clases, durante largos periodos y tomaron carreteras, provocando graves daños económicos y sociales. Así se llegó al 16 de junio, fecha en la que se determinó ponerles un hasta aquí.

Tras varios días de bloqueo carreteril, la policía estatal llegó hasta Nochixtlán y se dio una dolorosa confrontación, que dejó siete muertos, más de 400 heridos y un resentimiento feroz de los pobladores de la región.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos, a más de un año del suceso, emite una Recomendación,que ha indignado a varios sectores. Condena a la policía estatal y a la Federal -que también tomó parte-, por el uso excesivo de fuerza, la falta de coordinación del operativo y obstrucción para realizar la investigación.

De inmediato, la opinión pública, saltó. Se presume que a la policía la recibieron a balazos, por lo que tuvo que responder al fuego. Las pruebas periciales confirmaron que sus balas mataron a algunos. También las había de civiles.

Se les exige que se disculpen públicamente, por el uso excesivo de fuerza y por la mala coordinación del operativo. Lo comenté en mi espacio radiofónico, dándole la razón a la CNDH y el público respondió rabioso. Es la primera vez que escucho una defensa, a rajatabla de las fuerzas de seguridad.

Lo que se comieron los comentócratas es que, la propia Comisión exigió que se investigue y procese, a los seudo maestros que dispararon. No deben quedar impunes.

El Comisionado de la Policía Federal, emitió un documento que norma el uso de la fuerza. Nadie aspira a que les regalen rosas a los delincuentes, pero golpear, torturar y demás violaciones constantes a los Derechos Humanos es inadmisible.

La CNDH quedó como el cohetero, cuando demanda que los cuerpos policiacos actúen con profesionalismo. Los Derechos Humanos son para todos, o, ¿aspiramos a vivir bajo la ley de la selva?

 

catalinanq@hotmail.com

@catalinanq